Las experiencias de países como Suecia y Finlandia han demostrado que es posible proteger y usar sustentablemente los bosques nativos y obtener, al mismo tiempo, un retorno económico manteniendo su biodiversidad. A partir de este modelo nórdico de desarrollo forestal, el Centro de Modelamiento Matemático (CMM) y la Facultad de Ciencias Forestales de la Universidad de Chile formaron el primer Centro Tecnológico del Bosque Nativo Sustentable (CTBNS) en Chile y en Latinoamérica. A esta iniciativa se sumaron las universidades de La Frontera, Los Lagos y Magallanes e investigadores del más alto nivel científico y tecnológico de instituciones y centros de Suecia y Finlandia
Para el director del Centro, Dr. Paul Sepúlveda, la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas cumplirá un rol esencial en el desarrollo de este Centro. "Para llevar a cabo nuestros proyectos necesitamos, entre otros, a ingenieros estructurales, mecánicos, eléctricos y por su puesto matemáticos y la Facultad no sólo cuenta con profesionales capacitados en cada una de estas áreas, sino que además tiene entre sus pilares fundamentales a la tecnología", explica.
El CTBNS es además una entidad multidisciplinaria, basada en la tecnología y en la modelación matemática, que se preocupará de la generación de conocimiento y desarrollo sobre el bosque nativo y su relación con el entorno social, local y regional. Además considerará la participación de todos los actores involucrados: desde quiénes lo habitan a los que viven de él, incluyendo a los interesados en sus recursos y en sus productos derivados.
"Se trata de un proyecto país orientado a proteger los bosques a través de la comprensión del rol que cumplen y de la utilización de ciencia de la más alta calidad", explica Jaime San Martín, director del CMM.
Este Centro contempla generar proyectos para apoyar a la industria, en el marco del desarrollo sustentable de los bosques nativos, y establecer nuevas líneas de investigación aplicadas y de docencia en esta área. "Según la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) existe un recurso significativo de 3.6 millones de hectáreas de renovales de bosque nativo que si son bien valorados en bienes y servicios pueden traer, para la población que vive en ellos o en sus cercanías un mejor estándar de vida", agrega San Martín.
Para Paul Sepúlveda el conocimiento de este bosque nativo también les permitirá, a los países nórdicos involucrados en el Centro, desarrollar una nueva industria de insumos para la producción de esta madera o modificar la ya existente. "Además hay un alto interés de los científico europeos por la biodiversidad única que ofrece nuestro bosque nativo y será labor del CTBNS impulsar nuevas líneas de investigación en esta área", concluye el Dr. Sepúlveda.
"En los últimos 30 años, las políticas del Estado se han dirigido al manejo y al desarrollo industrial de las plantaciones forestales -que han sido muy importantes en el desarrollo económico del país-, pero que han dejado al bosque nativo en un segundo plano", comenta Patricio Corvalán, académico de la Facultad de Ciencias Forestales y miembro del directorio del CTBNS, además agrega: "esta falta de políticas que incentiven su manejo, en conjunto con leyes que prohíben su extracción, están inmovilizando las opciones de uso económico de los propietarios, los cuales asumen el costo de las externalidades positivas que estos bosques generan hacia el resto de la sociedad".