¿Cuántos usos posibles tiene un libro? ¿Qué tipos de público puede tener? ¿Siempre buscan un lector? Este 23 de abril investigadores, estudiosos y apasionados por este objeto sociocultural se reunieron en la Casa Central de la U. de Chile para dar inicio al seminario que busca pensar estas preguntas desde la complejidad del territorio latinoamericano. Se trata del encuentro internacional e interdisciplinario sobre el libro desde América Latina, Rastros Lectores, que reúne por primera vez en Chile a la Red Latinoamericana de Cultura Gráfica.
“Es una feliz coincidencia que estemos inaugurando este seminario en la sala dedicada a Ignacio Domeyko en el marco del Día Internacional del Libro. Parecen ser buenos augurios en tiempos en que el escenario del libro y la lectura en Chile presenta algunos avances, pero muchos más desafíos”, afirmó la Vicerrectora de Extensión y Comunicaciones, Faride Zeran, quien estuvo a cargo de dar la bienvenida al primer día del encuentro.
Por su parte, la directora del Archivo Central Andrés Bello, Alejandra Araya, señaló: “Los libros son para nuestro Archivo documentos preciados de los rastros de los lectores. Lectores unidos por la pasión de un objeto maravilloso, frágil y fuerte a la vez, que hoy los convoca a todos ustedes en torno a la misma pasión en este gran encuentro que también esperamos deje un rastro lector”.
El libro como objeto de memoria del poder: primer día de Rastros Lectores
La charla inaugural se tituló “Cuando la lengua se hizo libro: idiomas indígenas e imprenta colonial” y fue dictada por la académica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y coordinadora de la Red Latinoamericana de Cultura Gráfica, Mariana Garone Gravier.
La ponencia realizó un recorrido por los elementos involucrados en el modelado visual de la lengua indígena, el problema del cuidado de estas ediciones, algunos factores no lingüísticos que participan este trabajo y, particularmente, las adaptaciones materiales para la escritura tipográfica de las lenguas indígenas.
“En la edición tipográfica entran en juego aspectos que trascienden lo exclusivamente fonológico y ortográfico para incluir una serie de valoraciones morales e ideas sobre las lenguas de las culturas nativas”, explicó Garone.
La jornada continuó con la primera mesa sobre “Fabricar libros”, donde se abordó la producción de este objeto en torno a la memoria del poder. Por un lado se trabajó el tópico desde los libros copiadores de correspondencia surgidos en el siglo XVIII -correo epistolar del gobierno de Ambrosio O’Higgins- con el estudio del investigador José Araneda. Y por otro, a partir de la configuración de una identidad nacional en el paso de las imprentas a las editoriales en Uruguay -el caso de Antonio Barreiro y Ramos (1851-1916)- con el estudio del investigador Leonardo Guedes.
La moderación de esta primera mesa estuvo a cargo del académico Bernardo Subercaseaux, quien es Ph.D. en Lenguas y Literaturas Romances, director académico de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la U. de Chile y miembro del Observatorio del Libro y la Lectura.
Primera reunión en Chile de la Red Latinoamericana de Cultura Gráfica
La actividad, organizada por el Archivo Central Andrés Bello de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, el Observatorio del Libro y la Lectura de la misma unidad y la Red Latinoamericana de Cultura Gráfica (RED-CG), también permitió la realización del segundo encuentro de esta última.
La reunión se celebró el mismo lunes 23 de abril en la Sala Luisa Arce del Archivo Central Andrés Bello y tuvo como fin la organización del trabajo conjunto de los distintos miembros, entre los cuales se encuentran profesores e investigadores del núcleo patrimonial de la U. de Chile.
La Red busca promover el contacto entre instituciones y profesionales latinoamericanos que se dedican a la preservación y consolidación de la cultura gráfica, ya sea a través del desarrollo de investigaciones y programas de enseñanza y las diversas acciones inscritas en el ámbito de la historia del libro y la edición en América Latina.
“Conectarnos como latinoamericanos, saber quiénes están haciendo qué y que se transforme en una plataforma útil tanto para estudiantes, investigadores, académicos y todos quienes trabajan o estudian estas áreas” fue el objetivo, explicó Mariana Garone.
“Hay mucho trabajo, pero siento que hay un deseo enorme de colaborarnos e intercambiar información valiosa para cada investigador. Me encantan los temas y las posiciones tan variadas entre nosotros. Una diversidad favorable y beneficiosa para todos”, señaló la diseñadora gráfica de Colombia, Victoria Peters.
La instancia de convergencia en torno a la cultura gráfica cuenta con más de 100 miembros de 10 países de la región.
Entre otros ámbitos, la cultura gráfica engloba la historia del libro, el diseño gráfico, los aspectos de patrimonio bibliográfico, la producción intelectual escrita y la cultura impresa.