(Krems. Claudia Vásquez, 14 octubre2009)

Krems es una ciudad pequeña que parece salida de un cuento o tal vez salida de un libro de historia de la arquitectura del siglo XVIII, pero finalmente eso se mezcla y se funde con bellos supermercados, tiendas de zapatos y museos ( todo en la misma categoría ¿no?, pero bueno, ese es un tema para otra conversión).

En sí, AIR (Artist In Residence) se encuentra ubicado al interior de un gran edificio donde comparte espacio con la literatura, la arquitectura y las artes visuales. Además de contar con cómodos estudios, uno de los puntos más significativos de su política de trabajo es el posibilitar el establecimiento de vínculos con los otros residentes; vínculos en diversas capas pero que posibiliten al otro entender el modo de actuar y de operar de quien lo acompaña. AIR propone un espacio de apertura en cuanto a la lectura del trabajo del otro, de cooperación continua y de libertad metodológica.

Es así como llegué a esta ciudad a principios del mes de octubre para dejarla a fines del mismo mes. Sin embargo, mi llegada fue bastante abrupta ya que el día 3 de octubre, durante la tarde, se realizó mi primer trabajo en Viena. Dentro del contexto de La Noche de los Museos, presenté la performance "VER NO ES UN PROBLEMA DEL OJO", o más exactamente "SEHEN IST KEINE AUGENSACHE", texto tomado del Phd. Juan C. Letelier, neurobiólogo de la U. de Chile.

El texto lo escogí por la simpleza y profundizad que guarda, pues efectiva mente la visualidad es una construcción social y cultural, el ver requiere de un aprendizaje y no solo de un órgano sensitivo a nivel químico y biológico.

Decidí que era interesante experimentar y ver que sucedía con este ejercicio en otro contexto, y de un modo muy casual coincidió con la "Noche de los museos", por tanto en el centro de la ciudad, y al interior de los tres museos mas significativos de Viena, es que se pudo efectuar la performance de un modo muy satisfactorio.

Ahora me encuentro trabajando en la realización de dicha performance en la ciudad de Krems, sin embargo esta vez tendrá nuevas variaciones. A la vez AIR me está ayudando a conseguir autorización para realizar una pequeña proyección al interior de una de las iglesias de la ciudad.

El espacio del encuentro tiene un ritmo bastante relajado pero ágil a la vez, es muy saludable y agradable, además de recordar que el paisaje y el entorno natural que me rodea es un verdadero paraíso.