El miércoles 16 y jueves 17 de mayo se realizó la primera Jornada de Investigación sobre el Libro y la Lectura: "Diálogos y perspectivas sobre el texto escolar y complementario", instancia organizada por el Consejo Nacional del Libro y la Lectura (CNLL) y el Observatorio del Libro y la Lectura (OLL) de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones, que por primera vez esde el lanzamiento de la Política Nacional de la Lectura y el Libro 2015 - 2020 reunió a los diferentes actores que trabajan en torno a este tema.
La bienvenida de los asistentes estuvo a cargo de la directora de Extensión de la Universidad de Chile, Ximena Póo, quien haciendo un cruce con la coyuntura de movilizaciones feministas de las diferentes unidades académicas, destacó que este tipo de demandas "deberían permear a los textos escolares y complementarios, entregando herramientas a los niños y niñas para cuestionar los temas establecidos, desnaturalizar y fortalecer el cambio cultural".
Por su parte, la secretaria ejecutiva del Consejo Nacional del Libro y la Lectura, Paula Larraín, planteó que "el Estado y la sociedad civil deben asumir la responsabilidad de abrir espacios de reflexión crítica, que colaboren en la mejora de procesos, en la calidad de los contenidos y en las decisiones metodológicas, porque creemos firmemente que tiene un impacto directo en la calidad de la educación, la práctica lectora, en la valorización y democratización del libro".
Leonora Reyes, académica de la Facultad de Filosofía y Humanidades, fue la encargada de abrir el programa con la charla "El texto escolar en Chile, un producto(r) de memoria de educación pública". Las otras exposiciones principales estuvieron a cargo de los representantes del Ministerio de Educación Ernesto Alabarce y Francisco Riveros, quienes presentaron estudios sobre valoración del uso de textos escolares y detallaron los procesos de licitación y compra de estos materiales.
Las cuatro mesas de discusión, en tanto, estuvieron compuestas por académicos, representantes de editoriales y de los ministerios de Educación y de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. En ellas se dialogó sobre los usos y significados del texto escolar y complementario, analizando tanto el rol de estos en los procesos de construcción de conocimiento, identidad y memoria, su valoración como herramienta en la sala de clases, como también los procesos de creación, producción, licitación y adquisición.
Una de las participantes fue Loreto Jara, investigadora del área de políticas educativas de Educación 2020, que relevó la importancia de este tipo de espacios para la democratización del conocimiento, porque "es necesario poner a dialogar a los diferentes actores del mundo educativo involucrados en la producción de conocimiento, para que podamos avanzar en la distribución de los espacios de poder y en la generación de conocimiento compartido".
Otro de los ejes de discusión fue en torno a la licitación de los textos escolares, donde Alicia Manonellas, directora editorial de Ediciones del Quijote, consideró fundamental abrir espacios a diferentes actores para que exista "una mirada pluralista al invertir en textos escolares y no nos preguntemos a puertas cerradas sobre lo que se está haciendo. Los organismos van cambiando de un gobierno a otro y los diálogos se vuelven complejos porque ni siquiera los estudiosos se han encargado de trabajar con los que participan, tampoco este tema ha tenido salida a la opinión pública o a la ciudadanía. Aún faltan actores, pero espacios como estos son fundamentales y hace 10 años que no teníamos una instancia como esta".
Al término de ambas jornadas tanto los asistentes como organizadores relevaron la necesidad de abrir más espacios de discusión para la democratización y difusión del conocimiento, el fortalecimiento de la producción intelectual y la mejora continua de los textos que llegan a las aulas.