Al hablar de investigación aplicada en ciencias sociales de inmediato se relaciona este campo con una actividad entendida como "práctica", con una investigación "en terreno" o con el trabajo directo con una comunidad específica, dejando a un lado la necesaria reflexión sobre la labor del investigador. La Jornada de Investigación en Ciencias Sociales, organizada por la Dirección de Investigación y Publicaciones de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile y realizada el lunes 24 de septiembre, evidenció la necesidad de revisar el rol del investigador en este tipo de estudios donde la investigación puede aportar y acompañar en procesos de transformación social. Para todos los académicos participantes de esta actividad formativa se hace necesaria una mayor sensibilización con las comunidades objeto de la investigación, para evitar reducir la comprensión de poblaciones sociales a meras cifras.
Para la Directora de Investigación y Publicaciones, Prof. Sonia Pérez, puede que cause "resquemor o al menos curiosidad poner el tema de la investigación aplicada como un tema pertinente a las ciencias sociales, pues está ya casi en el imaginario colectivo asociarlo principalmente a la tecnología, al fomento y la producción. Sin embargo, revisar el rendimiento que pueda tener esta definición para las ciencias sociales puede ser de gran interés para la organización, visibilización y proyección de nuestras prácticas de conocimiento", declaró la académica al momento de iniciar la Jornada.
Prof. Fernando Gil: "Hay que recuperar la figura del intelectual crítico"
Una intensa crítica al rol de los investigadores en ciencias sociales fue descrita por el profesor visitante Fernando Gil quien describió la "sacralización" que afecta a investigadores al momento de abordar la investigación en ciencias sociales, ya que sus estudios muchas veces se convierten más en un modo de generar estatus social que produce distancias entre el mundo académico y la comunidad.
Lo que se pierde al practicar de este modo la investigación es la característica esencial, según el profesor proveniente de España, de la curiosidad en la sociología, es decir "se ata al investigador a cierto tema o línea de investigación, distanciándolo de la posibilidad de abordar diversos temas", lo que aportaría de modo más complejo en la producción de un saber interdisciplinario. Gil afirma que esta obligatoriedad para abordar sólo un tema genera un estado de frustración en los investigadores -principalmente en los jóvenes- "donde la figura principal sería la de un héroe que se sacrifica en esta investigación".
Este Doctor en Sociología, que ha escrito durante su trayectoria sobre diversos temas -mostrando una versatilidad que transita por estudios sobre drogas, docencia y consumo, entre otros-, durante la Jornada se preguntó sobre el estado actual de la enseñanza de la investigación, declarándose pesimista. Según el Doctor Fernando Gil actualmente, al momento de enseñar sobre investigación, se promueve más el dominio de un tema en vez de una visión interdisciplinaria en la investigación: "hay una mentalidad de la conquista que tiene que ver con la especialización, ya que hoy en día si no sigues una línea de investigación el sistema te penaliza por todas partes y toda tu vida estarás condenado a escribir sobre este tema".
En un país como Chile, donde los profesionales titulados con magísteres y los doctorados constituyen un porcentaje mínimo de la población, es mucho más factible que la investigación en ciencias sociales se reproduzca como "una forma de superioridad y distinción social", indicó el Prof. Fernando Gil, donde sólo unos pocos tendrían acceso a nuevos conocimientos. Para romper esta cadena que distorsiona una construcción honesta de la investigación aplicada, el sociólogo proveniente España propone concebir "una investigación como un instrumento de cultura popular que sea más gratificante y que se base también en mitos de cultura popular como en las telenovelas donde los personajes "malos" son ejemplo de investigadores, personajes que sospechan siempre", afirmó el intelectual, rescatando una figura popular aplicable al rol del investigador.
Prof. Claudio Duarte: "Nos hemos ido separando cada vez más de las personas"
Para el Prof. Claudio Duarte, actual director investigador de un proyecto ANILLO sobre las transformaciones sociales en los jóvenes chilenos, es urgente reconocer la investigación aplicada como un modo de militancia política en tanto se genera en relación que interviene lo social y que puede afectar los trayectos de los integrantes de la población investigada. Duarte reconoció -al igual que el prof. Fernando Gil- que enfrentamos la producción de un conocimiento autoritario en algunas investigaciones aplicadas en ciencias sociales donde "vamos constituyendo nuestra institución universitaria como un templo al cual no cualquiera accede".
La intención de esta jornada fue generar una discusión con vías de acercar más a las diversas comunidades en los procesos de estudio científico-social, a través del desarrollo de una visión más amplia e integradora de lo que significa la investigación aplicada en ciencias sociales por parte de sus mismos investigadores. En esta dirección es que el sociólogo Claudio Duarte, a modo de autocrítica, afirma que "nos hemos ido separando cada vez más de las personas a las que decimos querer conocer y cada vez más tecnificamos la producción de dicho conocimiento y de su comunicación, con lo que se profundiza la distancia y el no-diálogo entre el investigador y la comunidad".
Para el docente de la FACSO, Claudio Duarte, el reconocimiento político del rol del investigador permite una relación más próxima con las comunidades investigadas. Para el académico "lo aplicado de una investigación se juega en su rendimiento político como transformación social tanto de lo investigado como de las dinámicas de quienes investigan, generando el potenciamiento de organizaciones, el agenciamiento de militancias, además de transformaciones personales". Es necesario el encuentro entre investigadores y sus comunidades haciendo que dicho cruce cumpla una función social que es la de desplegar -según las palabras del profesor- "sus intelectos, sus imaginaciones sociológicas para conocer e intervenir en sus realidades".
Prof. Jorge Razeto: "La producción del conocimiento se genera en conjunto con la comunidad"
Desde un análisis de caso y desde su propia experiencia como investigador, el académico de antropología Jorge Razeto de la FACSO abarcó la historia de un conjunto de investigadores en la Corporación CIEM Aconcagua, ONG ubicada en el Valle del Aconcagua en la provincia de San Felipe de Los Andes. En esta agrupación, surgida en 1995, participa una diversidad de voluntarios, un equipo de trabajo diverso, que incluye a investigadores y que busca el desarrollo sustentable del valle del Aconcagua potenciando su promoción cultural.
"Nuestras prácticas investigativas se realizan en conjunto con las comunidades y tienen una dimensión que podemos llamar científica y tienen un soporte que es el saber de las comunidades o lo que la comunidad tiene", señala el académico Jorge Razeto. Se trata de un trabajo con la comunidad que la beneficia en tanto promueve la construcción de una identidad local, donde destacan el interés que los investigadores tienen por la tradición oral y las producciones artísticas populares de la comunidad.
Desde esta experiencia de intervención aplicada y en relación con la comunidad, se entiende que la investigación aplicada "debe ser participativa, multifacética y dinámica porque la producción del conocimiento se genera en conjunto con la comunidad", indicó el profesor de la FACSO. El impacto de estas intervenciones genera cambios en la comunidad. Así, y a partir de la experiencia compartida por el antropólogo Jorge Razeto, una comunidad que discute y genera espacios de trabajo comunitario, que reflexiona sobre su comunidad, logra producir su conocimiento. En este caso particular, la propia comunidad logró, por ejemplo, hacer una "enciclopedia" de las aves que luego logró que 8 mil hectáreas de sus territorios estén hoy libres de la caza.