En el marco del Día Mundial del Agua conmemorado el pasado 22 de marzo, el Programa Transdisciplinario en Medio Ambiente de la Universidad de Chile (PROMA), coordinó la obra de teatro "Por la boca muere el pez". La instancia reunió a la comunidad UCH en el auditorio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, generando una instancia de reflexión en torno a las problemáticas hídricas que vive actualmente el país.
El auditorio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo fue el escenario para la realización de la obra "Por la boca muere el pez", puesta en escena del colectivo teatral La Jauría. El encuentro se centró en sensibilizar al público acerca de las temáticas que actualmente afectan a los territorios chilenos con respecto al acceso y cuidado de los recursos hídricos.
La directora de Innovación de la Universidad de Chile, Anahí Urquiza, destacó que “el agua es fundamental para la vida, sin embargo, debido a los impactos de la sociedad humana, el agua dulce y limpia cada vez está menos disponible. El día del agua nos permite recordar y conversar sobre ello. Hacer eventos de este tipo, logran recordarnos que tenemos un grave problema y debemos buscar soluciones”.
Por su parte, María Cristina Fragkou, académica de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo y coordinadora académica de PROMA, sostuvo que “estas fechas son oportunidades que reúnen a la sociedad civil a protestar, a alzar la voz contra injusticias ambientales y al deterioro de nuestro medio ambiente. A demandar marcos legales más justos y un desarrollo menos devastador para la vida en todas sus formas”.
Además, Karen Muñoz y Catalina Latorre, directora y actriz de la obra respectivamente, reiteraron que “es crucial tener un día dedicado a recordarnos que el agua está siendo explotada, que hay comunidades sufriendo estas consecuencias, y concienciar sobre la creciente crisis hídrica que afecta a múltiples regiones. Conmemorar este día no solo nos ayuda a generar conciencia, sino que también puede inspirarnos con la esperanza de aquellos que resisten y perseveran en sus territorios”.
Conmemoración y abordajes
El nacimiento del Día Mundial del Agua se remonta a la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, celebrada en Río de Janeiro en 1992. En esta instancia se enfatizó en la importancia del agua dulce para el desarrollo de la vida en la tierra, apuntando a una gestión sostenible de los recursos hídricos y apoyando la consecución del Objetivo de Desarrollo Sostenible número seis, el cual busca garantizar el acceso al agua y su saneamiento para el 2030.
En el presente, Chile vive graves problemas ambientales marcados por la escasa participación ciudadana en las resoluciones, la sobreexplotación de los territorios, la escasez hídrica y el impacto del cambio climático, entre otros factores.
Bajo este contexto, se constituye el Programa Transdisciplinario en Medio Ambiente de la Universidad de Chile, dependiente de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VID). Este espacio busca promover el desarrollo del conocimiento, el debate y la difusión sobre medioambiente. A su vez, busca fomentar la formación de alto nivel de la comunidad académica, estudiantil y profesional y contribuir a la elaboración y evaluación de políticas, entre otras.
Al respecto, Anahí Urquiza afirmó que “desde nuestra Universidad tenemos el deber de generar investigación que nos permita comprender mejor los problemas hídricos en sus diferentes dimensiones y proponer soluciones para que las actividades que se hacen en los territorios tengan menos impacto en la disponibilidad de agua, promover la protección de los ecosistemas críticos para el ciclo hídrico y visibilizar las injusticias asociadas”.
“Por la boca muere el pez”
La representación teatral visualiza las problemáticas generadas por los intereses de grandes corporaciones transnacionales por extraer recursos naturales en un territorio del centro norte de Chile. La oferta es seductora para sus habitantes, creando fuentes de trabajo, oportunidades de capacitación y desarrollo para las comunidades. Sin embargo, los costos también son elevados. De esta forma, el montaje se construye a partir de un flujo de escenas que se adentran en problemáticas en torno al impacto del agua en distintos poblados.
Desde una perspectiva feminista, la colectiva La Jauría muestra un trabajo con cruces de ficción, testimonios y documentos, evidenciando los afectos y necesidades comunitarias vitales vinculadas al agua, explicando la crisis hídrica que se ha ido alimentando en nuestro país y problematizando sobre negocios industriales sobre ello.
“Buscamos aportar en la información de la crisis hídrica, entregando datos duros que nos hagan reflexionar en torno a lo que ocurre en el país, como lo es la relación de los territorios con las empresas transnacionales y extractivistas. Buscamos acercar la problemática para concientizar y asumir no son hechos aislados, sino una realidad que se está manifestando en todo el territorio chileno”, manifestaron Catalina Latorre y Karen Muñoz, actriz y directora de la obra, respectivamente.
Ante la obra, la directora de Innovación mencionó que “el arte es una forma muy efectiva de trasmitir sentimientos, cuestionamientos y conocimientos. La obra muestra el problema en muchas de sus dimensiones, logrando además testimoniar las injusticias que están asociadas a la escasez de agua”.
Por su parte, la profesora Fragkou concluyó que “la expresión artística de los problemas e injusticias ambientales logra sensibilizar y empatizar acerca de estos temas de manera mucho más directa e impactante que cualquier artículo y cátedra. Otro elemento destacado es lo informada que está la colectiva; el cómo se nutren de las investigaciones científicas, demostrando el lazo estrecho entre las artes, ciencias y el valor del trabajo conjunto entre ambas para la lucha ambiental”.