M. Fernández y M. van de Wyngard
Satisfecho y esperanzado de que lo de ayer haya sido sólo el puntapié inicial de una agenda más amplia se muestra el rector de la UC, Ignacio Sánchez. Su único temor es qué significa que el AFI vaya al alumno: "Si se convierte en un monto transable entre el alumno y la universidad, se desvirtúa su espíritu, que es premiar la calidad".
Más crítico es el rector de la U. Chile, Víctor Pérez, quien dice estar "decepcionado" y anuncia que pedirá que la Contraloría fiscalice los recursos públicos que van a las universidades y se regule el lobby , "para terminar con prácticas oscuras que benefician a unos pocos en perjuicio de todos".
El rector de la Usach, Juan Manuel Zolezzi, valora la Subsecretaría, pero echa de menos "una mayor inyección de recursos dentro del nuevo trato para las estatales". Los tres esperan que el ministro Lavín dé mayores detalles de la agenda de reformas que el Mineduc planea en la reunión que sostendrán con él este jueves.
En tanto, entre las privadas, las reacciones no se hicieron esperar. "Falta un nuevo trato hacia nosotros", dice el rector de la U. Adolfo Ibáñez, Andrés Benítez, y pide ser incluidos en la toma de decisiones y de tener un acceso más parejo a ayudas estudiantiles.
Jaime Vatter, rector de la U. Santo Tomás, valoró los anuncios: "Todos van en la dirección correcta; sólo me habría gustado más detalles sobre cómo se nivelará la cancha para los técnicos".
La voz de las tradicionales
VÍCTOR PÉREZ VERA
Rector U. de Chile
"Estoy decepcionado. Aquí sólo hay medidas aisladas y vagas que no abordan la reforma a la educación superior prometida por el ministro Lavín desde hace mucho tiempo. Y son medidas injustas, porque se sigue ahogando económicamente a los estudiantes y a sus familias, y a las universidades tradicionales públicas, que hacen la mejor docencia y casi toda la investigación de Chile; y se sigue permitiendo que universidades privadas nuevas tengan, en los hechos, fines de lucro".
IGNACIO SÁNCHEZ DÍAZ
Rector U. Católica
"Me alegra mucho de que se acogiera la propuesta de una Subsecretaría de Educación Superior, porque va a pavimentar la posibilidad de trabajar en forma más coordinada, con mayor poder de decisión y que le da el realce necesario a la educación superior. Creo que esto nos permitirá sacar adelante proyectos que estamos esperando hace mucho tiempo. Tengo la esperanza de que esto no sea toda la agenda de educación superior del Gobierno, sino el inicio de un trabajo en conjunto".