IV.5.3 Crédito o asistencia (La Época, Marzo de 1997)
"Ha sido en general bienvenida la decisión de la autoridad en torno a crear una línea de crédito para financiar estudios de educación superior No ha sido una idea novedosa, toda vez que un similar sistema había sido puesto en marcha para parte del sistema privado no subvencionado. Pero constituye tina acción igualmente beneficiosa, porque aumenta las posibilidades educativas de la clase media, cuyo principal problema lo constituye el flujo de fondos que le permita efectivamente acceder a la educación superior.
Sin embargo, se trata de un sistema que necesita ser perfeccionado, y a cuya aplicación efectiva deben concurrir una serie de clarificaciones necesarias. Es decir, un paso importan te, pero que necesita elementos adicionales claves.
El mencionado crédito cubre, de acuerdo a las declaraciones de personeros responsables, los costos de matrícula. Pero sabemos que los costos adicionales como transporte, adquisición de material de apoyo, y hasta de alimentación y vivienda en el caso de estudiantes no residentes constituyen una parte fundamental del costo de educarse, convirtiéndolos en un verdadero obstáculo. Y la verdad es que estos gastos determinan,. en gran medida, la posibilidad de éxito en los estudios, siendo por lo tanto un factor que aumenta la "rentabilidad financiera".
Un segundo problema, se refiere al alto énfasis en los retornos financieros que este tipo deasistencia implica. Probablemente está bien, en el caso de carreras que tienen una alta rentabilidad apropiable en términos privados, citando las personas ejercen su profesión. En este caso, nada hay que justifique un subsidio otorgado por la comunidad. Pero hay muchos otros, en que la rentabilidad privada es baja, pero la rentabilidad social puede ser extremadamente alta; ejemplos sobran, pero uno puede clarificar el caso con las carreras artísticas y de algunas áreas de las ciencias, sociales. ¿Permitirá el sistema que estas carreras sucumban ante un mercado que no reconoce sus importantes efectos externos positivos?
Parece ser que estos dos problemas deben abordarse con más discusión. Al parecer, las propias universidades, no han tenido oportunidad de opinar sobre un sistema que, sin embargo, afecta la forma, en que "producen ". El sistema da incentivos para crear más de las carreras "rentables ", Y menos de aquellas que serán caracterizadas por insolvencia y falta de recursos. Cómo tampoco hay una política de financiamiento universitario que ponga énfasis en las formaciones que la sociedad espera tener en las instituciones subsidiadas, nos esperará un futuro sin artistas, sin filósofos, sin cientistas sociales, etc., ¡Fantástico! dirán algunos. Pero la verdad, es que sería un triste reconocimiento a la imposibilidad de la política pública de identificar las limitantes del mercado, y a proponer acciones que. corrijan las naturales deficiencias asignativas de este mecanismo en la educación".