En entrevista con el diario la Tercera, el Rector Ennio Vivaldi se refirió a las críticas que ha vivido el proceso legislativo del proyecto de ley que pone fin al lucro, selección y financiamiento compartido en el sistema escolar, de parte de actores del acontecer nacional. La máxima autoridad de la Universidad de Chile destacó que “existe un esfuerzo por mejorar la educación pública y un esfuerzo por impedir que eso ocurra”.
El Rector Vivaldi enfatizó en la idea de la reconstrucción de la educación pública. En el caso particular de la educación superior, planteó que “es un chiste brutal que se diga que aquí, en Chile, existen universidades públicas y estatales”. Esto, entre otras cosas, por el cobro arancelario que hacen a sus estudiantes (con cifras similares a la de la educación privada), los que deben ser aumentados anualmente para ajustar los salarios de académicos y funcionarios. A eso agrega que la construcción y mantención de infraestructura se hace por la gestión de recursos propios, quedando las edificaciones como propiedad del Estado.
Sobre esto el Rector planteó que las instituciones de educación superior del Estado “tienen que ser reconocidas en condición de tales”, principalmente a través del financiamiento a su labor y aporte al país.
Respecto a la segregación en el sistema educacional, el Rector planteó que la PSU “se da en un país que hace más de 40 años tomó la decisión de destruir la educación pública y dejó con mala educación al 80 por ciento de los chilenos”.
Ennio Vivaldi recalcó también las acciones que realiza la Casa de Estudios para mitigar los efectos segregadores del sistema, como las becas internas para estudiantes destacados de bajo nivel socioeconómico, y la composición del estudiantado de la Casa de Bello, que se compone de tres tercios: estudiantes provenientes de establecimientos municipales, particulares pagados y particulares subvencionados.