“Hoy nos toca defender aquello que con mucho esfuerzo hemos conquistado. Defender no solo aquello que se erigió gracias al encuentro de las voluntades precisas, como estas construcciones maravillosas que son las universidades, sino también aquello por lo que otros, antes de nosotros, dieron su vida, como los Derechos Humanos y la democracia”, señaló en su inicio el Ministro Nicolás Cataldo, haciendo referencia a la Conferencia Magistral del Prof. Squella, Premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanidades 2009, recien realizada.
“Es nuestro deber declarar, garantizar y promover los Derechos Humanos. En ellos reside la posibilidad de materializar una vida digna, autónoma, dispuesta y capaz de abocarse a la construcción de un mundo en común”, señaló el ministro, agregando que “nuestra historia reciente nos recuerda la fragilidad de esa conquista y la memoria de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado nos recuerda que la barbarie nunca descansa, que siempre está ahí, acechándonos, y que se envalentona para desplegar su altanería inhumana precisamente cuando perdemos el rumbo”.
Palabras en las que convocó a “defender a la universidad, defender el concepto de universidad pública estatal como el espacio para la creación de conocimiento, como el lugar de la cultura y sus vertiginosas transformaciones, como el sitio de exploración y de libertad intelectual, como esos nodos que nos permiten ordenar el conocimiento del mundo y sus partes. Como ese espacio de pluralidad”, hoy puesto en duda. “Basta mirar el entorno para convencernos de ello. Las señales son abundantes”, prosiguió.
Saludando a la Universidad de Chile y su historia, destacó el rol central de esta Casa de Estudios. “Esta universidad es parte de la institucionalidad que hilvana la historia de este país”, señaló. “En su itinerario están los conflictos formadores de la república; en su currículum, la trayectoria de la formación de las distintas profesiones; en su historia, las transformaciones de nuestra sociedad; en su compromiso, las enormes contribuciones que ha hecho al desarrollo de nuestras políticas públicas”, destacó.
En su mensaje, reconoció “el enorme papel que esta universidad ha cumplido promoviendo los principios de cooperación y solidaridad en el sistema universitario, alentando y siendo ejemplo del trabajo en red, comprometiéndose con la asimilación de las transformaciones políticas y sociales que nos hemos propuesto”.
Sobre el futuro
“No pierdo de vista que tenemos muchas tareas pendientes”, indicó el MInistro Cataldo, haciéndose cargo de las múltiples complejidades actuales. “Necesitamos redoblar nuestro compromiso con la investigación científica, con el desarrollo del conocimiento, con el robustecimiento de aquello que hace posible la universidad” -enfatizando- que “sabemos que de poco sirve declamar a favor de la universidad pública estatal si no removemos aquellas trabas que agobian su funcionamiento, que obstruyen sus planes de desarrollo y las exponen a competencias desiguales, mientras les pedimos ser ejemplo de solidaridad y cooperación”.
El ministro Cataldo, invitó además, a renovar el compromiso con la educación pública, en todos sus niveles. “Me permito convocarles en esta hora crucial a defender los principios que nos han inspirado y nos tienen acá. No perdemos de vista que esa invitación debe ir acompañada de herramientas y desde el Ministerio de Educación estamos haciendo todos los esfuerzos para activarlas.
Colaboración y compromiso con el futuro
Como parte de sus palabras, el Ministro Nicolás Cataldo, puso especial énfasis en la iniciativa PACE como ejemplo de la adhesión y compromiso de la Universidad de Chile a ”aquellas políticas públicas que nos aproximan a la justicia, a la democracia y a la conquista del futuro. En esa línea, saludó de manera especial a los estudiantes, docentes y autoridades de los establecimientos educacionales que forman parte del programa PACE", presentes varios de ellos en la ceremonia.
Esta iniciativa agregó, “grafica precisamente el encuentro de voluntades a favor de la materialización del derecho a la educación, trabajando ahí donde se expresan con mayor nitidez las desigualdades de nuestro sistema”.