Fue en el invierno de 2019 cuando un grupo de estudiantes de la Facultad de Derecho escuchó la noticia de que sería una de las temporadas más frías en años. Esto los motivó a organizarse e ir en ayuda de las personas que viven en situación de calle en las cercanías de Pío Nono, sin imaginar que la iniciativa seguiría creciendo.

Afirman que, pese a la pandemia, el proyecto ha crecido mucho y las personas que han conocido incluso se han transformado en familia, logrando algunas personas, salir de la situación de mayor vulnerabilidad.
La estudiante de cuarto año de Derecho U.Chile y una de las fundadoras de la organización, Camila Requena, señala que esto responde a que somos conscientes de que “hay un sector importante que ha sido invisibilizado históricamente, que son las personas en situación de calle y estamos todos tan sumergidos en el individualismo que se ha ido perpetuando y tendemos a ignorar estas realidades”.
A través de suscripciones y recaudación, la organización se ha podido financiar y seguir ayudando a personas en situación de calle en otros sectores de la capital, con cajas de mercadería, ropa de invierno, frazadas y carpas, sin embargo, lo que hoy sigue haciendo falta es la ayuda interdisciplinaria.

Si quieres conocer más o colaborar con Manitos a la calle, puedes contactarlos a través de su Instagram @manitosalacallee