Nuevamente el Consejo de Facultad de la FCFM recibió a un invitado especial para conocer las opiniones de personalidades del ámbito público e industrial.
El expresidente de la República (2000-2006), Ricardo Lagos, y también Profesor Emérito de la Universidad de Chile (2005), agradeció la invitación a compartir con un grupo de expertos en materias de ingeniería y ciencias, su mirada sobre los desafíos y necesidades del país.
“Estamos viviendo una época de cambios, donde no nos damos cuenta de la rapidez de las transformaciones que surgen. Desde el punto de vista político, vivimos una horizontalidad con la población donde los políticos realizan una declaración pública y al minuto ya tienen respuestas de la ciudadanía en las redes sociales con diez tweets.”, describió Ricardo Lagos sobre el nuevo escenario de Chile.
“Tenemos una ciudadanía más demandante, exigente y que se siente más empoderada (…) En tanto, tenemos una crisis política de envergadura, nunca antes vista, con una percepción de elite, de clase privada, que tenemos que reponer, porque es muy peligroso para la democracia”, añadió.
Bajo estas nuevas condiciones, sumadas a la dificultad de invertir en el corto plazo para el desarrollo de inversiones fundamentales -que tendrían su impacto en 20 a 30 años más-, el expresidente de la República recalcó en varias oportunidades la importancia de que el Estado tenga una institucionalidad que tenga la misión de pensar el futuro del país.
Definir un programa de acción para tres o más décadas, comentó Ricardo Lagos, debe ser un diálogo que recoja las opiniones de la ciudadanía, pero especialmente de los expertos. “Éste es el tipo de cosas que uno dice ¿dónde las vamos a discutir? Si no se discuten en la universidad, dónde se van a analizar. Toda sociedad tiene un ente para pensar la sociedad, como mejorarla”.
En este sentido, Lagos se refirió a realidades comparadas de Latinoamérica y el mundo –con datos estadísticos- de temas relevantes para el desarrollo de la sociedad económica y social de Chile, afines a las materias que investiga la FCFM, como infraestructura, minería, energía, agua y sismicidad. Con énfasis planteó la urgencia de superar “el talón de Aquiles” de Chile: pasar de la extracción de materias primas, al desarrollo de tecnología. Asimismo, destacó acciones puntuales de gran innovación y el aporte que la FCFM ha realizado a la minería al desarrollar tecnología propia. Sin embargo, consideró que -en términos generales-, siendo Chile productor de 1/3 de cobre del mundo, se podría esperar una política de inversión, y negociación con la región, más intensa.
En su opinión, “estamos en condiciones de plantear una política agresiva”, comentó, agregando que –pese a ser una medida no apoyada por los sectores económicos- sí defiende un sistema tributario distinto que tenga metas claras en el mediano plazo. “Hay mucho que hacer en el crecimiento económico. Todavía hay un conjunto de carencias muy grandes”, para lo cual adhiere a la idea de una reforma, porque las necesidades de inversión en bienes y servicios son aún profundas.
También reflexionó sobre las oportunidades desaprovechadas para hacer parte de nuestra cultura las ventajas comparativas que tenemos en variadas dimensiones. Es así como destacó la astronomía como una de las pocas áreas donde el Estado de Chile ha trabajado “con sensatez” y donde hubo una inversión a mediano y largo plazo para crear una identidad cultural a los ojos del mundo y potenciar estratégicamente esta ventaja natural y de conocimiento que tiene el país, concluyó.