Miguel O'Ryan: El potencial de las personas en la base del crecimiento académico

Vicerrector O'Ryan: Las personas en la base del crecimiento académico
"Espero contar con la colaboración de académicos seniors y jóvenes, formar comités consultivos distribuidos por áreas del conocimiento", sostuvo el Vicerrector Miguel O'Ryan.
"Espero contar con la colaboración de académicos seniors y jóvenes, formar comités consultivos distribuidos por áreas del conocimiento", sostuvo el Vicerrector Miguel O'Ryan.

Define su sistema de trabajo como "ejecutivo". Y es que para él cada detalle tiene relevancia cuando aporta al avance de la institución. Así se muestra el Doctor Miguel O'Ryan, al ser consultado sobre las iniciativas que marcarán la primera fase de su gestión en la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile.

Entre sus objetivos estará preparar un terreno que brinde mayores oportunidades de crecimiento a los jóvenes académicos, especialmente en "investigación, desarrollo, innovación y emprendimiento".

"Si bien vamos a focalizar nuestros esfuerzos en los jóvenes, no descuidaremos al resto de la comunidad académica. Se seguirá apoyando a los investigadores consolidados porque sus iniciativas son muy importantes", explicó el Profesor Titular de la Facultad de Medicina, asegurando que los investigadores senior son una base indispensable para fomentar soluciones de alto impacto social.

"Vamos a ser creativos, analíticos y evaluativos en nuevas iniciativas que aporten a la cantidad y la calidad de nuestra investigación. El énfasis se colocará en lo que el Rector Víctor Pérez Vera ha llamado ‘la buena academia joven' para así dar paso a la necesaria renovación que debe tener la Universidad". Para ello se dará preferencia a la incorporación de "académicos altamente calificados y en entrenamiento. No necesariamente consolidados, pero la idea es que presentan un alto potencial", comentó.

Para dar curso a esa labor sostuvo que hay que convencer a las Facultades e Institutos Interdisciplinarios "de que parte importante de las contrataciones deben estar sustentadas por un nivel académico de Doctorado o superior. Eso no significa que sea una condición sine qua non. Por ejemplo en caso de un académico muy requerido para un área docente específica o que sea parte importante del plan estratégico de su unidad. En fin, también hay que ser flexibles frente a las excepciones".

Apoyo a los que comienzan

En esa línea el Dr. O'Ryan afirmó que la contratación de académicos jóvenes altamente calificados "es muy relevante, por lo que tenemos que trabajar en estrecha relación con el plan de renovación que trae consigo el Incentivo al Retiro Voluntario. Es importante darles el máximo apoyo a quienes se incorporan a la Universidad".

"Vamos a pensar creativamente en cuáles son las posibilidades y las necesidades que tienen los académicos que están en los primeros años de desarrollo de una línea de investigación para que puedan despegar más rápidamente", dijo, contando que aún no tiene fórmulas, "pero sí muchas ideas que quiero contrastar con visitas a cada una de las Facultades, en reuniones con los Decanos, los Directores de Investigación y los Investigadores, para recibir su imput, sus planteamientos y sus problemas. De esa manera podremos estructurar -durante el semestre- una base de planes concretos, determinar los recursos y diseñar estrategias evaluables y flexibles que permitan ver cuáles podrían tener un mayor impacto", informó. Por eso, recalcó que esa interacción de puntos de vista será registrada en un cronograma, con un método a implementar de forma gradual.

Pero ¿cómo abordar este quehacer en disciplinas diversas? A su juicio "está claro que hay diferencias en las unidades humanistas y científicas a la hora de proyectar la investigación, el desarrollo y la creación. Si bien el concepto general es el mismo, el tratamiento está sujeto a matices. Por eso, espero contar con la colaboración de académicos seniors y jóvenes, formar comités consultivos distribuidos por áreas del conocimiento". Eso sí, con un grupo general superior que oriente las acciones en pro de la evolución de la Universidad de Chile.

"Eso es lo primero", advirtió, detallando que "espero ser más concreto, con un cronograma. Esa es mi manera de trabajar. Con planes estratégicos, con planes de desarrollo escritos, permanentes, que puedan ser leídos, con indicadores evaluables en el tiempo y también flexibles. De tal manera, si en algún momento una iniciativa no alcanza el éxito esperado, dar pie atrás e intentar por otra vía".

Rankings de Indicadores: "Con los pies en la tierra"

Sobre los indicadores el Vicerrector analizó que si bien miden el desarrollo y la investigación de las instituciones, no suelen ser suficientes para entender a una institución en su verdadero contexto.

Por eso "implementaremos nuestros propios indicadores internos, acordes a nuestras acciones. El objetivo será aplicarlos en temas específicos que den cuenta de la efectividad de las medidas. Un antes y un después que de luces sobre el éxito de la aplicación de herramientas que permitan saber si valen o no la pena en términos de continuidad".

Respecto de las mediciones internacionales el Doctor Miguel O'Ryan expresó: "La Universidad de Chile genera conocimiento y prepara a profesionales para el beneficio del país. Eso yo también lo entiendo para beneficio del mundo. ¿Cómo lo logramos? primero trabajando duro e incorporando a la mejor gente, después viene la pregunta ¿cómo sabemos si lo estamos haciendo bien? ahí los indicadores dan cierta orientación".

"Los indicadores no son objetivo en sí mismos. A mi manera de ver -precisó- son parámetros que sirven para evaluar si se está realizando más y mejor investigación para el desarrollo de nuestra comunidad y del mundo. Los parámetros de comparación hay que mirarlos con mucho cuidado, con un espíritu crítico, no autocomplaciente".

Hay indicadores más exigentes que se relacionan a factores universitarios globales que incluyen, por ejemplo, cuántos Premios Nobel han egresado de sus aulas. "Hay Universidades que tienen 10 o 20 casos, por eso es inapropiado usar ese tipo de lente para mirar a nuestra Universidad", detalló.

En esa línea el académico aseveró que hay medidas "que parecen ser más atingentes y útiles para nuestros objetivos. Entonces, lo que hay que hacer es tomar aquéllos que son más lógicos y más atingentes a lo que la Universidad ha estado haciendo en un período determinado de tiempo, y analizar los que se relacionan con la productividad, la investigación y la calidad de los profesionales que forman su cuerpo académico".

"Si tomamos códigos universales para todas las universidades  veremos que estamos a años de alcanzar a las Top. Por eso hay que entender que nuestra realidad es diferente a la de los países desarrollados. Eso no quita que puedan ser una referencia hacia donde apuntar. La calidad de las personas que hay acá, en la individualidad, no es muy diferente, pero sí el volumen de recursos humanos con mayor formación, del financiamiento disponible, y del volumen de la tecnología", argumentó.

Por ello puso el acento en que lo lógico es conocer los índices de productividad y calidad de las universidades superiores y analizarlos en su debido contexto. "Para ver cómo lo estamos haciendo desde un punto de vista comparativo hay que tener bien puestos los pies sobre la tierra. Tenemos que compararnos con aquellas universidades que se desenvuelven en ambientes semejantes a los que atraviesa nuestro desarrollo social". El Vicerrector puso como modelos a Brasil, Argentina y México en el continente. Los países asiáticos también entran es la lista, pero haciendo la salvedad de que tienen crecimientos dispares, como es el caso de India.

Insistió que con una visión realista los índices de desarrollo de la Universidad de Chile en los últimos diez años demuestran que es "altamente productiva en investigación, con más de mil papers ISI al año. Sigue siendo la que más gana Fondecyt y también está dentro de las principales en proyectos tecnológicos. Pero -advirtió- hay todavía mucho que hacer para mejorar. Eso, especialmente en la concentración de proyectos por académico, en la contratación de profesores con alto nivel de calificación, y en darles apoyo para que entren bien y rápidamente a la rueda de la productividad científica", concluyó.