TLC: Logro y Desafío

Santiago, 04 de junio de 2003

La firma el próximo día Sábado del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Chile y los Estados Unidos de América representa un logro de enorme importancia para nuestro país, a la vez que un reto muy significativo. La firma de este protocolo desmiente versiones de algunos medios nacionales en orden a que se habría objetado la conducta de nuestro país con relación a la intervención de USA en Irak, y tiene lugar luego de un largo periodo de negociaciones. El mismo es causa de alegría y celebraciones puesto que con el TLC se recocen los logros de la economía nacional y se abren oportunidades al potencial exportador del país como, asimismo, al atractivo que Chile representa para la inversión. No cabe duda que, junto con los Tratados ya firmados con México, Canadá, la Unión Europea y Corea, la firma que aludimos ratifica la postura sistemática de las últimas tres administraciones de gobierno en cuanto a consolidar la internacionalización de nuestra economía. Por lo tanto, se celebra también el logro de una política nacional que ha sido sistemáticamente implementada, y que pronto podría abrirnos las puertas comerciales de mercados tan importantes como Japón, India y China.

Pero el TLC que se firmará levanta también desafíos e interrogantes que tenemos que saber enfrentar en la misma línea como se hizo en el diseño de la política nacional de internacionalización. Por una parte, lo más importante de este tratado es la oportunidad que nos abre como una acreditación de calidad y seriedad de nuestra economía y de nuestras instituciones. Lo que esto ahora ha de requerir es el trabajo que debemos efectuar como país para utilizar la oportunidad y crear condiciones de inversión que permitan a Chile saltar hacia la segunda etapa exportadora.

Por otra parte, esto requerirá preguntarnos acerca de las normas ambientales, laborales y sociales que sirvan efectivamente para atraer inversión y crear estabilidad de largo plazo en nuestro medio interno. Así también requerirá reformas económicas de segunda generación que hemos debatido durante ya mucho tiempo. No existe plazo indefinido para abordar estas materias; en poco tiempo se considerará el ALCA, lo cual nos pondrá frente a la competencia de nuestros pares regionales, y levantará interrogantes acerca de nuestras efectivas ventajas comparativas para atraer la inversión y explorar adecuadamente los nuevos mercados.

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