Universidades alcanzan un incremento de más del 300% en patentes de innovación

Ues. alcanzan un incremento de más del 300% en patentes de innovación
"En el mundo, las grandes universidades están recibiendo retornos que alcanzan los cien millones de dólares por licencia o venta de patentes"
"En el mundo, las grandes universidades están recibiendo retornos que alcanzan los cien millones de dólares por licencia o venta de patentes"

Hace ya algunos años, el conocimiento generado en Universidades e Institutos  ha comenzado a insertarse cada vez con mayor fortaleza en el mercado. A pesar de ser el segmento que menos patentes solicita -apenas un 15% del total-, estas entidades han incrementado considerablemente la protección de sus investigaciones en los últimos años, pasando de 12 registros en el año 2000 a 50 el año pasado, lo que refleja un 317% de aumento.

Según informó el  Director del Instituto de Propiedad Intelectual, Maximiliano Santa Cruz al diario El Financiero, "El repunte que han tenido es probablemente porque muchas de ellas han empezado a tomar conciencia de la importancia de la propiedad intelectual y de proteger sus invenciones".

El Vicerrector de lnvestigación y Desarrollo de la Universidad de Santiago, Mauricio Escudey, afirma que "la creación de conocimiento por el conocimiento que tenían las universidades partió en los años 80 con Fondecyt, que estimulaba la ciencia básica. Pero esa visión comenzó a cambiar con el trabajo del Consejo Nacional de Innovación, que detectaron variables como que el número de doctores o la inversión en I+D, eran proporcionales al desarrollo de los países."

"Bajo esos análisis, el país comienza a hacer mucho mayor énfasis en la necesidad de que el conocimiento generado por las entidades de investigación termine en una apropiación de ese conocimiento, vinculada a patentes que puedan generar futuros negocios y empresas de base tecnológica", agrega Escudey.

Para  Jaime Pozo, Director de Desarrollo y Transferencia Tecnológica de la Universidad de Chile, este fenómeno se debe a elementos internos y externos.  "Internacionalmente, las  universidades líderes en Estados Unidos, Asia y Europa están estimulando a sus profesores a que, además de la investigación básica, cambien su enfoque hacia la investigación aplicada que resuelva problemas de la sociedad. En Chile, a partir del año 2006 y  con la creación de las Entidadades Asesoras de la Propiedad Intelectual (EAPI), se comenzaron a destinar recursos para que las universidades  pudieran patentar sus conocimientos tanto en Chile como en el exterior".

Y una vez registrado el producto de la investigación, existen dos formas de traspasarlo al mercado y finalmente a la sociedad. "Una forma es vendiendo el conocimiento generado y la otra es licenciándolo, que básicamente es el pago de un royalty que se divide en tres partes iguales entre la Universidad, la Facultad donde se gestó el proyecto, y el equipo investigador", detalla el académico.

"En el mundo, las grandes universidades están recibiendo retornos que alcanzan los cien millones de dólares por licencia o venta de patentes. En Chile, las casas de estudios se encuentran aún en etapas preliminares, y es por eso que casos como el de la profesora Liliana Neriz, quien licenció su innovación científica a la empresa norteamericana FlexSim, marca la pauta a seguir para nuevas investigaciones", concluye Jaime Pozo.