Palabra docente es producto de dos investigaciones; el proyecto FONDECYT regular 2008-2010 “Cuestión docente, política educacional y movimiento pedagógico en Chile: trayectoria histórica, problemas y propuestas (1918-2010)”, y el proyecto del Fondo Iniciativa Bicentenario “Subjetividad docente en Chile: voces y experiencias desde el profesorado del sistema escolar” (2013-2015), además del “Taller de documentación narrativa de experiencias pedagógicas: una estrategia de investigación-formación-acción”, coordinado por los profesores Daniel Suárez y Paula Dávila de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires y un curso desarrollado en el marco de las Jornadas de Actualización para Profesores de la Universidad de Chile en 2010, dictado por las académicas Ana Arévalo y Leonora Reyes, ambas compiladoras.
Acerca del contenido del libro, Leonora Reyes, comenta que “el texto compila cuatro momentos de taller con docentes del sistema escolar en el Chile actual. Decir esto, “Chile actual”, contiene en sí varios significados. Representa el Chile que navega en un océano transicional infinito. Un país que comprometió su educación con las sinuosas corrientes de la libertad de enseñanza y la calidad educativa. Una sociedad que sucumbió ante la ola represiva de la dictadura y junto con ello, la memoria social de un pueblo y la de sus docentes. Una memoria arrastrada hacia los profundos confines del océano, anclada en el suelo submarino y amarrada a los rieles de acero que recorren de punta a cabo el territorio del cono sureño. Pero una memoria que a pesar de ello existe, resiste en las penumbras de nuestras prácticas pedagógicas y se activa cuando reflexionamos colectivamente sobre cómo nos vinculamos con nuestros estudiantes en el acto pedagógico”.
Ana Arévalo se refirió a cómo fueron realizados los talleres “uno de los ejes fundamentales que sostuvo la realización fue una apuesta de carácter político, ético y epistemológico: la subversión de la lógica tradicional jerárquica/verticalista en la producción de conocimiento, que se da habitualmente en y desde la academia, que suele ubicar a los docentes en el lugar de subordinación al saber experto y /o como consumidores y aplicadores del conocimiento producido por aquellos. Frente a este panorama, y basándonos en el principio y derecho político y epistemológico de los y las profesoras a hablar de educación, consideramos que el conjunto de los relatos aquí producidos representa de buena forma este principio, resguardando la voz y la autoría de los y las docentes, quienes pueden y deben hablar desde sí, desde el saber asentado en su experiencia cotidiana”.
El libro fue presentado por Patricia Guerrero, académica de la Facultad de Educación de la Universidad Católica de Chile. En su presentación señaló que “la verdad es que me emocioné, lloré, me enrabié, sentí nauseas, me reí. Todo esto, porque no es ficción, es la realidad de las escuelas y profesores en tiempo del management, de carrera docente y en tiempo de escuela inclusiva. Es que este texto, cristaliza tantos años que tengo de escucha de profesores y por eso creo que me inunda”. También agregó que “el vínculo entre pares, que es lo que hace que este libro tenga sentido. Formarse, hablar, contar, no para quejarse, sino para mostrar que la situación es mucho más compleja que la voluntad y mucho más hermosa que la simple búsqueda de la excelencia. Juntarse y hablar nuevamente, porque sí, porque la pega es dura, porque es necesario y porque esto que se llama educación se co-construye. La sociedad de la excelencia dice que pensar no sirve. Claro que sirve, es necesario y protector”.
El libro se encuentra a la venta en las principales librerías de Santiago y a través de la página web de Ocho Libros Editores.