Eduardo Dockendorff: Calidad de políticas públicas en el eje de la U. de Chile

Dockendorff: Calidad de políticas públicas en el eje de la U. de Chile
Eduardo Dockendorff: "Es fundamental que una universidad tenga la capacidad de evaluar la calidad de las políticas públicas".
Eduardo Dockendorff: "Es fundamental que una universidad tenga la capacidad de evaluar la calidad de las políticas públicas".

"Estamos culminando el proceso de reestructuración que instruyó el Consejo Universitario el año 2007, que se tradujo en la formulación de un proyecto estratégico cuyo primer paso y más importante fue la renovación de su planta académica y que se cumplió -en casi su totalidad- el año pasado", recordó el Director del Instituto de Asuntos Públicos, Eduardo Dockendorff, al describir el momento que vive el INAP. 

"Este año los objetivos se concentran en la acreditación de los dos Magíster y del Pregrado, en el proyecto de la nueva sede institucional -culminando el proyecto de arquitectura, ingeniería y plan de negocios- y, en tercer lugar, la normalización del funcionamiento del Instituto, luego del término de su proceso de reestructuración", precisó.

Mientras tanto, siguen en marcha los procesos iniciados durante 2009 -aclaró- que incluyen la actualización del currículo del Pregrado, el análisis y revisión de las mallas de los Magísteres, el mejoramiento del perfil público del INAP, la continuación del plan de innovación en los procesos de implementación de comunidades de aprendizaje y entrar en una fase de realización regular de seminarios.

El profesor Dockendorff agregó que dentro del trabajo que ha iniciado el INAP para alcanzar su normalización institucional se encuentra la discusión de un Proyecto de Desarrollo Institucional (PDI) que comenzó este segundo semestre. En esta línea, la autoridad manifestó su intención de facilitar las gestiones para avanzar en los pasos legales que permitan regularizar la estructura orgánica transitoria que se dispuso para el INAP. "La idea es que hacia el final de este año ya tengamos un Consejo debidamente elegido o con las autoridades que competen de acuerdo al reglamento de los institutos", expresó.

Apoyo al investigador joven

Es muy importante, desde el punto de vista de orientar a la opinión pública, sostuvo el profesor Dockendorff, demostrar la calidad y efectividad de las políticas públicas para que la ciudadanía pueda formarse un juicio sobre los hechos públicos. Por ello, precisó, el INAP quiere "fortalecer decididamente la investigación".

En este sentido, afirmó que la renovación del cuerpo académico ha sido clave en el mejoramiento de esta materia. "Está cambiando por la vía de la calidad de la docencia. Todos los académicos que han ingresado vienen con grado de Doctor. Ha sido una política establecida por el Consejo Universitario y una petición expresa del Rector. Eso ha cambiado considerablemente la calidad de la masa crítica aquí adentro", comentó.

Así, el académico explicó que el INAP está buscando formas de apoyar mejor la actividad investigativa. "Hemos conversado con el nuevo Vicerrector de Investigación y Desarrollo para pedirle que nos apoye. Tenemos algunos académicos jóvenes que vamos a tener que guiar en la búsqueda de fondos concursables", explicó junto con poner el acento en que el modelo de desarrollo que se privilegia en el país es del orden científico y tecnológico. "Vamos a tener que inducir más al investigador en ciencias sociales y ayudarlo un poco más para que pueda también obtener recursos públicos para sus investigaciones", añadió.

Evaluación y seguimiento de políticas públicas

Dentro de este plan de fortalecer la investigación, el INAP tiene en carpeta dos nuevos programas que se enmarcan -explicó el académico- dentro de la solicitud manifestada por el Rector para los próximos cuatro años de "desarrollar la capacidad del Instituto para hacer una evaluación y seguimiento de las políticas públicas", de modo que la Universidad tenga una opinión sobre aquellas materias de mayor relevancia para el país y que contribuyan a la opinión pública .

El primero de ellos es el "Programa de seguimiento de Políticas Publicas", presidido por el mismo Director Eduardo Dockendorff y con la participación de figuras importantes de distintas disciplinas de la Universidad de Chile junto a ex autoridades que formarán un comité de seguimiento de las prioridades identificadas por el Gobierno en el mensaje del 21 de mayo. Sobre la marcha de la actividad gubernativa, precisó, es probable que se sumen un par de objetivos más de seguimiento. Esta instancia contempla reuniones mensuales y el apoyo del trabajo de estudiantes de Magíster y de Pregrado.

El segundo es el "Programa académico de seguimiento legislativo", que se encuentra más avanzado, precisó. Éste observará los proyectos emblemáticos de mayor importancia para el país y para la Universidad que se encuentran en estos momentos en el Congreso. Participan aquí expertos en políticas públicas, algunos de los cuáles han sido parlamentarios, junto a académicos del propio instituto. Pronto contarán con una página web y un news letter para divulgar este proyecto por toda la comunidad universitaria y comenzar un sistema un calendario de seminarios, al menos un par al año, sobre evaluación legislativa, como actividades permanente del INAP.


Mejorando el perfil público del Instituto

"En general, la opinión pública es muy cautiva de algún par de medios de comunicación que son los que editan la pauta de lo que es bueno y lo que es malo", afirmó el académico al comentar el proyecto de mejorar la visión pública del INAP. "Nosotros creemos que la Universidad pertenece a todos los chilenos -no a la expresión de un grupo, mucho menos de un grupo de propietarios-. Por ello, debiera estar en condiciones de entregar elementos de juicios a la opinión pública que les permita formarse su propia opinión frente a decisiones de políticas de protección social, sobre la minería, sobre la nueva ley de televisión, sobre el debate en educación superior que va a venir, por mencionar algunas materias", detalló.

Así, continuó, el INAP ha iniciado un plan de exteriorización de sus expertos. Renovaron su página web, en la actualidad tienen un par de académicos con programas radiales y apariciones en medios con columnas de opinión, con aspiración de formalizar un par de columnas "estables" para el próximo año.

"La academia tiene la obligación, especialmente si depende de recursos públicos, de hacerse inteligible para la opinión pública. En un mundo de perfeccionamiento del sistema democrático, con la democratización de la educación y con los nuevos criterios de transparencia que se dejan caer con un manto de exigencias a toda la sociedad -cosa que yo saludo con beneplácito- creo que se hace moralmente obligatorio para el académico hacer inteligible su elaboración intelectual", opinó.

"La no participación o el no involucramiento de la ciudadanía en los procesos nacionales creo que contraviene un principio esencial de una democracia moderna y eso vale para el astrónomo, el actor de teatro, el sociólogo o el abogado. De manera que me parece bien que la academia aprenda dos cosas: Uno, a profesionalizar este acto mágico de la transmisión del conocimiento que es el enseñar y, segundo, ser capaces de traducir el conocimiento científico y el conocimiento agregado en lenguaje inteligible para la opinión pública", afirmó.