Visita de la Socióloga Argentina a FACSO

Elizabeth Jelin: "El momento reflexivo sobre qué aprendimos y cómo transformar, es fundamental"

Elizabeth Jelin en Facso: "Nunca hay una memoria única"
Jelin durante el taller "Memorias y Subjetividades"
Jelin durante el taller "Memorias y Subjetividades"

En su estadía Elizabeth Jelin, experta en temas de derechos humanos, memorias de la represión política y ciudadanías, participó en una serie de actividades académicas, como la realización del primer taller de oficio de investigar/crear "Imagen y Memoria en la investigación/creación"actividad que se realizó en uno de los territorios donde trabaja el Núcleo de Investigación/Creación "Vidas cotidianas en emergencia: territorio, habitantes y prácticas" en la ciudad de Santiago; así como reuniones de trabajo con el equipo de investigación Fondecyt.

Dentro de las actividades abiertas al público, la socióloga participó del Coloquio Internacional "Golpe: 1973-2013", que se realizó en el Teatro Nacional Antonio Varas, donde expuso en la mesa "Derechos Humanos y Memoria". Su estadía finalizó con la realización de un conversatorio sobre "Memorias y Subjetividades", organizado por Programa de Investigación Interdisciplinar "Subjetividad, desarrollo y calidad de vida".

¿Cómo vivió su participación en las actividades académicas en un contexto de conmemoración de los 40 años del Golpe de Estado?

Fue una semana muy especial en Chile, de mucha conmoción y mucha emocionalidad, y al mismo tiempo fue un trabajo muy arduo de poner distancia de lo que me estaba pasando y poder ponerse a trabajar sobre un proyecto de investigación y sobre los dilemas que la tarea de investigación implica. Yo creo que fue una semana muy productiva y muy estimulante y creo que para ellos (el equipo Fondecyt) también, en el sentido que pudimos hacer una práctica que pocas veces hacemos. Cada vez que entregamos un proyecto de investigación, pareciera que está todo dicho sobre cómo se va a hacer. Sin embargo, es un proceso y los procesos de investigación tienen prácticas de aprendizaje donde el momento reflexivo sobre qué aprendimos y cómo transformar es fundamental. Y eso es lo que estuvimos haciendo. Inclusive en la propia dinámica del proyecto, el hecho de que haya ocurrido tanta conmemoración de los 40 años, tienes que cambiar hasta las preguntas que se hacen.

¿En que constó la realización del taller "Oficio de investigar y oficio de crear" que se realizó junto al núcleo "Vidas cotidianas en emergencia: territorio, habitantes y prácticas"?

Fue principalmente un diálogo entre investigación y creación. Era un dialogo con los artistas que tienen el centro en ese territorio y no es que hagan asistencialismo, sino que hacen arte. Fue muy interesante e importante la realización del taller, por la postura del grupo de elegir hacer la investigación en ese territorio y no en otro lugar de la ciudad. Fue muy estimulante y trabajamos mucho sobre una cosa que en las Ciencias Sociales y en la Psicología, inclusive, se trabaja muy poco y que tiene que ver con el uso de imágenes y muy específicamente sobre la fotografía y ahí yo creo que abrimos una serie de diálogos que esperemos podamos seguir.

En el taller "Memorias y Subjetividades", participaron muchos estudiantes, todos con una gran motivación por hablar sobre todo de los 40 años y la memoria.

Sí, absolutamente. Pero yo lo que siento en este viaje es que en momentos en Chile hay como un encerramiento, pensando que es absolutamente único lo que les está pasando. Y cuando uno viene de afuera y te dicen "mira, esto", eso pasa en otros lados también porque tenemos más para compartir. La nación o el país es uno de nuestros anclajes pero no el único.

¿Cuál es la herencia de la dictadura más fuerte que usted ve en el Chile actual?

Yo noto que tenemos un Chile, donde una de las herencias más pesadas de la dictadura, es el quiebre del lazo social y la entrada fuerte que tuvo el modelo económico y su ideología, la que es muy individualista. Entonces uno ve gente suelta que por ahí que piensa lo mismo, y ahí son sumas de memorias, pero no hablan entre sí, no forman colectivos, no forman comunidad, no forman interacción y para mi ese es uno de los legados más dolorosos en términos de imaginar sociedades futuras.

Usted realiza una fuerte crítica al concepto de la "memoria colectiva".

Según el paradigma desde el cual yo trabajo nunca hay una memoria única y no quiero llamarla colectiva, porque en la noción de colectiva parece que todos estamos de acuerdo y compartimos una misma mirada. Además, la noción de memoria colectiva no tiene una noción de luchas por el poder. Entonces, cuando yo digo memorias dominantes me queda muy claro que es algún grupo dominante que instala su relato y que lo instala sobre otros que tienen menos poder, porque tienen menos medios, menos poder económico, etc. Entonces, la noción de memoria colectiva no habla de una lucha social sino que habla de consenso. En una teoría del conflicto no hay lugar para una memoria colectiva que sea unificada y que todos compartan.