En la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM), el pasado miércoles 25 de marzo, comenzó el primer curso impartido por la Cátedra Amanda Labarca, creada por la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile. El curso, abierto a estudiantes de todas las facultades e institutos, busca formar profesionales comprometidos con la igualdad entre hombres y mujeres.
"Las mujeres no aparecen por largos periodos de la historia y no es que no ha hayan estado presentes, sino que han sido invisibilizadas", introduce la profesora Loreto Rebolledo, directora alterna de la Iniciativa Bicentenario JGM y coordinadora académica del CFG que aborda los vínculos entre las teorías de género y las ciencias.
Entre los académicos y académicas que dictarán el curso en sus diferentes módulos se encuentra, además de Loreto Rebolledo, Paula Hernández del Centro Interdisciplinario de Estudios de Género (CIEG); Olga Grau y Kemy Oyarzún del Centro de Estudios de Género y Cultura en América Latina (CEGECAL); Claudio Nash, investigador del Centro de Derechos Humanos de la Facultad de Derecho; Clarisa Hardy, de la Fundación Dialoga; y la encargada de la Oficina de Igualdad de Oportunidades de Género, Carmen Andrade, quien dio la bienvenida a los estudiantes.
Los avances en equidad de género de la historia reciente han permitido hitos como el derecho a voto de las mujeres o su inclusión en carreras universitarias, a la vez que estudiar el rol que tuvieron en importantes avances del conocimiento en el pasado. Una de esas aristas desconocidas de la participación de las mujeres en los avances de la astronomía fue la que abordó María Teresa Ruiz en su clase.
Mujeres "computadora"
Junto con dar a conocer a los estudiantes nociones básicas de la historia del universo, los instrumentos para la medición y el estudio de la astronomía que Chile tiene en su territorio gracias a sus cielos privilegiados y los principales fenómenos presentes en la Vía Láctea y sus alrededores, María Teresa Ruiz destacó a la llamadas mujeres "computadora" o "el Harén de Pickering".
Edward Pickering, director del Observatorio de Harvard (Harvard College Observatory) durante la década de 1880, contrató cerca de 80 mujeres para trabajos de sistematización de datos que nominalmente figuraron en los registros como computadoras. "En Harvard no se permitían mujeres, así que Pickering las disfrazó de computadoras", señaló la académica.
El trabajo de estas mujeres dio como resultado avances sustanciales en la astronomía, como el sistema de clasificación de las estrellas y la relación estrella-temperatura, que es la base de la mecánica cuántica. Williamina Fleming, la primera de ellas, clasificó más de 10 mil estrellas y se calcula que el trabajo de todas alcanzó la clasificación de más de 400 mil estrellas. Fleming, Antonia Maury, Annie Jump Cannon y Henrietta Swan Leavitt son algunas de las mujeres que hoy son reconocidas por su contribución a la astronomía.
"Los principios que ellas descubrieron no llevan sus nombres, como sí lo hicieron los hombres", recalcó la astrónoma chilena. Incluso, en el caso de la astrofísica norirlandesa Jocelyn Bell, ella descubrió la primera radioseñal de un púlsar junto a su tutor de tesis, Antony Hewish, y fue él quien recibió el Premio Nobel en 1974 por este descubrimiento.
Para los estudiantes del CFG "Desafíos de la perspectiva de género en las ciencias" la clase inaugural "Las mujeres también somos hijas de las estrellas" fue una grata sorpresa que les mostró una nueva perspectiva de estudiar las ciencias de forma distinta a las ecuaciones y teoremas que suelen analizar.
Martín Canales, estudiante de Ingeniería Industrial, destacó que la profesora María Teresa Ruiz "durante el transcurso de la clase fue haciendo énfasis en qué descubrimientos fueron hechos por mujeres, poniendo hincapié en que eso lo sabemos ahora y que en su época esas mujeres fueron invisibilizadas, siendo hombres quienes se llevaron el mérito".
"Espero que el curso nos sirva para interiorizar elementos de la teoría de género en nuestra mentalidad del día a día, examinar las desigualdades que existen actualmente en nuestra área (la ingeniería) y veamos políticas que se están llevando a cabo y qué podemos hacer nosotros para aplanar la cancha", señaló el estudiante.