Alrededor de 30 estudiantes del Liceo Ciudad de Brasilia de Pudahuel, se reunieron el pasado jueves 27 de julio con Teresa Vallespín, Seremi Metropolitana de Educación en un conversatorio para resolver dudas sobre el Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (PACE) que en este liceo ejecuta la Universidad de Chile desde el 2016.
Las principales dudas expresadas por los jóvenes tuvieron que ver con los requisitos necesarios para ser parte del programa, pero sobre todo aprovecharon a las autoridades para pedir que se aumente el número de cupos que ofrecen las universidades de manera que ningún estudiante talentoso se quede fuera del sistema y que la Universidad de Chile realice más talleres, especialmente en el área de ciencias y matemáticas que es donde los jóvenes reconoce que hay más falencias.
En la oportunidad ex alumnos de establecimientos educacionales del Programa PACE que hoy se encuentran estudiando diferentes carreras, contaron a los estudiantes cuáles han sido las principales dificultades que les ha tocado enfrentar en la universidad y dieron algunos consejos para enfrentar las altas exigencias de esta nueva etapa. Uno de ellos es Rubén Riquelme ex alumno del liceo Malaquías Concha de La Granja, quien actualmente estudia ingeniería en la UTEM; el estudiante comentó que su principal motivación para permanecer en la universidad es ayudar a sus hermanos menores y que “no basta con ser buen alumno en el colegio, porque la universidad requiere métodos de estudio mucho más exigentes”.
Para el Ministerio de Educación, la instalación del programa PACE ha sido un desafío, sobre todo vencer la incredulidad inicial de estudiantes y equipos directivos pues “ingresar a la universidad sin importar el puntaje de la PSU era un cambio total y como el trabajo se inició con terceros medios tan solo al segundo año de ejecución vieron que los estudiantes sí podían ingresar a la educación superior”, cuenta Soledad Guerrero, Coordinadora del Programa PACE del Departamento de Educación del Mineduc, de ahí la importancia de generar estas instacias de socialización donde los estudiantes pueden preguntar, resolver dudas y, muy especialmente, aportar información para impulsar mejoras en el programa.
Para Fernanda Mujica, estudiante de cuarto año medio, la actividad le pareció muy buena porque “fue un ambiente ideal para conocer más sobre el PACE y las características que tiene la Universidad de Chile”. Fernanda quiere estudiar pedagogía en lenguaje o trabajo social y fue una de las participantes más activas del Taller de Historia Local que ejecutó el PACE de la Universidad de Chile en el marco de los proyectos participativos del año pasado.
Para la Seremi de Educación, “este programa amplía las posibilidades de esos establecimientos y alumnos que veían muy difícil el acceso a la educación superior y que hoy, con gratuidad y calidad, sí es posible cumplir sus sueños y muchas veces ser una palanca de movilidad para sus familias”, afirma.
Este año ingresaron 600 estudiantes de liceos PACE a la educación superior y se trabaja con casi 20 mil estudiantes en cien establecimientos solo en la Región Metropolitana, en estrategias de acompañamiento académico, ampliación de expectativas y temas vocacionales.