Publicaciones estudiantiles

Malestar y conflicto social fue el tema central de la Revista Némesis N°10

Malestar y conflicto social fue el tema de la nueva Revista Némesis
De izq. a der: Iván Pincheira, Camila Mella, Rodrigo de la Fabián y Alberto Mayol.
De izq. a der: Iván Pincheira, Camila Mella, Rodrigo de la Fabián y Alberto Mayol.
La presentación de la revista contó con un numeroso público.
La presentación de la revista contó con un numeroso público.
El stand con los ejemplares de la revista Némesis.
El stand con los ejemplares de la revista Némesis.

"Si bien 2011 y 2012 fueron años en los cuales parecen revivir las movilizaciones sociales, no se aprecia nítidamente la constitución de nuevas fuerzas políticas. En efecto, la hegemonía se va rearticulando, mientras que los centros de dirección moral e intelectual del país van pronunciando los primeros direccionamientos políticos posteriores a las convulsiones sociales. Estos centros, por un lado, defienden dogmáticamente al modelo económico y valórico instalado en dictadura; mientras que, por otro lado, refuerzan la estructura política de una institucionalidad eminentemente antipopular y excluyente", afirma en su editorial el equipo de la Revista Némesis.

Sobre esta coyuntura política y social se cimentó la presentación y posterior debate de esta publicación, el 17 de junio pasado, en el auditorio de la Facultad de Ciencias Sociales (FACSO). En tal oportunidad, la directora de la revista, Camila Mella, quiso "agradecer al Depto. de Sociología por el apoyo financiero que permite que hoy tengamos en nuestras manos el décimo ejemplar de nuestra revista, sobre todo al director del Departamento, Raúl Atria, por el compromiso y la confianza puestos en el proyecto desde fundación en 1998. Especialmente queremos agradecer al Doctorado en Ciencias Sociales y al Centro de Investigación Aplicada en Educación".

Némesis es una publicación de las y los estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile. Es un espacio para la discusión de problemáticas de la sociedad actual, que vincula la formación de pregrado con la reflexión política. 

La revista incluyó las siguientes temáticas para convocar a las y los autores de los artículos que contiene su último número: Movimientos sociales: ¿nuevas formas de manifestación y acción colectiva?, Repertorios culturales de la posdictadura chilena, Tensiones en el orden y el conflicto y artículos libres y entrevistas vinculadas a los derechos sociales, la violencia social y el malestar.

El malestar y la felicidad

Los presentadores se explayaron acerca de los conceptos de malestar y felicidad. El Prof. Alberto Mayol, afirmó que, "en el fondo, el malestar tiene como horizonte la deslegitimación. Lo que nos dice esta investigación (refiriéndose a la titulada El Chile Profundo: cultura de la desigualdad en Chile contemporáneo, realizada en el Centro de Investigación en Estructura Social (CIES), Iniciativa Científica Milenio de FACSO, en 2011) es que de alguna manera en Chile la posibilidad de expresión de los criterios igualitarios está todavía sumida en la posibilidad de la expresión simple y pura del malestar. Por lo tanto, la igualdad no es un repertorio positivo, es un reclamo, es una crítica. Esa tensión es la que se denota en la historia del movimiento estudiantil: la educación gratuita alcanzó la potencia enorme de ser una propuesta, pero en 2012 se abandonó esta propuesta para concentrarse en el no al lucro, reduciendo su repertorio y quedándose del lado de la crítica. Hoy es problemático cuánto malestar hay, básicamente porque el horizonte del malestar es el proceso de deslegitimación".

En tanto que el académico del Depto. de Sociología, FACSO, Universidad de Chile, Iván Pincheira, sostuvo que "el fin último de la política debería ser promover la felicidad para el mayor número de personas posible. El tema de la felicidad, tanto en las ciencias sociales como en la política pública, ha ido cobrando relevancia últimamente a nivel latinoamericano. El presidente de Bolivia, Evo Morales, en el marco de la Segunda reunión de Naciones Sudamericanas UNASUD, realizada en 2006, proclamó que los nuevos gobiernos en la región debían tener como horizonte el vivir bien. La nueva constitución de Ecuador, también se ha propuesto constituir el buen vivir".

Y continuó: "El gobierno chileno, a partir de 2012, comenzará a implementar instrumentos estadísticos para medir los niveles de felicidad y satisfacción de la población. Cuál debería ser el tipo de política pública necesaria para garantizar eso que hemos denominado la felicidad, la satisfacción, el bienestar. Es acá donde se dirime la profundidad de las críticas proferidas por los movimientos sociales chilenos. Podemos advertir cómo los movimientos sociales, pese a la serie de restricciones de nuestro vigente sistema de participación política, vienen incidiendo de manera cada vez más evidente en los procesos de definición de las políticas nacionales. De esta manera se hace necesario un espacio institucional que permita la incorporación de las propuestas elaboradas desde los movimientos sociales al momento de diseñar las políticas públicas nacionales".

Rodrigo de la Fabián, Director de Posgrado e Investigación de la Universidad Diego Portales, hizo una revisión crítica del concepto de bienestar para luego en el marco de las protestas estudiantiles intentar reivindicar políticamente la noción de malestar: "Me parece que la preocupación por la felicidad se inserta dentro de los presupuestos ideológicos neoliberales más tenaces. Me refiero a la posibilidad de generar las condiciones de lo que en la teoría de juego y en Economía se denomina una win-win situation. Se trata de modalidades de intercambio social en la cual no hay ganadores y derrotados sino que todos ganan".

"Hay malestares que no comparten la felicidad que el modelo neoliberal les propone, haciendo estallar la ilusión ideológica de continuidad y pacificación del campo social. Algo de eso me parece encontrar en el movimiento estudiantil y lo podemos visualizar en la demanda de fin al lucro. ¿Cómo podemos responder a esta demanda? Es imposible, por eso los estudiantes aparecen como intransigentes. Los estudiantes no piden una mejora en la calidad de la educación, no piden más becas, porque simplemente no quieren lo mismo que los empresarios de la educación. No estamos hablando de la misma felicidad, de allí que la demanda aparezca como incombustible ante el modelo socioeconómico", concluyó.

Posteriormente tuvo lugar un nutrido debate bajo el tema Conflictos sociales en el Chile actual: ¿entre el malestar y el bienestar?