El día viernes 14 de junio integrantes de la Mesa del Senado Universitario se reunieron con Claudio Nash, coordinador de la Cátedra de Derechos Humanos. ¿De qué se trató este encuentro?
Nos reunimos para analizar y elaborar una opinión a nivel de U. de Chile sobre lo que está ocurriendo en el Instituto Nacional.
La U. de Chile tiene que elaborar una opinión porque es la sucesora natural del Instituto Nacional, ya que desde allí nació nuestra casa de estudios. Asimismo, el Instituto Nacional es un liceo emblemático del país donde han salido presidentes de la república, donde han salido rectores. En el propio Senado hay muchos ex alumnos del establecimiento. Además, se ubica al lado de la Casa Central, que es donde el Senado sesiona. Por lo tanto, nosotros no podemos hacer caso omiso a la situación de asedio y represión policial violenta que ha vivido por más de un mes el Instituto.
Más importante todavía es que la U. de Chile cuenta con carreras de pedagogías y tiene un centro que investiga en educación. Por lo tanto, el tema de fondo tampoco lo puede soslayar la Universidad. Se trata de educación media y el significado de la educación pública, por lo cual es necesario que como universidad abordemos eso en forma profunda con un estudio a mediano y largo plazo. Es un asunto estratégico para la casa de estudios y, por ende, como Senado nos interesaba conversarlo –primero, con la Cátedra de Derechos Humanos y después con el resto de la comunidad universitaria-.
¿Qué rol le cabe al Senado en la situación que está viviendo la comunidad del Instituto Nacional?
Creo que nos cabe un rol principal. El escenario que está experimentando el Instituto Nacional refleja una crisis de la educación pública en el país.
Esta situación no ha sido bien resulta y se expresa allí en protesta de la comunidad del establecimiento por el plan de aula segura, la discusión de la reforma curricular, por la situación de ingreso a las universidades, y por el estado de abandono de la educación pública –como ha denunciado el Rector del Instituto Nacional-. Por lo tanto, el Senado -en tanto órgano estratégico de la universidad, que piensa los problemas de mediano y largo plazo- debe enfrentar este tema, porque la U. de Chile debe tener una opinión sobre lo que ocurre con la enseñanza media en el país. Tiene que manifestarse porque cuenta carreras de pedagogía, porque tiene un instituto en investigación pedagógica (Centro de Investigación Avanzada en Educación de la Universidad de Chile, CIAE), como también porque de ahí es de donde recibimos a los estudiantes. La columna vertebral de la educación pública chilena son las universidades estatales, los liceos y escuelas básicas estatales, por lo que tenemos que generar un discurso mancomunado sobre esos aspectos.
Por otro lado, hay una dimensión muy práctica que tiene que ver con el Senado Universitario. Nosotros como Mesa del Senado tenemos el mandato de velar por el buen funcionamiento del órgano de gobierno. El Senado funciona en la Casa Central de la U. de Chile, y hace más de un mes que es imposible tener una normal convivencia en el lugar, porque carabineros invade de bombas lacrimógenas el sector. De hecho, funcionarios de la U. de Chile hicieron una carta de protesta al Rector y a la comunidad nacional por este aspecto. Para nosotros esto es fundamental, porque necesitamos funcionar en un espacio digno. Y carabineros con esta represión desmedida y violenta que ejerce sobre el Instituto Nacional tiene a todo el barrio en tensión. Eso se lo vamos a hacer presente al alcalde Alessandri.
¿De qué forma piensan generar este diálogo con el alcalde Alessandri?
Vamos a pedir una entrevista con el alcalde y le vamos a representar tanto los aspectos prácticos -sobre cómo tiene destruido a un vecindario con una represión desmedida y sin sentido-y también los aspectos de fondo, que dicen relación es el sentido de la educación pública y qué es lo que está ocurriendo en el Instituto Nacional, que a nuestro juicio es un síntoma de la descomposición en la que han dejado a la educación pública por sí sola. Por lo tanto, lo que se necesita ahí es ir al problema de fondo y ver porqué en un colegio emblemático, que se supone es el mejor liceo del país, está ocurriendo esto.
¿Qué acciones concretas debería llevar a cabo el Senado Universitario para incidir en este tema?
Yo pienso que el Senado tiene que establecer un grupo de estudio para plantear y elaborar soluciones y proposiciones a la situación que existe en la enseñanza media pública. Esto tiene que hacerse en conjunto con los actores de la educación media, con el colegio de profesores, con los rectores de liceos públicos, con los centros de alumnos y profesores de esos liceos. Es decir, no puede ser sólo un trabajo de la U. de Chile, sino que la U. de Chile debe ser quien articule este diálogo que ha estado ausente.
El día 14 de junio, además de reunirse con el Coordinador de la Cátedra de Derechos humanos, integrantes de la Mesa del Senado asistieron al Instituto Nacional a dialogar con esta comunidad que se encontraba movilizada. ¿Cómo surgió la idea y cuál era el objetivo de la visita?
Estábamos en la reunión con Claudio Nash hablando sobre la situación represiva del Instituto Nacional y llegaron carros de carabineros a hacer un desalojo, porque según informaron había una toma.
Entonces, ante esa situación violenta de desalojo -en que llegó un contingente absolutamente nutrido de carabineros en trajes de combate- los que estábamos en la reunión: la Secretaria del Senado, Alejandra Bottinelli, la Senadora estudiante María José Cornejo; y yo mismo, como Vicepresidente del Senado, decidimos bajar e ir a conversar con quienes llevaban a cabo este operativo. Esto, con el fin de saber qué ocurría y para que se siguieran los protocolos y se resguardara la salud física y mental de los estudiantes. En el establecimiento hay estudiantes que cursan desde séptimo básico a cuarto medio, la mayoría son menores de edad según nuestra legislación y, por lo tanto, hay un uso de fuerza desmedida.
Efectivamente bajamos, nos identificamos como Senadores Universitarios y pudimos hablar con dos efectivos de carabineros que nos dijeron que estaban a cargo del operativo, ellos eran los tenientes coroneles Clavería y Barra. Les explicamos la situación, pero tuvimos un diálogo muy extraño. Ellos dijeron que seguían órdenes del alcalde, que no les importaba cuál era el fondo de este conflicto, sino que tenían que detener a la gente y sacar a los estudiantes porque ese era su misión. Nosotros le explicábamos que había un problema mucho más de fondo –como lo ha señalado muy bien el Rector del liceo- y que debían tener un mínimo de cuidado con los establecimientos educacionales.
¿Con qué integrantes del Instituto Nacional pudieron conversar?
Hablamos con Rodrigo Pérez, presidente del centro de alumnos. Él nos comunicó que había sido un desalojo de estudiantes, que carabineros entró y revisó todo el establecimiento. Denunció esto a la opinión pública y con él fuimos a entrevistarnos con Fernando Soto, Rector del Instituto. Por supuesto, no era un momento para mayor diálogo. Sin embargo, expresamos nuestra solidaridad como U. de Chile. Le manifestamos también que nosotros estamos a su disposición.