El pasado 28 de octubre, la Facultad de Comunicación e Imagen (FCEI) presentó el foro Cubrir un genocidio, asistido por los periodistas palestinos Rakan S.I. Abdelraham y Salah Eldeen Walid Mohamed Abbas. La charla, abierta a todo público, se presentó como una oportunidad para conocer de primera mano el relato del día a día en la Franja, así como las inherentes dificultades de hacer periodismo desde los confines de una guerra.
La instancia, organizada por el Foro Palestino, la Facultad de Comunicación e Imagen, el Centro de Estudios Árabes de la Universidad de Chile y el Colegio de Periodistas, tuvo lugar en el Auditorio Periodista José Carrasco Tapia. La visita se produjo después de que los corresponsales palestinos lograran salir de Gaza hace poco más de un mes, tras haber reporteado para el medio australiano SBS desde la zona de conflicto por más de dos años.
La charla fue presidida por la decana de la FCEI, la profesora Loreto Rebolledo, quien agradeció la presencia de Abdelraham y Abbas en una charla que describió como “necesaria y urgente para periodistas y comunicadores”. Afirmó, además, que “la ausencia de la prensa internacional no ha significado el silenciamiento del genocidio, han sido los y las periodistas gazatíes quienes han documentado día a día los bombardeos, el hambre, el dolor y la muerte, arriesgando sus vidas en cada despacho”.
Durante su intervención, Faride Zerán, Premio Nacional de Periodismo 2007 y académica miembro del Núcleo de Memoria de la Facultad, describió los antecedentes que precedieron la declaración de guerra por parte de Israel. “Más de medio centenar de periodistas palestinos habían sido asesinados en las últimas décadas, del 2010 al 2020 por fuerzas israelíes, [...] en su intento por acallar a la prensa. Es decir, antes del 7 de octubre de 2023, Palestina ya era un cementerio para los periodistas que informaban sobre los crímenes de las fuerzas de ocupación israelí en territorios palestinos, solo que el mundo, al parecer, no se había dado cuenta”, relató.
A lo largo de la jornada, ambos comunicadores palestinos relataron su experiencia cubriendo en la Franja de Gaza, no solo como periodistas, sino también como civiles inmersos en una guerra. Describieron los dilemas éticos de su labor y las prioridades que debieron replantearse en medio del caos, aun cuando su misión principal era reportear desde el terreno. “Cuando estábamos en algún lugar, viendo a personas en peligro o bajo los escombros, a veces decidíamos simplemente rescatarlas en lugar de reportear. Estábamos allí junto a los equipos médicos, aunque nuestro trabajo prioritario era ser testigos del genocidio”, declaró Abdelraham.
Por su parte, Abbas relató en su idioma materno las circunstancias de su permanencia en la zona de conflicto. Junto a su familia, fue desplazado forzosamente hacia el sur de Gaza, donde debieron refugiarse tras abandonar su hogar. “Somos unos de los cientos de periodistas que trabajan en la Franja y que viven la misma experiencia y sufrimiento. Ambos perdimos nuestras casas, tal como la mayoría de los periodistas han perdido sus hogares y familias”, afirmó.
En cuanto a su reciente llegada a Chile, la salida de los corresponsales de la zona de conflicto fue gestionada gracias a uno de los proyectos de protección de periodistas de la UNESCO a cargo de los periodistas Mauricio Weibel, presidente del Foro Latinoamericano y Caribeño de Periodismo (FLAP) y Rocío Alorda, presidenta del Colegio de Periodistas de Chile. De acuerdo con Weibel, concretar su salida de los comunicadores fue sumamente desafiante, pues no solo se trataba de ellos, sino también de sus familias. Asimismo, cuestionó las incongruencias de algunos países occidentales: “Rakan y Salah están acá porque Australia no quiso recibirlos, y lo mismo ocurre con colegas de The Guardian, AP y Le Monde Diplomatique, rechazados en Inglaterra, EE.UU. y Francia”. En esta línea, agregó que “desde el sur global tenemos un desafío enorme en la reconstrucción de un mundo multilateral”.
Alorda, por su parte, dedicó unas palabras en homenaje a la valentía de los periodistas: “Además de ser este un espacio para escucharlos, es también para homenajear su trabajo”, afirmó. Igualmente, agradeció la labor de la Cancillería de Chile, con quienes, tras un intento fallido, lograron traer al país al grupo de personas entre las que se encontraban Rakan S.I. Abdelraham y Salah Eldeen Walid Mohamed Abbas. Respecto al proceso de evacuación de comunicadores desde Palestina, señaló que “hay una cantidad importante de corresponsales extranjeros que aún no pueden salir de Palestina”, y añadió que, “como ha señalado Reporteros Sin Fronteras, hoy día Palestina es el peor lugar del mundo para hacer periodismo”.
Finalmente, la actividad culminó con las palabras de Pablo Abufom, vocero de la Coordinadora por Palestina, quien destacó que “sin duda, para todos los presentes es muy significativo permitir traer una voz viva a estos momentos de barbarie y de genocidio”. Asimismo, llamó a “seguir movilizándonos por Palestina”. Para cerrar, invitó al público presente a una degustación de dulces árabes organizada por La Mesa Palestina, una agrupación que brinda apoyo activo a familias de ese país.
Solo unas horas después de que tuviera lugar este encuentro, durante la noche del 28 de octubre, los medios informaron que Israel había puesto fin a la tregua y reanudado de inmediato los ataques aéreos sobre el territorio palestino, que ya dejaba más de un centenar de víctimas fatales desde su reactivación. Ante este escenario, las palabras de los corresponsales cobraron especial relevancia. Tal como sentenció Abdelraham: “El periodismo es un mensaje de humanidad, por eso continuamos trabajando en esta atmósfera de riesgo, pues es el periodista quien está escribiendo la historia”.