Legislar sobre el fondo
26 de Abril de 2000
Un Parque Tecnológico permite acercar la investigación universitaria a la actividad productiva, y por esa vía constituye una forma de acelerar la adopción de nuevos conocimientos y tecnología para un mejor desempeño productivo y comercial. La Cámara de Diputados está considerando un proyecto sobre esta materia, en que las preguntas no han girado, desafortunadamente, sobre el proyecto en sí. Cosa lamentable, ya que se distorsiona el fundamento de una idea innovativa y de rédito a largo plazo. Un conjunto de preguntas se basa en que el apoyo del Estado a la Universidad de Chile constituye competencia desleal. Se postula que no deben existir las universidades públicas, y que proyectos como éste no debieran hacerse, ya que habría que esperar permanentemente que su rentabilidad privada sea lo suficientemente alta en una perspectiva de corto plazo, como para que sea emprendido. Esta manera de hacer país y proyectos de retorno social alto y futuro habría en el pasado impedido que existiese la Universidad de Chile, como tantos otros proyectos del Estado chileno que han probado su enorme rédito social en el tiempo.
Otros han preferido concentrarse en el tema ambiental, que es un buen parapeto para defender determinados intereses, tanto y como para mostrar inquietud sobre algo que, aunque no sea bien entendido en aspectos técnicos, se ve muy bien en la cara comunicacional. El proyecto, por cierto, tiene un estudio de impacto ambiental que, curiosamente, los críticos ni siquiera conocen o han solicitado. Más allá, otros objetan que el Estado autorice un endeudamiento con el BID, y que le preste su aval a la operación, a pesar de ser ésta la única alternativa de financiamiento para un proyecto de este tipo. En el fondo, "apoyar el proyecto haciéndolo inviable financieramente", lo que es una forma pusilánime de hacer política pública. Se ha llegado a sugerir que la Universidad ponga como garantía el terreno: ¡Una institución del Estado rindiendo garantía frente a su propietario!
La Universidad es un centro de reflexión, investigación y docencia. Las ideas que de ella emanan se basan en propuestas serias y fundadas; y en el caso de la Universidad de Chile, con interés de país, no bajo ningún otro. Por ello, es necesario y vital que se discuta sobre el fondo del proyecto y sus ideas, y no sobre los aspectos secundarios que reflejan otros intereses. La Universidad lo exige en nombre de la inteligencia.