Las fotografías del campus y los profesores de la UCLA, convencieron a la estudiante de Licenciatura en Artes Plásticas, Loreto Riveros, para pasar un semestre en esa Casa de Estudios. Allí, tomó ramos como Pintura Avanzada, Teoría y Metodología del Arte, Realismo e Impresionismo en Europa, Dibujo Avanzado, Religión como performance, entre otros.
"Me fue súper bien y yo no me lo imaginé", señala Loreto al hablar sobre sus calificaciones. En Pintura, "evaluaban más por producción y cantidad y eso no me gustó porque yo soy lenta para pintar" agrega la estudiante, quien, pese a ello, obtuvo muy buenas notas en ese curso. En el caso de Dibujo, el otro ramo práctico que tomó Loreto, la experiencia fue totalmente distinta. Según cuenta, el profesor de esa asignatura era mucho más preocupado y los llevaba a muchas exposiciones e, incluso, a su taller.
Los ramos teóricos -la mayoría de las asignaturas que Loreto inscribió en la UCLA eran teóricas- "eran muy intensos. Eran buenos, largos y no te quedabas dormida", agrega la estudiante, quien asegura que en esa área aprendió muchísimo.
Pero Loreto no sólo se dedicó a estudiar. A la segunda semana en Estados Unidos, ya estaba trabajando como cocinera en una cafetería del campus y también aprovechó de viajar y conocer. De esta forma, visitó la mayor cantidad de galerías que pudo y, junto a algunos de sus nuevos amigos, recorrió Nueva York y Washington e incluso llegó a Tailandia con lo que ahorró de cocinera en la cafetería.
Pero esta estudiante -que ya piensa en continuar especializándose en México, España, Francia o Nueva York-, no sólo se dedicó a los estudios, el trabajo y los viajes, puesto que sin siquiera imaginarlo, algo suyo quedó en la UCLA.
"Había un concurso de diseño y decidí participar. Yo no soy diseñadora, pero no perdía nada con intentarlo", recuerda Loreto. A pesar de que envió su afiche sin ninguna esperanza, a los pocos días recibió un mail avisándole que su trabajo había obtenido una Mención Honrosa. En otras palabras, mientras ella ya retomó sus estudios en Santiago, su afiche se encuentra aún exhibido en uno de los edificios de la UCLA y estará continuamente rotando por ese campus.