El primer informe sobre una enfermedad que afecta a las patas del huemul, un ciervo en peligro de extinción de la Patagonia se describe en un estudio publicado esta semana en PloS One y en el cual participó el profesor Cristóbal Briceño, académico de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias (FAVET).
El estudio liderado por Wildlife Conservation Society, el One Health Institute de la Universidad de California, Davis - EEUU, la Corporación Nacional Forestal (CONAF) y FAVET, reporta el hallazgo de lesiones en las patas de 24 huemules en el Parque Nacional Bernardo O'Higgins de Chile entre los años 2005 y 2010. Este parque es uno de los pocos reductos que quedan para la especie, que es endémica del escarpado terreno montañoso del sur de Argentina y Chile.
La enfermedad podal que afecta a los huemules causa dolor intenso, inflamación, pérdida parcial o completa de las pezuñas y, en muchos casos, la muerte. Los animales afectados se vuelven incapaces de moverse y buscar alimento, lo que los torna susceptibles a morir por inanición y depredación.
"Sabíamos que los huemules se estaban enfermando y muriendo con estas lesiones durante varios años, pero no conocíamos qué las estaba causando", dijo la autora Marcela Uhart, veterinaria de fauna silvestre del One Health Institute de UC Davis y directora del Programa Latinoamericano del Karen C. Drayer Wildlife Health Center. "Estamos muy satisfechos de haber encontrado una causa potencial para esta enfermedad. Ahora tenemos que aprender más para estar mejor preparados y poder ayudar a esta especie", agregó.
Especie icónica
El huemul es un ícono cultural, pues aparece junto al cóndor en el escudo de Chile y es también un símbolo de la biodiversidad de la región. Si bien actualmente sólo quedan unos 2.500 ejemplares en estado silvestre, el huemul era un habitante común de los bosques y arbustales patagónicos. Durante el siglo XIX, la pérdida de hábitat, la caza furtiva y las enfermedades del ganado comenzaron a afectar sus poblaciones. Hoy en día, el huemul es el ciervo más amenazado de Sudamérica.
"Considerando la situación crítica del huemul, este hallazgo es un paso sumamente importante para identificar e implementar soluciones", dijo el autor principal Alejandro Vila, director científico de Wildlife Conservation Society Chile. "Seguiremos trabajando estrechamente con todas las instituciones relevantes para la recuperación de esta especie emblemática", prosiguió.
Los orígenes de la enfermedad
Los análisis de laboratorio sugieren que esta enfermedad pudo haberse originado en el ganado, pero se necesita profundizar la investigación para confirmarlo. El ADN del parapoxvirus presente en la muestra estudiada es muy similar a virus bovinos.
La mayoría de los huemules afectados por la enfermedad podal (75 por ciento) se encontraron en el Valle Huemules, donde se introdujo ganado en 1991, hasta que fue retirado por la CONAF en 2004. Por el contrario, los valles más aislados, Bernardo y Katraska, siempre estuvieron libres de ganado y de esta enfermedad, donde recién aparecieron seis ciervos enfermos entre 2008 y 2010.
El estudio indica que contar con un sistema bien preparado para monitorear la población, recolectar muestras de alta calidad y enviarlas a laboratorios de diagnóstico podría ayudar a los investigadores y a las agencias de gobierno en la rápida identificación de los problemas que enfrenta el huemul y así encontrar, conjuntamente, la manera de ayudarlos.
"Es muy poco frecuente poder identificar enfermedades en especies amenazadas", dijo Uhart, agregando que "en el caso del huemul, las enfermedades son una de las razones por las que no le va bien. Un marco de colaboración que involucre a las diferentes partes interesadas puede ayudarnos a movilizar los recursos necesarios para diagnosticar problemas y ayudar a la especie".
Tal esfuerzo requiere la colaboración entre académicos, organizaciones no gubernamentales y agencias gubernamentales, enfatizan los autores. "Estamos muy contentos con el resultado de este trabajo colaborativo. Como FAVET tenemos convenios y activa colaboración con Davis U. de California, Wildlife Conservation Society y CONAF por lo que este trabajo refuerza intereses de investigación y conservación al amparo de instituciones diversas, pero con objetivos comunes”, puntualizó el académico de la U. de Chile, Cristóbal Briceño.
"Dada la complejidad de trabajar en lugares remotos y aislados, y los costos que implica la realización de diagnósticos sofisticados, reconocemos el valor de asociarnos con el mundo académico y el sector no gubernamental para resolver los problemas que amenazan a nuestras especies silvestres", sostuvo finalmente Alejandra Silva, directora Regional de CONAF de Magallanes y la Antártica Chilena.
La investigación publicada recibió apoyo financiero de CONAF, Michel Durand, la Fundación Weeden, Agnes Gundt, el Zoológico de Wuppertal, ConserLab y Wildlife Conservation Society.