Acceso a verduras en tiempos de pandemia

¿Cómo hacer un huerto con poco espacio?: Experta entrega claves para generar cultivos en casa

Cómo hacer un huerto con poco espacio en la pandemia
Muchos se han planteado la posibilidad de cultivar algunas verduras en su hogar en el contexto de cuarentenas por la pandemia.
Muchos se han planteado la posibilidad de cultivar algunas verduras en su hogar en el contexto de cuarentenas por la pandemia.
Debido al tamaño muchas veces reducido de las viviendas, el objetivo es aprovechar al máximo los espacios.
Debido al tamaño muchas veces reducido de las viviendas, el objetivo es aprovechar al máximo los espacios.
La profesora Cecilia Baginsky recomendó probar con cultivos de la temporada otoño invierno como lechuga, espinaca o cebolla.
La profesora Cecilia Baginsky recomendó probar con cultivos de la temporada otoño invierno como lechuga, espinaca o cebolla.

Las dificultades generadas por la pandemia para comprar alimentos, en particular verduras frescas, ha impulsado a que muchas personas se planteen la posibilidad de generar sus propios cultivos en sus hogares.

Sin embargo, la falta de espacio debido al reducido tamaño de los departamentos, el desconocimiento sobre qué tipo de plantas cultivar, y cómo obtener buenos resultados, se transforman en importantes obstáculos para quienes desean incursionar en esta área.

La profesora Cecilia Baginsky, del Departamento de Producción Agrícola de la Facultad de Ciencias Agronómicas, compartió algunas claves que deben tenerse en consideración respecto a espacio, suelo, tipo de verduras y riego para poder desarrollar cultivos en casa.

Espacio

Teniendo en cuenta las dificultades asociadas al tamaño actual de las viviendas en nuestro país, la profesora Baginsky explicó que se puede utilizar maceteros, cajas de plástico o cajoneras e incluso botellas de plástico cortadas por la mitad, siempre que cuente con una posibilidad de escurrimiento del agua, y se pueden ubicar en balcones o suspendidos de las paredes o ventanas.

Además, la académica enfatizó en que "el lugar donde se ubique el cultivo debe recibir luz solar para que crezca, por lo que es ideal que tenga orientación hacia el norte para recibir el sol durante toda la mañana, o en algún balcón. En caso de que no sea posible, hay que asegurarse que reciba el sol de la tarde o durante parte de la mañana".

La importancia de esto es que mientras menos sol reciba la planta, menor será el tamaño que alcance en su crecimiento, y por ende, el rendimiento que tenga tras su cosecha.

Suelo

Un detalle importante para que las plantas crezcan de la mejor manera es el suelo, por lo que comprar compost o tierra de hoja sería la mejor opción, pero la profesora detalló que existen alternativas que ocupan poco espacio, para desarrollar experiencias de lombricultura a baja escala.

"Sólo se necesita una cajonera con tres niveles, en la que la parte del centro tenga una rejilla o agujeros hacia el cajón del fondo. Entonces mientras el primero se deja limpio, en el segundo se reúnen los restos orgánicos de la cocina como frutas, restos de cáscaras, papas o cáscaras de huevos bien molidas, durante uno o dos días, y luego se le incorporan lombrices para que lo degraden", explicó la profesora Baginsky.

De esa manera, el material irá escurriendo hacia el cajón de más abajo, y cuando esté listo se coloca en los maceteros para fertilizar las plantas, mientras el cajón se intercambia con el primero que se encuentra limpio para continuar el proceso. 

Almácigos

Una forma de contar con mayor seguridad de que la planta crezca de forma adecuada es utilizar contenedores de cartón para huevos, o un tubo de papel de baño, y colocar en cada uno una semilla, y cuando germine, depositarlo directamente en el terreno definitivo, donde el cartón se degradará.

"A veces las semillas son tan chicas que en un cajón o macetero grande se pierden y no germinan, por eso es mejor utilizar almácigos primero y luego trasladarlo", remarcó.

Tipo de plantas

La académica explicó que debido a la época del año en el que nos encontramos lo mejor es enfocarse en cultivos de la temporada otoño invierno. "Hay muchas lechugas que se producen ahora. También puede probarse con acelga, espinaca, habas, repollo o cebolla. La albahaca, el cilantro y el perejil también son buenas opciones, porque todas crecen con temperaturas bajas y no requieren de tanto sol", aseguró.

Al contrario, especies como el tomate, los porotos, el zapallo o el maíz son de primavera y verano, por lo que requieren altas temperaturas y muchos días de sol para cultivarse de manera adecuada.

Riego y cuidados

Hay plantas que requieren más agua que otras, por lo que se debe tener cuidado de no excederse para que la planta pueda crecer de manera correcta. La profesora recomendó revisar cómo está la tierra en la zona donde se ubican las raíces, de manera de no equivocarse. "Uno puede enterrar una cuchara o el dedo, y si a los 15 o 20 cm se saca y tiene la tierra pegada porque está húmedo, no hay que regar todavía", aseguró.

En cuanto a la posibilidad de enfrentar plagas o enfermedades, la académica aseguró que estas rara vez se dan en las casas a menos que la semilla provenga de una planta enferma. Pero en caso de que aparezcan pulgones o bichos, "se puede aplicar una solución de detergente con agua, en una relación de una gotita en un litro. Pero hay que tener cuidado que la planta sea sensible, por lo que se puede aplicar en una hoja primero, y si no tiene problemas al día siguiente, aplicar en el resto de la planta", finalizó.