Señor Director:
El ministro Cristián Larroulet destacó el acuerdo en la Cámara de Diputados del proyecto de lobby y explicó que "se obliga a los sujetos pasivos de lobby(poderes Ejecutivo y Legislativo, más fiscalías) que tengan que publicitar en sus páginas web las audiencias que ellos otorgan a personas que persiguen y promueven intereses particulares ya sea con acciones remuneradas o no remuneradas".
Lo anterior confirma que el proyecto aprobado aborda a las agencias de lobby solo en lo formal, con lo que seguiremos con escándalos de colusión de farmacias; acreditaciones universitarias falsas; ciudadanos convertidos en clientes cautivos de bancos, supermercados e isapres, y aprobación forzada o sanciones simbólicas a proyectos con graves daños sociales y ambientales. En todos esos casos, el tráfico de información, influencias y dinero de las agencias de lobby se hace con total impunidad a través de reuniones sociales, llamadas telefónicas, mensajes de texto y correos electrónicos, y no en audiencias formales.
La nueva ley debe forzar a las agencias de lobby a informar públicamente sobre su lista de clientes y los temas que están planteando a cada autoridad, para evitar presiones que fuercen la voluntad democrática a favor de intereses particulares, más aún en momentos en que se siguen tramitando o dejando de tramitar proyectos de ley de gran interés social, cívico y económico.
Víctor Pérez Vera
Rector Universidad de Chile