158 Años Hacia El Futuro
15 de Noviembre de 2000
La Universidad de Chile está nuevamente de cumpleaños este próximo domingo. La vieja Casa de Bello se remoza para celebrar engalanada sus 158 años de existencia, los cuales han transcurrido siempre construyendo su ser como un verdadero faro intelectual de la Nación. Desde su inauguración, y como lo manifiesta en su discurso el eminente fundador, se ha tratado de una institución universitaria al servicio de las necesidades de Chile y de su pueblo. Una Universidad Nacional, cuya misión es la de crear y diseminar conocimiento para el desarrollo integral de la Patria, a la que se debe por esencia y tradición. En este cumpleaños ha de ratificar, con nuevos bríos, el compromiso en torno a su misión, cuando ella entra al nuevo siglo para seguir aportando al país en un contexto de excelencia, tolerancia y diversidad. Esas son las condiciones de verdad para una gran institución universitaria, donde se dé nacimiento a ideas en un contexto de amplitud y de trabajo académico de excepción.
La trascendencia de su tarea es todavía más crucial para los años que vienen. Chile abriga el sueño de lograr su desarrollo, para legar a sus hijos un país mejor. Ello requiere de un gran esfuerzo de investigación y creación, para así proporcionar los medios que permitan el éxito del país en los días de la globalización y la integración. Sólo las nuevas ideas, convertidas en tecnologías, han de ganar en el mundo del mañana, mientras que los países exitosos serán aquellos capaces de ponerlas en práctica en la producción. Sólo nuevas ideas para las políticas públicas permitirán que exista una situación social compatible con la estabilidad que requiere el desarrollo integral del país. Mejores profesionales, más y mejores postgrados, y una investigación de punta, efectiva y ligada profundamente a la docencia, son los requisitos para que ello ocurra. Por eso el país necesita a una Universidad de Chile que mantenga y acreciente su liderazgo en la Educación y en la investigación básica y aplicada. Por eso la gran institución creada por Bello debe celebrar con alegría su nuevo aniversario, sin mirar solamente a su pasado glorioso y edificante, sino también al desafiante futuro y a las tareas que le esperan para el mejor devenir de nuestro Chile. ¡Feliz cumpleaños querida Universidad!