Archivo Central Andrés Bello impulsa estudios sobre el tema

Diálogos en torno al Archivo: Microorganismos que degradan el patrimonio cultural

Conservación y microorganismos que degradan el patrimonio cultural
"A nivel patrimonial de archivo y bibliotecas, uno de los problemas más graves, a mi gusto, es la contaminación. Y sucede por el mal uso que se le da al instrumento o archivo", señaló Yerko Quitral.
"A nivel patrimonial de archivo y bibliotecas, uno de los problemas más graves, a mi gusto, es la contaminación. Y sucede por el mal uso que se le da al instrumento o archivo", señaló Yerko Quitral.
"Este biodeterioro se puede ver en toda una diversidad de materiales, libros, documentos, museos, obras de artes, restos arqueológicos y el mismo patrimonio natural", explicó el bioquímico.
"Este biodeterioro se puede ver en toda una diversidad de materiales, libros, documentos, museos, obras de artes, restos arqueológicos y el mismo patrimonio natural", explicó el bioquímico.
"Diálogos en torno al Archivo", es un espacio  de reflexión colectiva sobre investigaciones y proyectos en curso.
"Diálogos en torno al Archivo", es un espacio de reflexión colectiva sobre investigaciones y proyectos en curso.
En los encuentros se desarrollan diálogos enriquecidos desde las diversas hablas disciplinares que comparten los Investigadores Asociados al Archivo Central Andrés Bello y el público asistente.
En los encuentros se desarrollan diálogos enriquecidos desde las diversas hablas disciplinares que comparten los Investigadores Asociados al Archivo Central Andrés Bello y el público asistente.

"La disciplina de conservación ha sido dejada de lado en Chile. Se han preocupado por políticas patrimoniales, pero se han olvidado de que el patrimonio es material, material que es consumido por microorganismos". Con ese llamado de atención, Yerko Andrés Quitral, bioquímico y científico asociado del Laboratorio de Conservación y Restauración del Archivo Central Andrés Bello, abrió su exposición centrada en la degradación del patrimonio cultural, un asunto que muchas veces provoca la pérdida tanto de obras clásicas como contemporáneas.

La charla, efectuada en el marco de las jornadas de "Diálogos en torno al Archivo", abordó desde los factores que incentivan la degradación hasta los principales problemas de biodeterioro en Chile. En ese recorrido se presentaron algunas de las medidas y cuidados que se han probado para enfrentar estos problemas y los riesgos que se corren de no implementar acciones frente al tema, los que no sólo incluyen daños en las materialidades sino también afecciones en el organismo humano.

"Que no se vea no significa que no exista, eso es una problemática real en el mundo de la microbiología", señaló Quitral, quien abordó específicamente el tema de hongos y bacterias, microorganismos que no son evidenciables a simple vista. Las bacterias y los hongos tienen mecanismos específicos de degradación; lo que ambos buscan es energía en forma de carbono, la cual puede hallarse en la celulosa.

"El problema más importante que yo veo en la realidad es que no se ha logrado llegar al restaurador, o al taller, o al laboratorio, que son quienes llegan a la obra en mal estado. Porque yo puedo hacer estudios magníficos de contaminación, determinando 50 tipos de bacterias y 200 tipos de hongos que puede tener una obra de arte, pero eso de qué me sirve si no tengo una realidad que me ayude a detener esta degradación potente que está en la obra", reflexionó Quitral.

En el caso de Latinoamérica, los problemas de biodeterioro tienen relación con asuntos de espacios y luz, dado que gran parte de los archivos, bibliotecas y museos de la región son lugares patrimoniales históricos, que ya existían y fueron readecuados para poder albergar otras materialidades patrimoniales. Por lo mismo parte de los cuidados que se sugieren tienen relación con la estabilidad ambiental -temperatura, humedad, rayos UV y ventilación.

"Los protocolos de desinfección y control deben adecuarse de forma particular a cada instancia. Cada espacio debe realizar análisis de su propio entorno, pues esa es su realidad. No tratemos de adecuar realidades externas, porque ahí se cometen muchos errores que han matado colecciones enteras", señaló el bioquímico. Y agregó, "deben ser parte de la rutina de todos los centros que contienen material patrimonial, la realización de estudios e investigaciones respecto a todos estos parámetros expuestos".

Durante la presentación también se dio cuenta de los estudios sobre caracterización y carga microbiológica ambiental que el propio Archivo ha realizado con el fin de mejorar cuidados y tomar medidas en torno a la conservación de sus colecciones.

A la charla asistieron personas de diversas áreas del mundo de la cultura y el patrimonio, lo cual fue reconocido por el expositor. "Que ustedes sean de distintos ámbitos es muy bueno, porque mi punto el día de hoy es que todos tenemos que tener algo de conservadores".

Raquel Abella, encargada de Colecciones del Museo Histórico Nacional, asistió a la charla debido a su ámbito de trabajo, que la relaciona con libros y documentos: "me pareció muy buena e interesante, pues en mi caso trabajo a diario con materiales antiguos y necesitaba saber bien del tema de la degradación y cómo se puede prevenir". Similar fue el caso de Rocío Pérez Aguilera, conservadora del Museo Histórico Nacional, quien comentó: "me interesaba porque en el museo tenemos diferentes tipologías de colecciones que van de escultura a pintura, a papel, y tenemos varios objetos con biodeterioro".

Yerko Quitral aprovechó la instancia para hacer un llamado a la gente joven, a quienes se refirió como "quienes tienen las herramientas para poder cambiar lo que viene". "Para mí es muy importante poder sociabilizar la problemática, y especialmente con los alumnos, con la gente joven que tiene las herramientas para poder cambiar lo que viene. Quizás recién en diez años más van a cambiar las políticas respecto a esto, pero eso depende de la gente joven. Y yo ahí evoco mis mayores esperanzas".