Cada 18 de mayo se celebra el Día Internacional de los Museos, una fecha instaurada en el calendario por el Consejo Internacional de Museos (ICOM) desde 1977, que busca relevar la labor de estos espacios que son fundamentales para la preservación de la historia, el fomento del pensamiento crítico, el reconocimiento a las distintas culturas. Un trabajo posible por medio de distintos procesos de puesta en valor como son la conservación, investigación, educación y difusión patrimonial.
Bajo ese objetivo, son distintos los espacios museales que posee la Universidad de Chile, entre ellos se destaca la Sala Museo Gabriela Mistral, creada en homenaje a la primera poeta en obtener el Premio Nobel y que se encuentra pronto a cumplir 10 años de existencia. Desde sus inicios este espacio ha sido gestionado por el Archivo Central Andrés Bello de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones y en la actualidad se ha convertido en un importante centro de desarrollo cultural en el que se reflexiona en torno al patrimonio cultural por medio de diversas acciones que promueven la interacción con la comunidad.
Bajo este contexto, conversamos con Nathaly Calderón, coordinadora del Área de Educación y Mediación Cultural de la Sala Museo Gabriela Mistral, quien ha estado presente desde los inicios de este espacio y participado de las diversas exposiciones entre las que destaca “Mujeres Públicas” y la actual muestra “Mollusca. Poesía de Caracolas”.
La licenciada en Historia y Licenciada en Educación Media, mención en Historia y Geografía, ambas en la Universidad de Chile, cuenta con una amplia formación, que comprende diplomados en Patrimonio Cultural, Guion de Cine y Juego y Aprendizaje Creativo. Actualmente cursa el Magíster en Patrimonio Cultural de la Universidad de Valparaíso. Estudios que la han llevado a desarrollarse y formar un rol clave en el fortalecimiento de este espacio museal.
“Estudié primero historia y después pedagogía, hice muchos voluntariados y pasantías en museos. Desde ese momento, me di cuenta de que podía ser una salida laboral y un área a desarrollar. Hoy creo que los museos pueden ser espacios que brindan experiencias significativas a las personas, que sorprenden y nos aportan bienestar”, comentó Calderón.
¿Cuál crees que es el rol de los museos y los principales desafíos en la sociedad actual?
Creo que el panorama de los museos actualmente es bastante interesante en relación a lo que están y estamos desarrollando. Hoy en día podemos ver los museos verdes, los museos comunitarios, entre otras propuestas relacionadas con las corrientes críticas y que están realizando acciones muy importantes. Considero que cada vez más, en estos espacios estamos preocupados de construir junto a las personas, de gatillar el diálogo y el análisis profundo. En el caso de los museos patrimoniales, como lo es la Sala Museo Gabriela Mistral, no pretendemos solo mostrar objetos antiguos, nuestra misión es buscar el presente de ese pasado, generar una conexión con las personas y los problemas que tenemos. La magia de estos espacios es que nos permiten generar este tipo de conexiones.
Por otro lado, los museos nos invitan a pensar en la fragilidad de todo, de la vida y de los objetos. Muchos materiales o documentos que se resguardan aquí son conexiones únicas que tenemos con personas conocidas o anónimas de nuestra historia y que ya no existen. Por ejemplo, es sorprendente identificar algunos libros con anotaciones en sus hojas, sobre lo que estos personajes hacían o lo que pensaban. Si el libro se deteriora o desaparece, mueren también los vestigios de esas vidas. Por eso siempre destacamos la importancia de las personas que se dedican a la restauración y conservación porque logran detener el tiempo en los objetos para impedir el deterioro y conservar esas memorias.
A pesar de esta importancia, los museos enfrentan diversos desafíos como la incorporación de nuevas tecnologías. Sin embargo, el desafío más importante es el poco financiamiento en la cultura, lo que genera una falta de recursos.
¿Cómo los museos construyen comunidad a través de la educación?
Los museos son espacios únicos en que por medio de sus exposiciones abordan diversas temáticas que invitan a personas de distintas edades, orígenes y situaciones sociales a compartir, aprender y reflexionar de una forma más interactiva. En estos lugares se promueve la comprensión mutua y el diálogo entre los distintos actores y los materiales expuestos.
En nuestro caso, la propuesta educativa que tenemos en la Sala Museo, es buscar que las personas puedan participar de experiencias significativas. Esto implica que las vivencias que las personas tienen en el museo, deben guardar relación con sus propias experiencias. Por lo que los recorridos invitan mucho a la participación, a conversar y a opinar. Consideramos que estos son espacios de encuentro de valores y visiones.
¿Cuál es la relevancia de que existan los museos públicos?
Es de suma importancia que existan museos públicos, es un derecho humano la posibilidad de participar libremente en la vida cultural, las artes y las ciencias. Muchos museos privados brindan experiencias impresionantes con acceso, por ejemplo, a las últimas tecnologías. Sin embargo, no todas las personas lo pueden pagar, por eso es fundamental la existencia de estos espacios públicos, que permita que la comunidad pueda participar activamente de estos lugares.
¿Cómo consideras que la Sala Museo Gabriela Mistral aborda la discusión del cuidado medioambiental?
En la Sala Museo Gabriela Mistral tenemos actualmente la exposición “Mollusca. Poesía de Caracolas”. Es una muestra que exhibe un conjunto de alrededor de 1000 caracolas, que pertenecen a la Colección Neruda del Archivo Central Andrés Bello. Esta muestra fue un desafío en que tuvimos que orientar la mirada desde el presente a la Colección del Premio Nobel. En ese sentido, trabajamos con la artista visual Elizabeth Burmann y con la malacóloga Cecilia Osorio.
Con la profesora Cecilia Osorio, pudimos abrirnos a las ciencias y a los estudios del medio ambiente. De esta forma, la exposición tiene como objetivo reflexionar en torno a la importancia de cuidar el planeta, los desafíos de la crisis climática y el valor de la biodiversidad, por medio de las especies exhibidas en la muestra y que se caracterizan por poseer tamaños, colores y formas impresionantes. Debido a la acidificación del océano, ya prácticamente no existen moluscos de este tamaño, como nos comentó la profesora Osorio.
Asimismo, el público tiene la oportunidad de apreciar especies que hoy se encuentran en peligro crítico de extinción. Considero que conocer el valor intrínseco que estos moluscos poseen y el rol que cada uno cumple para mantener los ecosistemas del planeta, nos permite pensar en la urgencia de tomar acciones para mitigar los efectos de la crisis climática. A la vez que nos pensamos a nosotras y a nosotros mismos como parte del ecosistema planetario y, por lo tanto, tomamos conciencia de nuestros deberes.
¿Por qué es relevante la conexión entre los archivos y los museos?
En nuestro caso, el Archivo Central Andrés Bello es un espacio que resguarda principalmente el patrimonio documental de la Universidad de Chile y también del país. Generalmente, los archivos poseen poco espacio físico y pocas posibilidades de visitas masivas debido a los lineamientos de conservación. Este es un problema que tiende a limitar el acceso de las personas a estos lugares. En ese sentido, la Sala Museo Gabriela Mistral, que este año cumple 10 años de funcionamiento, se abre como una ventana del archivo. Entrega la posibilidad de que las personas puedan participar del patrimonio que resguarda la Universidad.
Si bien hoy tenemos en exhibición las caracolas de Pablo Neruda, que corresponden a objetos tridimensionales. En general, las otras exposiciones han sido sobre patrimonio documental. El desafío, en esos casos, es abordar los documentos y/u objetos, e intentar darles una tridimensionalidad. En ese sentido, junto al equipo, hemos integrado el uso de audiovisuales, talleres que apelan al tacto y a darle volumen a esos materiales que en un primer momento parecen planos: como talleres de imprenta, de pintura, de bordado, de fanzines, de esculturas, etc. Y a la vez, relevar y dar vida a las personas que están en torno a esos documentos, como los tipógrafos, escritores/as, sectores populares, entre otros.
¿Qué experiencias ofrece “Mollusca. Poesía de Caracolas”?
Esta exposición entrega una experiencia en la que convergen las artes, las ciencias, la historia, la literatura y el patrimonio. Las personas podrán apreciar la enorme biodiversidad del filo Mollusca o moluscos, que tienen impresionantes características. Contamos con la Tridacna gigas, una de las especies de moluscos más grandes del mundo (la que tenemos acá mide 50 cm y pesa 14 kilos). También tenemos micromoluscos, que solo se pueden apreciar a través de una lupa. También las Spondylus sp. que poseen impresionantes pinchos que han desarrollado durante millones de años para sobrevivir en su medio ambiente.
La invitación es a conocer, experimentar, participar y hacerse parte de estos espacios. Son lugares que enriquecen con nuevas experiencias y que a la vez se deben a sus comunidades.