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En efecto, DISLOCACIÓN, iniciativa bilateral entre Suiza y Chile, constituye un esfuerzo de articulación crítica, de cara al Bicentenario, en torno a problemas sociales, económicos, culturales, políticos y mediales que toma cuerpo a través de exhibiciones, intervenciones urbanas, conferencias y actividades comunitarias en distintos espacios de la ciudad, entre ellos el MAC (Parque Forestal), el Museo Nacional de Bellas Artes, el Museo de la Solidaridad Salvador Allende, el Museo de la Memoria, Galería Metropolitana, Galería Gabriela Mistral, Cine Arte Alameda, Universidad Diego Portales y librerías Ulises. La curatoría de Ingrid Wildi Merino se pregunta por los efectos complejos de la globalización, en particular respecto de los procesos migratorios que caracterizan a la sociedad contemporánea, así como por los quiebres y cuestionamientos de identidad que ellos generan.
Los expositores son Alfredo Jaar (Chile), Thomas Hirschhorn (Suiza), Úrsula Biemann (Suiza), Lotty Rosenfeld (Chile), Boisseau & Westermeyer (Alemania/Francia), Juan Castillo (Chile), OOO Estudio (Chile), Josep María-Martín (España), Bernardo Oyarzun (Chile), RELAX (chiarenza & hauser & co) (Suiza), Camilo Yáñez (Chile), Ingrid Wilde Merino (Chile/Suiza), Voluspa Jarpa (Chile), Mario Navarro (Chile) y Claudia Aravena (Chile). Se suman conferencias con Ute Meta Bauer (Aemania) académica y curadora de la Documenta 11 (2002), Philip Ursprung (EE.UU), Jean Perret (Suiza), director del Festival Internacional de Cine Documental de Nyon, Visions du Réel, y el crítico de cine Bertrand Bacqué (Suiza).
En la obra La Cordillera de los Andes confluyen una serie de elementos que la hacen particularmente fascinante. Por una parte es un homenaje explícito que Alfredo Jaar le realiza al líder sindical Clotario Blest (1899-19900), quien fundara en 1931 la Liga Social de Chile, en 1943 la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales, en 1953 la Central Única de Trabajadores y fuera, hasta su muerte, un férreo defensor de la democracia y de los derechos de los trabajadores, impronta que para el artista se vuelve ineludible en el marco de la celebración del Bicentenario. "El fue un inagotable defensor de los trabajadores, de la democracia, su legado merece ser reconocido" señala el artista..
La obra se emplaza en la tradicional Sala de Conferencias del segundo piso del MAC, a partir de la articulación de distintas unidades. La silueta, en neón, de la Cordillera de Los Andes, fotografías en distinto formato del líder sindical, proyectos de sellos postales con su retrato y un giño de necesaria ironía a Milton Friedman, símbolo de la intervención económica norteamericana durante la dictadura militar.
Se trata del primer trabajo que Jaar realiza en Chile para Chile desde hace treinta años. La serie de fotografías de Clotario Blesto fueron tomadas en diciembre de 1983: "Nunca quise utilizarlas en ninguna obra, ni siquiera en mi retrospectiva. Es una obra que tomó veintisiete años en gestarse y la concibo como una propuesta de homenaje que trae a Clotario Best al presente en el momento en que estamos celebrando 200 años de historia como país. En esa oportunidad, mientras hacíamos las fotos, le pedí que repitiera en voz alta 'Soy la cordillera', 'Soy la cordilerra' ".
El MAC también es uno de los elementos de la obra. Su ubicación exacta, latitud/longitud, apela a su vigencia como entidad que piensa la realidad a través del las claves del arte contemporáneo, situándose, en tanto Museo universitario, como una metáfora de la construcción del país. De allí que el MAC fuera para Alfredo Jaar el único lugar posible para emplazar su obra. "Hace 30 años, desde mi proyecto sobre La Felicidad en los años setenta, que no realizaba una obra creada para Chile desde Chile. Para mí el MAC era el espacio indicado porque representa toda una historia y un gran rol".
En el Nivel 1 del MAC, se ubica Decreto público no habitable proyecto de OOO Estudio, colectivo de artistas y arquitectos comprometidos con el estudio de los procesos de transformación cultural de la ciudad. La obra emerge como un gran cubo de 5 x 2,5 mts., que apela los objeto de diseño –o de deseo- con la voluntar de evidenciar la precariedad de las políticas habitacionales respecto de la vivienda social. La ficción de la perfección se termina al pasar al interior de la obra, donde el espectador se encuentra con tres historias –Santa Teresa de La Florida, San Francisco de la Pintana y tres campamentos de Maipú, Cerrillos y Pudahuel– que hablan de la "espera" a la están sometidos quienes deben postular, como única alternativa, a la vivienda social básica.
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