Geografía del mito y la leyenda chilenos Provincia de Maule
La Piedra de la Iglesia a) En la playa de Constitución se levanta una gigantesca mole abovedada de gran altura y unos doscientos metros de largo, que presenta una entrada de forma semi ojival que horada el peñasco de un extremo a otro y cuando el mar baja permite penetrar en su interior, en el cual se ven extrañas transparencias del agua y se recogen algas multicolores. En las noches de tormenta, entre el rugir del trueno y el alumbrar del relámpago, se reúnen los náufragos del Océano Pacífico. En estas ocasiones, la roca se viste de curiosos fulgores y en su cima aves invisibles hacen coro con sus graznidos al estrépito del mar que es como un eco que resuena en los cerros y rocas vecinos. (Versión de Oreste Plath) b) Esta inmensa mole, a la que el mar embravecido no ha logrado desintegrar en miles de años, atrae las miradas de todos. Hay en su interior altares majestuosos, helechos y flores bellísimas. Dos puertas la atraviesan paralelamente y la luz del sol, al cruzarlas, le da un aspecto fantástico. Cuantos han intentado franquear estas puertas, en busca de belleza exótica y desconocida, no han vuelto más. Avanzada la noche y a unas cuantas señas del campanario, sale una procesión de víctimas ataviadas con blancas mortajas y velas encendidas, llega a la playa y continúa hasta otra roca, la Roca de las Ventanas, donde desaparece. (Versión de Elena Wegener)
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© SISIB - Universidad
de Chile y Karen P. Müller
Turina