El deporte ha ido ganando cada vez más y mejores espacios en la Universidad de Chile, tal como muestra el crecimiento que año a año tienen los Juegos Olímpicos Estudiantiles (JOE) de la Casa de Bello, que este año tuvieron su 45ª edición entre el 28 de septiembre y el 02 de octubre, en una cita que contó con 12 deportes en competencia: ajedrez, atletismo, básquetbol, fútbol, futbolito, natación, rugby 7, taekwondo, tenis, tenis de mesa y vóleibol, además del debut del balonmano, que anteriormente había sido parte de los JOE sólo como deporte de exhibición.
Los mejores exponentes de nuestra Casa de Estudios compitieron entre sí en distintas disciplinas, defendiendo a sus respectivas unidades académicas, en la actividad organizada por la Vicerrectoría de Asuntos Estudiantiles y Comunitarios a través de la Dirección de Deportes y Actividad Física, en conjunto con el Centro Deportivo de Estudiantes de la U. de Chile.
El director de Deportes y Actividad Física (DDAF) de la Casa de Estudios, Daniel Muñoz Quevedo, explicó que los resultados del encuentro han sido muy satisfactorios, y que lo más destacable es que “por primera vez podemos decir que la gran mayoría de los eventos dentro de los JOE fueron desarrollados en instalaciones nuestras, lo cual es muy significativo para la Universidad y para esta Dirección porque se ha podido mostrar e incorporar la infraestructura que se ha ido sumando al sistema, como el gimnasio nuevo de Antumapu que albergó por primera vez una actividad de los JOE que no es fútbol”.
“Se sumó toda la infraestructura de la FCFM a toda su capacidad, incorporando Domeyko, el gimnasio histórico que habíamos usado, y los dos de 851 que fueron cruciales para responder al episodio de lluvia que tuvimos el jueves”, agregó Muñoz, también destacando las nuevas instalaciones en FEN y en JGM, donde se desarrolló la final del fútbol. “La única instalación que no es propia aún es el Estadio Atlético donde competimos en la Pista Atlética, y el gimnasio de Domínica que es gestionado por la Facultad de Derecho”, puntualiza el director de la DDAF.
“No recuerdo si en alguna otra edición se haya desarrollado el cierre en una instalación propia como la final de básquetbol en Beauchef 851 donde esperamos un marco interesante de gente. En términos de la organización, tenemos una experiencia organizativa bastante aceitada, con adiciones como una cobertura quinésica de cada uno de los recintos, algo que no habíamos podido hacer”, destaca Daniel Muñoz. “No somos los protagonistas, sino que lo son las unidades académicas, y eso se nota este año con el crecimiento de algunas unidades académicas por las estrategias que han tomado, y el impacto de la nueva infraestructura deportiva en ese crecimiento”, agrega Muñoz.
Significativa es la participación como campus de Juan Gómez Millas, que no había ocurrido antes de forma conjunta, tal como lo venía haciendo Campus Sur, lo cual “ha hecho que la competencia para ver cuál es la unidad ganadora sea mucho más estrecha”, enfatizó Muñoz, quien indicó que el crecimiento de las unidades explica el nivel de la competencia. “Llevamos un trabajo de años con una estrategia clara en apoyo a las unidades, construcción de una infraestructura adecuada, y claro, no podemos entregar mismas condiciones para todos los deportes en todas las unidades para una universidad que territorialmente está fragmentada como la nuestra, pero sí tratamos de elevar el nivel, y eso está generando resultados”, afirmó.