Un casual encuentro en uno de los salones del aeropuerto de Paris, fue el punto de partida del montaje que reunió a los académicos de nuestro plantel Juan Carlos Letelier (Facultad de Ciencias), Sonia Pérez (Facultad de Ciencias Sociales), Eduardo Vera (Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas), Verónica Palma (Facultad de Ciencias) y Jaime Campos (Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas). La performance correspondió nada menos que a la conferencia de apertura del encuentro "Protagonistas 2030", titulada "Vida e Inteligencia Artificial: La revolución que nos desafía. Implicancias éticas, sociales y tecnológicas del gran cambio".
Representándose a sí mismos los investigadores dialogaron, se preguntaron y reflexionaron desde sus respectivas disciplinas sobre uno de los temas obligados de los tiempos actuales, poniendo sobre la mesa los desafíos que impone la ciencia a la humanidad.
Vida artificial y vida natural, redes de nueva generación, reprogramación celular, humanoides, Big Data y machine learning, fueron parte de los temas que se fueron sucediendo a través de la relajada conversación en el imaginario terminal áereo, ante un público asistente entre el que se encontraba el Rector (s) Rafael Epstein, la directora del Instituto de la Comunicación e Imagen, María Olivia Mönckeberg, académicos y estudiantes de las diversas universidades chilenas invitadas al encuentro, y jóvenes secundarios.
"Por un pelo de fibra óptica uno hoy día pueden pasar varios Terabit por segundo. Eso es lo que hace que podamos conectar cualquier súper computador del mundo con otro y realmente crear una inteligencia planetaria. ¿Cómo va a afectar esto a la sociedad? Como digo yo, este mundo artificial tal vez va a dejar de ser artificial y va a a ser parte de lo natural. Los humanoides tal vez no van a ser maquinas nuestras sino parte de nuestras vidas", dijo el académico de FCFM y director de Relaciones Internacionales de nuestro plantel, Eduardo Vera, sobre las redes de nueva generación.
Refiriéndose a los avances desde la biológía, la académica Verónica Palma se sumó a la conversación relatando las posibilidades que abre la reprogramación celular, proceso que transforma una célula especializada en otro tipo celular diferente.
"En el embrión está la posibilidad de formar todos los tejidos. Entonces lo que ocurre en la reprogramación es que mediante una manipulación genética introducen en una célula adulta -que ya no podría expresar esos genes embrionales-, la posibilidad de poder expresar toda la diversidad génica (...) Imagínate el tremendo potencial que hay con esto. Solo pensando que cada año mueren decenas de miles de personas por la falta de órganos para transplantes. Imagínate si somos capaces de fabricar organoides combinando células madres, con biomateriales, con sustratos", advirtió la investigadora a lo que sus interlocutores le preguntaron: "¿O sea en el futuro se van a poder hacer órganos artificiales?". "Hacia allá vamos. Paso a paso por supuesto", afirmó Palma.
Dando otro ejemplo de cómo está el panorama de avances en la ciencia y tecnología, el profesor y neurobiólogo Juan Carlos Letelier, comentó otra novedad a sus colegas: "Esta semana se publicó un trabajo increíble: Un computador que juega Go a nivel de hiper gran maestro, se entrenó solo, sin interacción humana. Algo que se sospechaba completamente imposible. Se acaba de publicar en Nature que este computador se autoentrenó en 40 días y que juega mejor que cualquier humano".
Entonces, Jaime Campos, irrumpió en el diálogo, dando cuenta de la situación en las geociencias. "Estamos transitando hacia un mundo en el cual para poder comprender los fenómenos del planeta se requiere integrar muchos datos. Hoy sabemos que para poder comprender el planeta y cómo funcionan los terremotos, los campos magnéticos, la capa de ozono, la radiación solar, requerimos entender los balances de masa y energía que ocurren entre todos estos sistemas porque dialogan. La atmósfera dialoga con la tierra, la tierra dialoga con los océanos, con el interior del planeta, y por lo tanto, todo se reduce a tratar de entender esos datos. En Europa los centros que trabajan con Big Data, con Inteligencia Artificial y Algoritmos para tratar masivamente estos datos, permiten una aproximación en la ciencia novedosa, un nuevo paradigma".
Vida artificial y ética humana
En medio de la animada conversación que mezclaba biología, geociencia y tecnología, despertó la doctora en Psicología Social y de Desarrollo, Sonia Pérez, quinta protagonista de la conferencia, que hasta entonces dormía en un sillón cercano al resto del grupo. Y la discusión dio un giro rotundo.
"Lo que me preocupa y me complica es cómo vamos a reaccionar nosotros en una sociedad que tiene la inteligencia artificial que estamos comentando o que tiene la posibilidad y los avances como para poder tener vida eterna y clonarnos, o que tenga la posibilidad tecnológica como para que la información sea tal que logre identificar todo lo que yo haga. ¿Qué va a pasar cuando las máquinas sean capaces de producir máquinas?. Esa inteligencia es lo que nos va a hacer perder el control", advirtió Pérez.
"En realidad el futuro nos va a exigir una nueva ética que integre lo social con lo biológico, con lo tecnológico, porque claramente no lo vamos a poder construir solos, vamos a tener que saber convivir con las máquinas armoniosamente", agregó Palma a los dichos de la investigadora social.
En línea con las opiniones de ambas, Letelier señaló: "Yo creo que en un país como el nuestro lo ético es esencial porque las nuevas tecnologías van a confrontar una sociedad que no está capacitada para esto. Nuestros sistemas productivos son primitivos, seguimos exportando cobre y nuestro crecimiento es a base de exportar no de producir conocimiento. Y el futuro implica una producción mancomunada de conocimiento, la transdisciplina, en un cambio en nosotros mismos".
Finalmente, y luego que todos sus colegas emprendieran el viaje a sus destinos, la profesora Pérez dirigió unos minutos de reflexión al público presente, concluyendo: "La humanidad del futuro requiere de consciencia, de reflexión, de emoción, requiere de espíritu, voluntad, autonomía y libertad. Lo que históricamente nos ha constituido a nosotros como especie. La tecnología solo podrá ser positiva si ayuda a importantes misiones que hoy por hoy aún tenemos en deuda. Y ustedes, ¿qué harán con esto cuando sean protagonistas de este futuro?".
Entonces, irrumpió entre el público el robot Jarvis PR2, perteneciente al Laboratorio de Procesamiento y Transmisión de Voz del Departamento de Ingeniería Eléctrica (LPTV/DIE) de la FCFM, dirigido por el académico Nestor Becerra. Jarvis, plataforma robótica de última generación que fue adquirida por el laboratorio en 2014 y que es el único en su tipo en la región, caminó entre el público y dio por terminada la conferencia de apertura de la jornada.
La participación de la U. de Chile, sin embargo, no terminó ahí. Además de Jarvis en las afueras del salón de conferencia compartieron con los asistentes dos pequeños robots humanoides modelo NAO también del LPTV/DIE, quienes realizando movimientos similares a los humanos animaron los intermedios de las charlas y conferencias.
Compartiendo stand con los robots, un grupo de estudiantes convocados por la Dirección de Pregrado perteneciente a la Vicerrectoría de Asuntos Académicos, ofreció información sobre las mallas y programas académicos que ofrece nuestra Universidad a los nuevos estudiantes.
Para la clausura de la actividad volvió al escenario la Universidad de Chile, esta vez de la mano de la Big Band de la Facultad de Artes.