En su discurso, el rector Víctor Pérez hizo notar esta diferencia, asegurando que "se les ha faltado el respeto a nuestros símbolos institucionales". Agregó que los movilizados abusan "de nuestro rechazo a usar la fuerza física, que aunque legítima, siempre es dolorosa y de nociva huella".
Las palabras de Pérez fueron seguidas de un reconocimiento al movimiento estudiantil, por lo que consideró "la actitud valiente, generosa y luchadora de nuestros estudiantes". Entre los asistentes estaba Camila Vallejo.
El rector de la Casa de Bello aprovechó su discurso para criticar a las universidades privadas. Afirmó que durante el conflicto "se nos ha atacado porque hablamos de dinero. Un dinero, el público, que quienes nos atacan están empeñados en que vaya a subvencionar establecimientos de enseñanza superior que, aunque se les denomine universidades, son en verdad negocios inmobiliarios o similares, centros de irradiación ideológica, y otros empeños quizá legítimos y respetables, pero que es una vergüenza que se hagan pasar por lo que no son sólo para captar recursos".
Pérez hizo un llamado a que el presupuesto del próximo año avance en un total de diez ejes, donde destacó la postura de la casa de estudios respecto a las normas de transparencia -donde la universidad sufrió un nuevo revés ante el Tribunal Constitucional (ver nota principal)-, diciendo que no sólo las instituciones estatales deben someterse al escrutinio, en la medida que reciban recursos públicos.
En ese sentido, criticó duramente a las universidades privadas, afirmando que "es inaceptable que estas normas sólo se exijan a las universidades estatales. También deben ser exigidas a las instituciones privadas, por cuanto hay recursos públicos de por medio".