Hace unas semanas el Comité Calificador de Variedades del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) otorgó la inscripción provisional en el Registro de Variedades Protegidas a la nueva variedad chilena de ciruelo japonés "Sweet Pekeetah", primer exponente de esta fruta creada por el Laboratorio de Mejoramiento Genético y Calidad de Fruta de la Facultad de Ciencias Agronómicas, a cargo del profesor Rodrigo Infante.
La nueva variedad, tienes sus orígenes en 2008, año en que los investigadores comenzaron a trabajar en el mejoramiento genético de este frutal, cruzando distintas variedades y tipos de frutas, produciendo hijos de estos cruces y seleccionando la descendencia más idónea. Este producto se suma al desarrollo de cuatro variedades de nectarino y una de duraznero inscritas por el mismo laboratorio y comercializadas en Chile en los últimos cinco años.
"Las variedades de ciruela en general no son de muy buena calidad sensorial, porque son muy ácidas y no satisfacen mucho a los consumidores. Nuestro foco en el laboratorio fue desarrollar variedades de buenas calidades gustativas, es decir, que fuera un placer comerlas", afirmó el profesor Infante.
El trabajo del equipo de investigadores dio resultados, y este nuevo ciruelo originado en la Casa de Bello muestras ventajas indiscutidas.
"Una de las características más importantes del "Sweet Pekeetah" es que tiene un contenido de azúcar muy alto. Tiene una acidez baja, lo que es relevante porque muchas veces pasa que la parte que está cercana a la piel de la ciruela es ácida o amarga incluso, esta no tiene ese problema. Además esta variedad tiene una textura crocante, que se asemeja en algo a una manzana, y eso hace que sea especial. Mucho mejor que cualquier ciruela. En ese sentido nosotros pensamos que va a ser un éxito en el mercado", aseguró el investigador.
Y no solo en términos gustativos destaca esta nueva ciruela, su capacidad de conservación también se impone entre sus pares. "Esta fruta mantiene la calidad por mucho tiempo", señaló Infante, quien detalló que ésta "puede ser cosechada y conservada en cámaras de frío y por lo tanto ser exportada a lugares muy distantes. En este sentido, podríamos exportarla a China, que sería un mercado sumamente interesante para este producto".
Con la propiedad intelectual ya otorgada en Chile, las primeras plantas de esta variedad se comenzarán a vender en el país a fines del próximo verano. Paralelamente los investigadores están trabajando junto a la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo, en patentar la variedad en Estados Unidos y Europa. "Teniendo esos mercados podemos comenzar a desarrollarla comercialmente fuera del país", anunció el director del Laboratorio de Mejoramiento Genético y Calidad de Fruta.