El equipo profesional de la Unidad de Apoyo a Estudiantes en Situación de Discapacidad (UAESD), conformado por las terapeutas ocupacionales Rocío Quezada y Javiera Véliz y el sociólogo Luis Vera, ha trabajado en la adaptación de sus líneas de trabajo al actual contexto de actividades a distancia, implementando además, en colaboración con diversos organismos como el Departamento de Pregrado, U-Campus y algunas facultades, nuevas estrategias para disminuir las barreras a la participación y favorecer la igualdad de oportunidades para las y los estudiantes con discapacidad/diversidad funcional.
Las cifras
En 2019 se incorporó por primera vez, gracias al trabajo conjunto con la Dirección de Bienestar y Desarrollo Estudiantil y con el Departamento de Pregrado, la pregunta por situación de discapacidad en dos instrumentos institucionales de gran relevancia: el Formulario de Caracterización Estudiantil (FOCES) y el Formulario de Matrícula.
“La Universidad de Chile ha dado un paso fundamental para avanzar en la implementación de la Política de Inclusión y Discapacidad en la línea estudiantil: lo primero es saber cuántas personas con discapacidad estudian en la Universidad de Chile, quiénes son y cuáles son sus necesidades de apoyo”, sostiene la Directora de la Oficina de Equidad e Inclusión, prof. Maribel Mora Curriao.
A partir de los datos de estudiantes autodeclarados con discapacidad provenientes de las dos fuentes ya citadas, el equipo de la UAESD logró identificar en 2019 a 331 estudiantes que efectivamente enfrentan barreras en su proceso formativo y requieren de apoyos y adecuaciones curriculares no significativas para participar de la vida universitaria con igualdad de oportunidades.
El proceso de caracterización de estudiantes que declararon discapacidad en 2020 aún está en curso, pero en sus primeras etapas ya se ha detectado a 144 estudiantes con discapacidad, que se suman a la cifra de 2019, totalizando a la fecha 475 estudiantes con discapacidad. De ellos, 64 ingresaron este año a la Universidad de Chile.
Actualmente, en virtud de estos procesos de detección y caracterización, en todas las unidades académicas de la Universidad de Chile hay estudiantes con discapacidad cursando carreras de pregrado.
Apoyo a docentes
En alianza con la Unidad de Docencia del Departamento de Pregrado el equipo de la UAESD participó del ciclo de videoconferencias “Cómo implementar mi curso en línea”, con el taller “Orientaciones para incorporar la accesibilidad en mis clases en línea”, que se efectuó en dos versiones los días 2 y 15 de abril, donde participaron en total más de 50 docentes de diversas facultades.
En dicho taller se abordaron estrategias generales para la incorporación de elementos básicos de accesibilidad a la información en las actividades curriculares a distancia. El registro audiovisual está disponible en este enlace: https://www.youtube.com/watch?v=U38LbnFPs80&t=1562s
Otra de las actividades de apoyo a la docencia realizada por el equipo UAESD en colaboración con profesionales de las Facultades de Artes y Derecho fue el taller “Hablemos del espectro autista en la Universidad”, que contó con la participación de más de 70 profesionales, docentes y también estudiantes de diversas facultades de la Universidad de Chile y también de otras instituciones, como la Universidad de Atacama.
El registro de esta actividad está disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=7ZIIxmLWlJA&t=2441s
“La virtualidad ha implicado una serie de desafíos para nuestro trabajo, porque hemos tenido que reinventarnos rápidamente e implementar nuevas estrategias. Mirando el lado positivo, hemos podido contar con la participación de decenas de personas a distancia, lo que a veces es difícil en el contexto presencial, y además nos ha permitido innovar en lo metodológico, por ejemplo utilizando videos” sostiene el coordinador del equipo UAESD.
Acompañamiento a estudiantes
Las profesionales Rocío Quezada y Javiera Véliz cumplen, entre otras funciones, el rol de acompañamiento directo a las y los estudiantes con diversidad funcional, tarea que ha continuado durante el periodo de estudio/trabajo a distancia, con desafíos importantes: “Ha sido diferente por varios motivos, en primer lugar, la forma de comunicarnos implica ir adaptándose a la tecnología, a los problemas de conexión o de uso con las diversas plataformas, ha significado otorgar más tiempo para resolver esas situaciones y buscar los modos en que la comunicación sea lo más parecida a lo presencial, ya sea siendo más descriptivas o más atentas a la comunicación verbal” sostiene la teraeputa ocupacional Rocío Quezada.
La profesional Javiera Véliz, por su parte, comenta que “el contexto actual nos ha demostrado que independiente de la modalidad de estudio, las barreras siempre van a aparecer mientras no consigamos una cultura inclusiva. Esto ha sido desafiante, ya que tanto las barreras como los ajustes que se proponen se han diversificado, al mismo tiempo que estamos conscientes que no todos/as tienen las mismas oportunidades para acceder a la conexión a internet y a un espacio adecuado de estudio.”
La afectación de la salud mental propia del contexto actual también ha sido un tema recurrente. Al respecto, Rocío Quezada comenta “También, como parte del acompañamiento a estudiantes, lógicamente se ha tocado como temática la pandemia, la sensación de incertidumbre, incomodidad con los cambios abruptos, etc.
Entre las nuevas estrategias implementadas por el equipo para favorecer la comunicación con las y los estudiantes con diversidad funcional, se encuentran los “Conversemos”, que han sido instancias de conversación sobre temas no académicos que se han abierto con el objeto de brindar un espacio de contención y acompañamiento integral. Se han realizado 3 instancias de este tipo, y se proyecta continuar con ellas durante los próximos meses.
Las profesionales UAESD constatan la presencia de un malestar subjetivo entre las y los estudiantes con discapacidad, asociado a la excesiva carga académica, que se manifiesta en un mayor cansancio, pérdida de la atención e incluso de la motivación. Este malestar y sus manifestaciones se exacerban por la necesidad de compatibilizar las clases no presenciales, desarrollo de trabajos o tareas y estudiar, con las actividades domésticas, el cuidado de niños/as y personas mayores, así como las dificultades de acceso a internet, de condiciones adecuadas para el estudio en el hogar.
Avances en accesibilidad web
En materia de accesibilidad a las plataformas institucionales, y gracias a un trabajo colaborativo junto al equipo del Centro Tecnológico U-Campus de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, se ha logrado implementar una mejora en la plataforma U-cursos, que permite a las y los estudiantes cambiar la combinación de colores de la página a ‘modo noctuno’, favoreciendo la accesibilidad a la información para estudiantes con baja visión.
“Este es un avance importante, un paso más en el largo camino que aún debemos recorrer para transformar la Universidad de Chile en un espacio plenamente accesible para las personas con discapacidad” sostiene el coordinador de la Unidad de Apoyo a Estudiantes en Situación de Discapacidad, Luis Vera