Tras dos días de extensas actividades en la Universidad de Chile, marcadas por la inauguración del Centro Interdisciplinario de Estudios en Filosofía, Artes y Humanidades, a cargo del profesor Pablo Oyarzún, y del Año Académico 2019, instancia en la que Judith Butler recibió la medalla Doctora Honoris Causa, la teórica norteamericana participó del conversatorio titulado “Palabras Públicas: conversatorio con Judith Butler”, realizado el pasado viernes 5 de abril en la Casa Central.
Refiriéndose a la necesidad de que las universidades se vinculen al espacio público y a los movimientos sociales, la vicerrectora de Extensión y Comunicaciones, Faride Zeran, explicó que el conversatorio parte de esa premisa: la de “abrir las puertas, las paredes, los muros de la universidad y dialogar, interpelar, compartir experiencias que, a propósito de la irrupción de los feminismos en las aulas y calles de todo el país, nos permita tomarle el pulso a un fenómeno que sin duda está haciendo historia”.
Asimismo, la también Premio Nacional de Periodismo 2007 señaló que al ser las universidades espacios privilegiados donde se producen investigaciones y constantes reflexiones críticas, estas instituciones deben tener un compromiso con la democratización del conocimiento para alcanzar su máximo potencial e “incorporar las demandas de la sociedad a su quehacer, porque sólo así lograrán avanzar al ritmo de los tiempos y contribuir a encontrar respuestas a las necesidades de los y las ciudadanas”.
El rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, agradeció la participación de Judith Butler en la inauguración del Centro Interdisciplinario de Estudios en Filosofía, Artes y Humanidades y del Año Académico 2019, asegurando que “su presencia en primer lugar es la coronación de un camino que recorrimos, porque el camino del feminismo en Chile se ganó el año pasado el derecho a que Judith Butler quisiera acompañarnos hoy día, y nos abre una perspectiva y un horizonte que, esperemos, caminemos todos juntos”.
Reflexionar sobre cómo enfrentar la ofensiva neoconservadora de la ultraderecha, cuyos discursos de odio y discriminación están dirigidos a mujeres, migrantes, pobres, disidencias sexuales, indígenas, entre muchos otros grupos desfavorecidos históricamente, fueron parte de los objetivos de este conversatorio organizado por la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, que contó con la participación de cinco panelistas, quienes realizaron preguntas a la académica estadounidense.
La ensayista, crítica y teórica cultural Nelly Richard fue la encargada de presenta y moderar el conversatorio del que también fueron parte Alondra Carrillo, vocera de la Coordinadora 8 de marzo; Emilia Schneider, consejera de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile y ex vocera de la toma feminista de la Facultad de Derecho en 2018; Daniela López, abogada feminista y directora de la Fundación Nodo XXI; y Jorge Díaz, biólogo y activista de las disidencias sexuales.
“La teórica de las vidas precarias”
“Buenas tardes a todas, todos y todas las x que desbordan el género”, saludó Nelly Richard a las cerca de mil personas, mujeres, lesbianas, gays, trans, hombres, que durante la tarde del viernes se reunieron en la Casa Central para escuchar y ver a la filósofa estadounidense Judith Butler.
La también integrante del comité académico de la Cátedra Amanda Labarca dio inicio al conversatorio agradeciendo la visita de la teórica, a quien definió como alguien “cuyo pensamiento está siempre conectado con la vida pública, con la heterogeneidad de la sociedad civil, como diría Edward Said”.
Lo que Judith hace con su trabajo es “interrumpir, o descolocar o fisurar los marcos de sentido que ocultan las jerarquías y los privilegios, la censura y las arbitrariedades del sistema sexo-género hegemonizado por lo masculino. Más que el feminismo como marco de sentido, es el feminismo como ruptura de los marcos”, explicó Nelly Richard, agregando que Butler “es la teórica de las vidas precarias, de los cuerpos vulnerables, de las existencias sufridas, de las comunidades estigmatizadas”.
Finalmente, la también integrante del comité académico de la Cátedra Amanda Labarca se refirió a la paradoja de que los detractores de Butler colaboren activamente en la expansión de su fama a nivel mundial, señalando que “es mucho más peligrosa intelectualmente siendo lo que realmente es, no la autora de una ideología de género, sino al revés: la pensadora de la teoría crítica que como teoría crítica desmonta tanto la metafísica de las esencias como los aparatos doctrinales de las ideologías”.
La importancia de tejer redes entre mujeres
“El presente contradictorio”, así definió Daniela López, directora de la Fundación Nodo XXI, el contexto actual que se vive a nivel nacional e internacional: mientras que gobiernos de derecha se posicionan en diferentes países aplicando políticas conservadoras y, en muchos casos, violando los derechos humanos, al mismo tiempo estamos frente a la articulación de un movimiento feminista que lucha en diferentes partes del mundo por el fin de todas las formas de violencia contra las mujeres, las disidencias sexuales y comunidades o grupos históricamente discriminados.
Según Daniela López, la importancia de la memoria histórica feminista frente a esta realidad es crucial. En ese marco, la directora de Nodo XXI fue la encargada de abrir la ronda de reflexiones y preguntas a Judith Butler: “¿Cuáles crees que son los aprendizajes que nos deja la memoria histórica que tenemos que tener presentes para enfrentar el avance de las radicalizaciones de las derechas a nivel global y de un modelo económico que se torna incompatible con la reproducción de la vida?”.
La teórica estadounidense apuntó a la importancia del feminismo para comprender el progreso neoliberal, económico y político, asegurando que nos permite observar, por ejemplo, que “en términos laborales sólo una parte del trabajo de las mujeres se ha reconocido realmente” y que “las mujeres no tienen posiciones de poder continuo dentro los sindicatos, lo que significa que si confiamos en los sindicatos la representación de los problemas de las mujeres en el trabajo, en la salud, del cuidado, el acoso, la violencia, la desigualdad salarial, entonces seguimos dejando mayoritariamente en los hombres la representación de las demandas políticas de las mujeres".
Posteriormente, Butler se refirió a la importancia de la organización entre mujeres explicando que "cuando las redes de mujeres se vuelven amplias, más grandes que cualquier organización particular, que cualquier sindicato, entonces los sindicatos se ponen nerviosos. Y cuando salen a las calles en Santiago y dicen ‘oh, será una manifestación pequeña’, y el gobierno después ve que es algo multitudinario, entonces también se ponen nerviosos. Es una muestra de poder en términos de la solidaridad que es increíblemente importante, especialmente porque son colaboraciones a lo largo de la región, a lo largo de diferentes países y diferentes idiomas".
“Hablar de dominación masculina no equivale a hablar de los hombres”
La estudiante de Derecho y una de las voceras de la toma feminista de mayo de 2018, Emilia Schneider, se refirió a las masivas movilizaciones de mujeres a nivel nacional que instalaron la importancia de la educación no sexista, entre muchas otras demandas, para introducir a la teórica lesbiana en la que fue la segunda pregunta de la jornada. Su eje estuvo puesto en el alcance del feminismo como proyecto de profundización de la democracia y perspectiva central para dialogar sobre “los límites identitarios del sujeto, sujetos, o no sujetos del feminismo”.
“¿Cómo superar estos nudos en pos de la unidad de movimientos ya constituidos e históricamente protagonizados por hombres, como el movimiento estudiantil chileno, que se ve hoy justamente revitalizado por el feminismo, y cómo así avanzar hacia la construcción, feministamente, de una alianza social amplia que defienda la necesidad de transformaciones en un mundo cuyo modelo pone en crisis la vida misma?, interpeló Emilia Schneider a la autora de “El género en disputa” y “Marcos de guerra”, entre otras grandes obras.
Frente a esta pregunta, Butler fue clara: “la dominación masculina no es lo mismo que los hombres. La inequidad estructural no es lo mismo que los hombres, ellos sí se benefician de esta inequidad entre hombres y mujeres, pero la inequidad estructural y la profunda historia que ha producido esta estructura y que la reproduce no es lo mismo que una identidad personal”.
Asimismo, Butler aseveró que frente a esta realidad “la esperanza es el feminismo. Pero tiene que ser un feminismo que sea antiracista, en contra de la transfobia, que incluya a las personas trans, travestis. Si es que van a luchar contra la violencia tiene que ser contra la violencia hacia las mujeres, asignadas como mujeres en el nacimiento o que hayan asumido y afirmado su identidad a lo largo del tiempo, las disidencias sexuales, personas no conformes con el género, travestis que no quieren ser llamados trans, pero también migrantes, indígenas, pobres”.
“Cada vez que las mujeres se reúnen hay una pregunta sobre cómo definimos quién es una mujer, yo creo que si tú te defines como una mujer, eres mujer, y no quiero ser impositiva sobre la definición de lo que es una mujer, sino seríamos una protopolicía de la identidad”, cerró la teórica feminista.
El feminismo como arma de lucha
“¿Cuál es el potencial subversivo que podría estar contenido en esta emergencia feminista global?” y “¿cómo podemos enfrentar las intenciones de disciplinamiento y domesticación? fue la pregunta realizada por la vocera de la Coordinadora 8 de marzo, Alondra Carrillo, a la académica queer, tomando en cuenta el contexto de movilizaciones feministas llevadas a cabo desde inicios del 2018 que han puesto “progresivamente sobre la mesa nuestras vidas como un problema político insoslayable que ya no puede ser abordado parceladamente”, además de la necesidad de una política feminista masiva frente a la crisis del sistema capitalista a nivel global y al ascenso de la extremaderecha.
“Las demostraciones y simbolismos son muy importantes para mantener a la gente unida y también para reclamar en el espacio público porque para las mujeres, para las comunidades LGBTIQ, el espacio público no es siempre un espacio seguro. Entonces, cuando lo reclamamos lo estamos haciendo seguro, algunas veces, por primera vez”, dijo Butler.
Además, la filósofa feminista invitó a proponer nuevas formas de acción política para reflexionar sobre los fascismos emergentes y las formas contemporáneas de autoritarismo. “Debemos producir nuevas formas de análisis cultural que puedan hacerse populares a través de los medios de comunicación, para que la gente sea capaz de identificar cuándo los derechos democráticos están suspendidos, cuando las disidencias están siendo disciplinadas, cuando las manifestaciones son derribadas en nombre de la seguridad porque todos estos son modos de suprimir la democracia”, apuntó la académica estadounidense.
“Nuestra libertad es la de vivir sin miedo”
“¿Cómo podemos seguir construyendo, como activistas, una teoría crítica y abarcadora para arrebatarles a estos conservadores derechistas esta falsa idea de un apocalipsis sexual con el objetivo de no producir una alarma pública con respecto a los avances en identidad de género, al mismo tiempo de asegurar que los múltiples modos de expresión en la sexualidad son derechos básicos de la ciudadanía?”, preguntó Jorge Díaz, biólogo e integrante del comité académico de la Cátedra Amanda Labarca a Judith Butler.
Esta pregunta se enmarca en el contexto de ataques violentos y de odio hacia las personas trans y disidencias sexuales que han ocurrido durante el último tiempo en Chile, que gracias al movimiento feminista han tenido más visibilidad mediática. Se trata, en palabras de Jorge Díaz, de “tipos de violencia muy fuertes, extremas, a través de las cuales habla el patriarcado para finalmente silenciarnos. La presencia de disidentes sexuales como pequeños triunfos, pequeños, de una visibilidad, genera una reacción violenta en los conservadores y en gran parte de nuestra población”.
Ante esta última interrogante, la académica lesbiana y queer zanjó: “Ellos (los conservadores) piensan que si pierden dominación se destruyen. Eso significa que su existencia depende de la dominación, de la inequidad, de la eliminación de las alternativas. Bueno, los invitamos a coexistir sobre la base de la igualdad. Nuestra libertad es la libertad de vivir sin miedo, nuestra libertad es desear y amar a quien queramos, nuestra libertad es hacer con nuestros cuerpos lo que sentimos que tenemos que hacer”.
En esa misma línea, Butler se refirió a la necesidad de articular un movimiento de izquierda más amplio y diverso que incluya a las organizaciones de católicos con mismos objetivos políticos, que en diversos casos luchan por sus derechos y por lograr transformaciones al interior de las mismas iglesias.
“Un problema que tenemos es el reemplazo sistemático de la teología de la liberación por el conservadurismo evangélico. De alguna manera creo que la articulación debe incluir gente que es parte de comunidades religiosas pero que están en la izquierda, los que somos feministas, gays, lesbianas, trans, no podemos tener una resistencia secular a la religión, de hecho, necesitamos la solidaridad para ser más grandes”, aseveró.
En la actividad estuvieron presentes el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi; la vicerrectora de Extensión y Comunicaciones, Faride Zeran; la vicerrectora de Asuntos Académicos; Rosa Devés; la teórica cultural y ensayista Nelly Richard; la filósofa, académica de la Universidad de California y Doctor Honoris Causa de la Universidad de Chile, Judith Butler; la directora de la Dirección de Igualdad de Género, Carmen Andrade; el decano de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, Francisco Martínez; la coordinadora académica de la Cátedra Amanda Labarca, Roxana Pey, académicos, académicas, estudiantes, funcionarias, representantes de organizaciones feministas, mujeres, disidencias sexuales y público general.
La conferencia, que contó con más de mil asistentes, fue transmitida vía streaming por nuestro plantel a través de tv.uchile.cl.
Previo a su participación en esta conferencia, Judith Butler fue parte de la inauguración del Centro Interdisciplinario de Estudios en Filosofía, Artes y Humanidades el jueves 4 de abril, ocasión en la que ofreció la charla “Crítica, disenso y el futuro de las humanidades”. Asimismo, fue la conferencista principal de la inauguración del Año Académico 2019 en nuestro plantel, actividad que fue transmitida por diversos medios de comunicación como Radio Universidad de Chile, Cooperativa.cl, Biobio.cl, El Díanamo, El Desconcierto y CNN.