Impulsada por el programa de intercambios de Culturesfrance el 2005, esta exposición de fotografía que se inaugura el jueves 28 de junio en el Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de Chile, establece un diálogo entre obras de artistas franceses y europeos y sus pares de otros países, creando un circuito de itinerancia que en Chile cumple su primera visita a Latinoamérica.
Signes d'existence es una curatoría del exdirector del Jeu de Paume, Régis Durand, cuyo eje principal propone una revisión al carácter testimonial de la fotografía y su desplazamiento hacia el video, que amplía la mirada más allá de la tradición documental hacia intersticios donde realidad e irrealidad se confunden generando un imaginario inagotable de signos de existencia.
"Actualmente las imágenes no buscan alcanzar la plenitud indiscutible del documento fotográfico como en su edad de oro. Más bien, se han convertido en herramientas que reflejan nuestro mundo y son capaces de registrar lo que está transformándolo ante nuestros propios ojos: aquellas acciones que además afectan la manera en que experimentamos el mundo", comenta Durand en su texto curatorial.
Para esta edición, que permanecerá hasta el domingo 2 de septiembre, el curador francés invitó a participar como cocuradores de la muestra al director de Artes Visuales de la Secretaría de Cultura Argentina, Andrés Duprat y al director del MAC, Francisco Brugnoli, quienes elaboraron un listado de destacados artistas contemporáneos del campo de la fotografía de cada país, cuyas obras heterogéneas se ofrecen al diálogo entrecruzado desde sus particulares orígenes de contexto.
Francia
La selección de artistas de Francia incorpora a: Kader Attia (1970), quien presenta un video sobre marginalidad e individuo; Valérie Belin (1964) con dos provocativas series de fotografías que cuestionan los límites entre lo animado y lo inanimado; Stéphane Couturier (1957), cuyas series develan la tectónica implacable del tiempo y las transformaciones espaciales de la topografía urbana. Pierre Faure (1965) exhibe registros de escenas aparentemente cotidianas de la vida urbana, de una extrañeza inquietante y ambivalente; Valérie Jouve (1964), quien participó en 1999 en la muestra colectiva del Museo Rochechouart en el MAC, nos propone una mirada particular a tres temáticas: los personajes, las fachadas y las situaciones; Nicolas Moulin (1970), en su video Nunatak, explora la incertidumbre de un mundo mecanizado desprovisto de cierta familiaridad humanista. Finalmente, la compleja propuesta de Georges Rousse (1947) propone redefiniciones de lugar mezclando fuentes de origen diverso, mientras Bruno Serralongue (1968) propone una mirada crítica a la función del reportero gráfico frente a eventos internacionales significativos.
Argentina
La selección argentina reúne obras disímiles, producidas en los últimos años por artistas que viven y trabajan en este país. Para su curador, Andrés Duprat, ellas "emiten una voz diferente en el profuso y disparatado concierto de imágenes que nos rodean". Matías Duville (1974) y su serie Nowhere ofrece imágenes de la provincia de Buenos Aires filtradas con un dispositivo de esferas de resina que le otorgan una atmósfera pictórica de reminiscencia puntillista; Raúl Flores (1965) expone en esta oportunidad un cuestionamiento crítico al concepto burgués de hogar sobre la base de registros de construcciones en obra; Laura Glusman (1971) y su serie Este amor no morirá jamás, nos enfrenta a lugares que resguardan una historia secreta cuyo relato no nos es revelado, sino insinuado; Alberto Goldenstein (1951) exhibe la serie Selva - interior, dispositivo que contrapone los conceptos de cultura y naturaleza. Por su parte, Marcos López (1958) expone en su trabajo una mirada irónica y provocativa a ciertos iconos y costumbres de la cultura latinoamericana y argentina; Jorge Macchi (1963) exhibe dos videos y una serie fotográfica donde la paradoja, el desplazamiento semántico y la búsqueda poética se traducen en el rescate de elementos simples y cotidianos. Finalmente, la dupla RES/Constanza Piaggio (1957/1982) presenta una serie de obras que desde la historia del arte problematiza realidades contemporáneas.
Chile
La edición chilena propone reparar en el arbitrio de las miradas como ejercicio de recorte de mundo y en la detención que las fija en su condición de reconocimiento. Para el curador Francisco Brugnoli las tres miradas provenientes de Francia, Argentina y Chile que enfrentadas por primera vez, se entrecruzan y se interrogan mutuamente como una mundanidad extraña a sus contextos de origen, buscan reconocerse en otras de cualquier lugar. "El ejercicio intenta al menos presentar esa otra condición que autoriza, ya no sólo a la mirada que las reúne sino, muy especialmente a aquella que las instala en un paisaje de su existir. El título de la muestra que nos convoca obliga a un riguroso recorrido por cada uno de los múltiples encuadres (recortes) que pueden develar una existencia que simultáneamente se nos impone como también resulta ser multiforme. Si el reconocimiento de realidad se efectúa desde un imaginario como experiencia acumulada, la pregunta sobre este acopio de mundo se nos impone como algo que sólo de manera insuficiente podremos intentar resolver", explica.
Claudio Bertoni (1946) y sus diapositivas de desnudos femeninos nos invitan, en un acto voyeur, a compartir la intimidad de su mirada; Jorge Brantmayer (1954) en Cobquecura, Océano Pacífico, exhibe sugerentes paisajes de nuestro país; El caminante de Paz Errázuriz (1944) es una secuencia que expone sensiblemente la fragilidad de la condición del ser. Álvaro Hoppe (1956) desde una mirada de autor registra los pormenores de la "Revolución de los pingüinos" del 2006; mientras Andrea Jösch (1973) nos presenta un contrapunto entre dos historias paralelas que busca cerrar simbólicamente un ciclo: el inicio de su vida y la muerte de Pinochet: 1973-2007. Mariana Matthews (1946) aborda en su video Sho'on la fragilidad de la memoria y la pregunta por la veracidad de la fotografía entendida como documento. Por último, Sachiyo Nishimura (1978) nos ofrece la seducción de la infinitud espacial en sus imágenes fragmentadas; Luis Poirot (1940) pone en escena la pérdida absoluta de seducción de un emblema y Guy Wenborne (1966) exhibe fotografías aéreas de un paisaje no domesticado que parece irreal.
Reseña de artistas
Actividades en torno a la muestra Conversaciones MAC Parque Forestal / viernes 29 junio / 18:30 hrs. / Adhesión: General: $600, 3ª edad y estudiantes $400. Estudiantes U. de Chile: gratis. Horarios: martes a sábado de 11:00 a 19:00 hrs. Domingos de 11:00 a 18:00 hrs. Parque Forestal s/n, Metro Bellas Artes. www.mac.uchile.cl |