Salud

Estudios en la placenta permitirán prevenir transmisión del Mal de Chagas de madre a hijo

Estudios en placenta permiten avanzar en prevención de Mal de Chagas
La investigación sobre la reacción de la placenta al Mal de Chagas permite conocer los factores que le permiten resistir a esta enfermedad, y pensar futuras estrategias terapéuticas.
La investigación sobre la reacción de la placenta al Mal de Chagas permite conocer los factores que le permiten resistir a esta enfermedad, y pensar futuras estrategias terapéuticas.
La Dra. Ulrike Kemmerling explicó que sólo conociendo el mecanismo completo de transmisión y resistencia al parásito del Mal de Chagas se podrá implementar estrategias terapéuticas exitosas.
La Dra. Ulrike Kemmerling explicó que sólo conociendo el mecanismo completo de transmisión y resistencia al parásito del Mal de Chagas se podrá implementar estrategias terapéuticas exitosas.

"Conocer la respuesta de la placenta ante la presencia del parásito Trypanosoma cruzi permitirá en el futuro diseñar estrategias terapéuticas, así como tener marcadores que podrían eventualmente predecir si el bebé se infecta o no". Con esas palabras la doctora Ulrike Kemmerling, directora del Programa de Anatomía y Biología del Desarrollo del ICBM de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile explicó la relevancia de la investigación publicada por la revista "Parasites & Vectors".

El artículo concluyó, tras armar un mapa genético de la respuesta de la placenta ante la presencia de este parásito, que el agente etiológico de la enfermedad de Chagas "induce fuertes cambios en los genes implicados en una amplia gama de vías, especialmente aquellas involucradas en la respuesta inmune contra las infecciones".

La Dra. Kemmerling, parte integrante de un equipo internacional con científicos de Chile, Argentina y Uruguay, explicó que la importancia del trabajo radica en que esta enfermedad tropical se encuentra entre las más desatendidas de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud y no cuenta con un tratamiento efectivo, no pudiendo utilizarse las drogas disponibles durante el embarazo debido a que dañan al feto.

"Es importante estudiar cuáles son los factores de la placenta que definen si el bebé es infectado o no, y también los factores del huésped. Sólo conociendo el mecanismo completo podremos implementar estrategias terapéuticas exitosas", aseguró la académica de la U. de Chile.

El equipo cultivó explantes de placenta humana en un medio artificial con diferentes concentraciones del parásito durante 2 y 24 horas, evaluando los cambios de expresión génica de más de 26 mil genes, algunos de los cuales -en particular aquellos implicados en la respuesta inmune, remodelación y reparación del órgano- sufrieron cambios en su actividad en el marco de los esfuerzos del parásito por romper la barrera placentaria, y de ésta por impedir su avance.

Junto a la Dra. Kemmerling trabajaron en la investigación Carlos Robello, del Instituto Pasteur de Montevideo y la Universidad de La República, y Alejandro  Schijman, del Instituto de Investigaciones en Ingeniería Genética y Biología Molecular "Dr. Héctor Torres" (INGEBI) dependiente de CONICET y la Universidad de Buenos Aires, junto a Christian Castillo e Ileana Carrillo de la Universidad de Chile, Gabriela Libisch del Instituto Pasteur, y Natalia Juiz, del INGEBI.

Los autores seguirán analizando las respuestas de la placenta ante la infección para estudiar los posibles usos como blancos terapéuticos y biomarcadores de pronóstico de la transmisión congénita.