Investigadora francesa presentó estudios sobre los y las lectores de novelas de horror

F. Soldini: 'Los lectores no buscan un mayor conocimiento sobre la muerte, lo que buscan más bien es suspenso y misterio'

Lo que buscan los lectores en las novelas de terror
Prof. Fabienne Soldini, investigadora de Sociología del Arte y las Emociones
Prof. Fabienne Soldini, investigadora de Sociología del Arte y las Emociones
La investigadora francesa se reunió con estudiantes e investigadores en la U. de Chile
La investigadora francesa se reunió con estudiantes e investigadores en la U. de Chile
Prof. Marisol Facuse, Prof. F. Soldini y Prof. María Emilia Tijoux
Prof. Marisol Facuse, Prof. F. Soldini y Prof. María Emilia Tijoux

Como un dominio vanguardista en las ciencias sociales, la socióloga Fabienne Soldini presentó parte de sus investigaciones realizadas en Francia sobre prácticas culturales vinculadas a la lectura de textos best-sellers pertenecientes a los géneros de terror y a las novelas policiales. Durante conferencias abiertas y un taller metodológico, organizados por el Doctorado de Ciencias Sociales y el Magíster en Ciencias Sociales, mención sociología de la Modernización, de FACSO; la Prof. Soldini  profundizó en sus investigaciones realizadas a lectores de novelas policiales y macabras. En este país europeo una de cada cinco novelas publicadas corresponde al género policial.

Solidini realizó estas investigaciones de lectores de novela negra y también una investigación sobre los conflictos sociales en bibliotecas, con el apoyo del Centro Nacional de la Investigación Científica (CNRS) en Francia. Durante la visita en la Universidad de Chile, la investigadora compartió con integrantes del Núcleo de Sociología del Arte y las Prácticas Culturales y con integrantes del Núcleo de Sociología del Cuerpo y las Emociones del Depto. de Sociología de la Universidad de Chile. Al final de esta nota se integra parte del diálogo entre estudiantes e investigadores nacionales con la académica proveniente de Francia.

"La muerte es la nueva pornografía", Prof. Soldini

La investigadora Fabienne Soldini realizó entrevistas a lectores de novelas de horror para conocer esos intereses que han convertido en éxito de masas a este tipo de producciones culturales, a diferencia de otras publicaciones. Estudiando a través de análisis textuales un gran corpus de novelas macabras, Soldini reconoció que este tipo de textos describen en profundidad los detalles de la muerte y los cadáveres. "Hoy la buena muerte es una muerte rápida", explicó la académica francesa profundizando en la relevancia que la muerte adquiere en este tipo de novelas para sus lectores, "Los lectores contemporáneos no buscan mayor conocimiento sobre la muerte, sino que buscan suspenso y misterio. Hoy prevalece el miedo a la muerte anónima a diferencia del miedo principal del siglo XIX que era ser enterrado en vida. Por ello en las novelas de suspenso contemporáneas lo principal ya no es reconstituir la identidad del asesino sino que la identidad de la víctima".

A propósito de la relación entre el éxito de las novelas policiales y macabras con la experiencia de las guerras y los totalitarismos del siglo XX, la investigadora señala que los lectores de novelas de horror cuando son entrevistados aluden espontáneamente al nazismo, para luego realizar preguntas sobre ¿por qué existe el mal? o ¿por qué el hombre provoca el mal? En estas novelas, y en otro tipo de thrillers franceses, muy frecuentemente hay referencias al campo de concentración y al nazismo: "puede ser un párrafo o una página donde se reproducen torturas nazis, raptos de víctimas, esconder a personas en espacios subterráneos o la acción de médicos que realizan experimentación terrible (como lo hicieron los nazis) y en todas estas novelas se apela al nazismo", explica la investigadora del CNRS, señalando que este tipo de producciones culturales dan cuenta de una transformación de la mirada inocente sobre el hombre y la sociedad presente en los textos de filosofía política del XIX.

El placer de leer novelas de terror

Siguiendo la sentencia de Hanna Arendt sobre la "banalización del mal" en los contextos culturales y políticos contemporáneos, la investigadora visitante en FACSO reconoce cómo las novelas de horror son hoy protagonizados por figuras categorizadas por "monstruos morales". Es así como en la novela y película "El exorcista" se amenaza con que el mal o el diablo pueden aterrizar sobre los cuerpos de individuos ordinarios e inocentes, no solamente sobre cuerpos de pecadores.

Otra de las figuras protagonistas de estas novelas son los fantasmas, vampiros y zombies, que son también objetos de fascinación en películas y series de televisión de carácter internacional. Según los lectores el vampiro es una figura atractiva, a diferencia de otros monstruos, porque "tiene que ver con las exigencias de ser joven y atractivo a pesar de tener más de 300 años", explicó Fabienne Soldini entre algunas risas del público asistente al seminario titulado "Construcción del Cuerpo y las Emociones: arte, muerte, interpretación".

La emoción es otra de las categorías que sobresale en los lectores de novelas macabras, en este sentido el miedo es un modo de lectura impreso en estos relatos. Para Soldini existe una emoción apreciativa donde "sobresale el asco, el horror o la represión en situaciones donde hay bien y mal presentes". Según Soldini los lectores pueden quedar afectados, incluso físicamente, posterior a la lectura de un relato de terror: "existen las emociones informativas, que son producidas por relatos de gran angustia, donde lo verdadero y lo falso se ponen en juego y donde no se sabe qué ocurrirá". Para los fanáticos de estas novelas asumir que el relato no es tan ficción disminuye el goce por la lectura.

Diálogo con estudiantes e investigadores FACSO

¿La sociología del arte forma parte del mainstream en las ciencias sociales europeas?

La sociología del arte es un tanto marginal en el campo de las ciencias sociales. Es una sociología poco considerada, sin embargo yo considero que es importante para el sociólogo entender lo que piensan los actores sociales y cómo lo piensan, lo social no se detiene sólo en lo material, en el trabajo o en lo económico, hay un aspecto que tiene que ver con el saber y la cultura. Es una sociología minoritaria pero que hay que defender y decir sí, nosotros también tenemos cosas que decir.

¿Para quienes trabajamos con estudiantes de primer ciclo universitario ¿Cómo abordar qué y por qué leen los estudiantes actualmente?

En Francia hay algunos trabajos sociológicos sobre lecturas de los estudiantes, hay una encuesta de los años 90 que muestra que los estudiantes lectores se dividen en diversos tipos según las carreras: lectores estudiantes de literatura, de ciencias duras o de medicina. Lo biólogos casi no leen otro tipo de literatura, en cambio los de literaratura leen de todo. Por otra parte, las novelas de terror y ciencia ficción interesan más a los jóvenes y adolescentes hasta los 30 años. Después de 30 años no  se lee sobre ciencia ficción, aunque una vez encontré un lector del género fantástico que tenía 54 años. Hay también tipos de lecturas: lecturas obligatorias y lecturas escogidas, lecturas impuestas y lecturas para el trabajo, estas son algunas de las diferencias que se hacen al momento de analizar los tipos de lectura. Así como está la dicotomía cuerpo/espíritu, los teóricos cuando estudian las lecturas de los jóvenes liceanos separan entre lectura por gusto y lectura para el trabajo, aunque también se puede leer para el trabajo lecturas que producen mucho placer. Para mí la distinción significa considerar una permeabilidad entre la lectura del trabajo y la lectura por placer.

¿Las películas de terror tienen algún efecto en la realidad?

Yo trabajo sobre la novela policial como discurso social, es decir cómo es leído como discurso social. La novela social se inspira de la realidad, la novela negra en este sentido es muy geopolítica y política, ya que pone en escena situaciones de hombres y mujeres en hechos de crónica roja. Hay pasajes literarios ubicados entre la ficción y la realidad. Esta es la razón de por qué estas novelas negras son valorizadas, son leídas y son defendidas por sus lectores -son incluso defendidas hoy por los críticos-, porque son consideradas como una forma literaria de la realidad y estas formas de la novela conforman una novela en algo "serio". En Francia hace algún tiempo este tipo de novelas policiales tenía mala fama ya que eran parte de la cultura popular que se oponía a un tipo de lectura legítima, siendo calificada como una lectura fácil, no intelectual y que volvía a las personas tontas. Hace algún tiempo aparece un discurso diferente que dice que gracias a las novelas policiales podemos comprender mejor la sociedad, tratándose de una novela que se puede pensar incluso desde el plano político.