¿Cómo definir el rumbo que ha tenido el diseño teatral en Chile durante los últimos veinte años? ¿Qué cambios ha sufrido el área ante el panorama escénico actual de confluencia de distintos lenguajes artísticos en una misma puesta en escena? ¿Cómo pensar el diseño escénico en la actualidad? Esas y muchas otras preguntas fueron las que propiciaron la realización de la charla "Miradas sobre 20 años de Diseño Escénico en Chile" realizada el pasado 16 de enero en el Centro Gabriela Mistral (GAM) en el marco de la edición 2013 del Festival Internacional de Teatro Santiago a Mil.
Acudieron a la actividad destacados creadores cuyos trabajos fueron y son referentes de la disciplina en Chile. Encabezó la ponencia la académica del Departamento de Teatro (Detuch), profesora Maite Lobos, quien compartió puntos de vistas y desafíos con sus colegas Ricardo Romero, Ana Campusano, Felipe Olivares y Juan Andrés Rivera (Los Contadores Auditores).
La profesora Lobos inauguró la ponencia haciendo un recorrido histórico que comprendió desde el estreno de la obra Cinema Utopia de Ramón Griffero hasta Nemesio Pelao, ¿qué es lo que te ha pasao? de Andrés Pérez.
La académica del Detuch señaló que el montaje que en 1985 estrenó Ramón Griffero es determinante pues no sólo se aleja del realismo, sino que " reinstala la necesidad de que el espacio sea un lugar para plantear hipótesis". Continuando con su revisión en la década de los 80' destacó el trabajo de La negra Ester de Andrés Pérez e Historia de la Sangre del Teatro La Memoria de Alfredo Castro. "Rodrigo Vega (del Teatro La Memoria) establece en escena un diálogo con las artes visuales que perdura hasta hoy".
Otro de las propuestas que juicio de la profesora Maite Lobos destacan en los últimos veinte años de diseño teatral es Pinoccio de la Troppa. "Ellos crean desde la imagen para la puesta en escena, parten de lo visual, son ajenos al realismo" También relevó lo hecho por Mauricio Celedón y el Teatro del Silencio en "La mala sangre".
Instalada temporalmente en los 90', la académica relevó nuevamente el trabajo de Rodrigo Vega a propósito de la versión de Alfredo Castro de Hechos Consumados. "Vega trae al teatro el concepto de perspectiva, que es propio de las artes visuales y lo pone en escena problematizado".
Añade al recorrido la propuesta del Colectivo La Patogallina en El húsar de la muerte y la obra Nemesio Pelao ¿qué te ha pasao? De Andrés Pérez, pues en ésta última "se produce el fin de las producciones de Pérez del tipo barroco que buscaban lo popular".
La siguió en la exposición el diseñador Ricardo Romero, quien centró su ponencia en el trabajo que viene realizando en la compañía Teatro La María que dirige Alexis Moreno. "Inicialmente mi idea era alejarme de lo que me habían enseñado en la Escuela, que tenía que ver con el realismo", acotó. Posteriormente y con el paso del tiempo su propuesta se relacionaba con problematizar el recurso y transformar la luz en un elemento significante.
Fueron Felipe Olivares y Juan Andrés Rivera (Los Contadores Auditores), los encargados de concluir las ponencias. De una reconocida estética y merecida notoriedad, la dupla de diseñadores expuso las problemáticas y preguntas que guían su quehacer. Ejemplificando en la cantante Lady Gaga señalaron que la propuesta debe contener algo extra o distinto a lo que los espectadores pudiesen ver por televisión o Internet. "Que no sea sólo una obra, sino que una experiencia", dijeron. "Nos gusta pensar que la gente es parte de la misma puesta en escena".
Agregaron que para su trabajo- que acaba de cumplir cinco años- buscan "referentes de la cultura de masas, de Internet y la televisión, ya que éstas son las nuevas formas de identificarse con el espectador y su imaginario", mencionó Juan Andrés.
"La autoría del diseñador no tiene que ver con los colores y las formas, sino con las decisiones que toma. Se trata de cómo los diseñadores podemos aportar a la narración", especificó Felipe.
A modo de conclusión y tras una ronda de preguntas, la profesora Maite Lobos indicó la importancia de instancias de conversación como esas, ya que existen temas tan concretos como la inclusión del nombre de quién realizó el trabajo de diseño hasta reflexiones sobre estéticas que es necesario discutir.