Rector Rodrigo Arocena: "Tener una formación universitaria no es solo un beneficio individual"

Rector R. Arocena: Formación universitaria, un beneficio social
El Rector Arocena visitó "la Radio que Piensa" para conversar con los periodistas Patricio López y Antonella Estévez.
El Rector Arocena visitó "la Radio que Piensa" para conversar con los periodistas Patricio López y Antonella Estévez.
"La Educación es un derecho de la gente y a la vez una de las principales palancas del desarrollo", afirmó el Dr. Arocena.
"La Educación es un derecho de la gente y a la vez una de las principales palancas del desarrollo", afirmó el Dr. Arocena.
El Rector Arocena estuvo en Chile para inaugurar el Seminario Permanente de Educación de la U. de Chile.
El Rector Arocena estuvo en Chile para inaugurar el Seminario Permanente de Educación de la U. de Chile.

Conferencias, conversatorios con alumnos y reuniones con distintos actores de la comunidad universitaria conformaron la nutrida agenda del Dr. Rodrigo Arocena, Rector de la Universidad de la República de Uruguay, en su paso por Chile. El pasado viernes 22 de julio participó del Semáforo de la Radio Universidad de Chile, entrevista en la que el académico planteó entre otros temas, sus reflexiones sobre las Universidades Públicas Latinoamericanas y también sus desafíos.

La conversación completa, a continuación.

La Educación Superior, condición imprescindible de desarrollo

Patricio López: Estamos con el Doctor Rodrigo Arocena, destacado matemático, y al mismo tiempo Rector de la Universidad de la República, la Universidad más importante de Uruguay. Un país donde lo público es muy significativo para la vida de ese país y en ese sentido constituye un referente para el resto del continente. Nos parece que en estos tiempos de debate intenso sobre Educación Superior es necesario contrastar y escuchar otras experiencias, y además experiencias de países cercanos y queridos. Rector, muy buenos días, gracias por estar acá con nosotros.

Rector Arocena: Muchas gracias

Antonella Estévez: Ayer a las cinco y media de la tarde hubo una Conferencia Magistral del Rector Rodrigo Arocena en la Facultad de Economía y Negocios titulada "Desafíos de las Universidades Públicas en América Latina". Podría compartir con nosotros la idea fuerza, la reflexión profunda que está detrás de esa conferencia.

Rector Arocena: En el mundo entero están pasando algunas cosas que son conocidas, pero que no está demás subrayarlas. Los países donde la calidad de vida ha mejorado sustantivamente, no donde hay la perfección y la estabilidad, regiones muy diferentes que tienen culturas distintas, trayectorias políticas disimiles y otras variantes, tienen en común el incremento sustancial del acceso a la formación terciaria y universitaria de los jóvenes de la mayoría de la población.

Yo me permito hacer una suerte de experimento imaginativo: si en cualquiera de esos países, llámele Finlandia o Corea, para hablar de dos países bien distantes de nosotros y entre sí, cultural y políticamente, usted para por la calle a una muchacha o a un muchacho de 25 o 28 años y le pregunta si tiene formación terciaria, la probabilidad de que le conteste que sí es de un 60, 70 o 80%. Haga el mismo experimento en buena parte de América Latina, hágalo en Montevideo en los barrios postergados de la ciudad y tendrá una respuesta del 3, 4 o 5% .Entonces las Universidades Públicas Latinoamericanas tenemos que ser uno de los actores fundamentales, no el único, no tenemos que pensar que somos el muchachito de la película, en la tarea de generalizar el acceso a la enseñanza terciaria y universitaria. Apostar a que en relativamente pocos años, no meses pero sí años, la mayoría de nuestra gente pueda acceder a la enseñanza terciaria y universitaria. Eso no es garantía segura de desarrollo, es condición imprescindible.

Patricio López: Para la relación Universidad y sociedad es muy importante la pregunta sobre quiénes construyen proyecto universitario. Esta es una pregunta pertinente porque la Universidad de Chile es la única Universidad chilena donde hay una participación triestamental, donde participan los funcionarios, los estudiantes y los académicos. ¿Cuál es la relación que usted hace entre esa participación, cuál es la experiencia en el caso uruguayo y el modo en que eso permite establecer canales de comunicación virtuosos entre la evolución de la sociedad y la evolución de los proyectos universitarios?

Rector Arocena: En la Universidad de la República usamos dos palabras: por un lado cogobierno democrático y por otro autonomía conectada. Cogobierno democrático es la participación de los órdenes universitarios en la conducción de la Institución. Cada uno aportando su experiencia, su punto de vista, su situación. La Constitución de la República establece que nuestra Universidad debe ser cogobernada por los representantes de sus estudiantes, de sus docentes y sus egresados. La democracia universitaria, como todas las democracias, no es un lecho de rosas, no es la perfección. Pero sí es el lugar de diálogo, de debate, de resoluciones mayoritarias, de compromisos que una vez adoptados por mayorías claras establecen programas de largo plazo. Además, una cosa no menos importante, es uno de los ámbitos de mayor discusión ciudadana y donde más jóvenes tienen ocasión de aprender a gobernar por la única manera que se aprende a gobernar, que es ejerciendo la democracia. Escuchando a quienes piensan diferente, tomando en cuenta sus argumentos, intentando exponer los propios, llegando a resoluciones mayoritarias y respetándolas. Cogobierno democrático para nosotros es una fuente de legitimidad, una fuente de solidez, no depende de un Rector iluminado o maldito que lleva al bien o al mal a la Institución, sino de la fuerza de las mayorías y además es una escuela de ciudadanía.

Autonomía conectada es la idea de que la Institución tiene un margen muy grande de autonomía para decidir sus propios procesos. Pero lo hace no en el aislamiento. Nosotros hablamos de autonomía conectada como lo opuesto de la Torre de Marfil, como lo opuesto de la autarquía. Nosotros buscamos tener diálogo con los sectores representativos de la vida política del país, con los sectores productores, con los  gremios, con las ONGs. Autonomía conectada para hacer un proyecto de desarrollo solidario.

"La Educación es un derecho de la gente y a la vez una de las principales palancas del desarrollo"

Antonella Estévez: Estamos conversando con el Rector Rodrigo Arocena, Dr. en Matemáticas. Teniendo en cuenta los libros que usted ha publicado, "La cuestión del desarrollo mirada desde América Latina. Una introducción", "Reforma Universitaria y Desarrollo, La Universidad Latinoamericana del futuro. Tendencias - Escenarios - Alternativas" y "La Innovación y las Políticas en Ciencia y Tecnología para el Uruguay", cuando desde el gobierno se declara, a propósito o sin querer, que la Educación es un bien de consumo, ¿cuál es el peligro que desde su mirada este acercamiento, esta definición, podría sumir a la sociedad?

Rector Arocena: Yo por supuesto, como no puede ser de otra manera, tengo el mayor respeto por todo lo que es el proceso político y democrático de cada uno de los países hermanos del Uruguay. Para nosotros todos los pueblos Latinoamericanos son hermanos en la medida en que su proceso político es democrático y las resoluciones y las maneras de proceder que adoptan merecen nuestro absoluto respeto. Al mismo tiempo reivindicamos ciertos valores que nos parece que están por encima de fronteras como entender a la Educación como un bien público y social. Así lo establece la ley de Educación de Uruguay y nos parece fundamental.

Estábamos hablando sobre el papel de las Universidades Públicas. Bien, creo que tiene sentido que haya Universidades Públicas, que tiene sentido que las sociedades hagan un esfuerzo por financiarlas y sostenerlas, justamente porque la Educación además de darnos algo a usted, a usted y a mí, le da algo a los países en su conjunto. Cuando yo he tenido el privilegio de que Universidades Públicas Latinoamericanas me permitan formarme, por un lado eso implica deberes de mi parte, y por otro es una pequeña colaboración a un potencial de desarrollo más grande de un país. Creo que no sería adecuado pensar que tener una formación universitaria solo es un beneficio individual. Sin duda mientras no accedamos todos a la Educación Universitaria, quienes la tengamos tenemos una situación privilegiada y eso nos genera deberes.

Imagínense la diferencia entre un país donde la mayoría de la gente tiene Educación avanzada y otro donde la pequeñísima mayoría tiene eso. Eso es algo diferencial para toda la población. Que haya más personal de salud, más personal capacitado para atender la vivienda y otros problemas sociales, ¿no es un beneficio para el conjunto del país? Por consiguiente nuestra impresión es que la Educación es a la vez un derecho de la gente y una de las principales palancas del desarrollo. Entendido no solo como desarrollo económico, sino también como desarrollo humano y desarrollo sustentable. Mejora de la calidad de vida individual y colectiva.

Patricio López: A quienes nos ha tocado ser académicos, por tener esta condición en la cual nos tenemos que pronunciar respecto al aprendizaje de los alumnos, muchas veces tendemos a tener una mirada de ver cuál es rol que deben tener los estudiantes dentro del proyecto universitario. Pero también nos encontramos con la otra cara de la medalla. Por lo menos en Chile en los últimos años han sido los estudiantes secundarios, los universitarios, los que han dinamizado los procesos sociales. En ese sentido ¿cuál es a su juicio el rol que le cabe a los estudiantes en la construcción de los proyectos de Universidad y también como vincular eso con los proyectos país?

Rector Arocena: En otros rincones del mundo la respuesta podría ser teórica. En América Latina basta mirar la realidad, la transformación histórica de las Universidades Latinoamericanas ha tenido avances y retrocesos pero protagonistas variados. Pero el protagonista colectivo fundamental ha sido el movimiento estudiantil.

Acciones estudiantiles hay en todas partes del mundo, las hay desde el Renacimiento, o desde antes, y las seguirá habiendo. Movimiento estudiantil organizado con continuidad y cierta plataforma sostenida eso es un fenómeno latinoamericano. Por ejemplo en agosto se va a realizar en Uruguay el XVI Congreso Latinoamericano de Estudiantes, con sus luces y con sus sombras, tendrán cosas en las que estarán de acuerdo, y otras en las que no. Pero la idea de continuidad de un movimiento estudiantil de largo plazo que defiende la Educación Pública, que defiende la participación de los jóvenes, apuesta a vincular la investigación con la problemática social. Todo eso nos hace pensar que los jóvenes son la garantía del futuro. Por consiguiente, y sin ninguna vocación de adularlos, creo que nuestras instituciones tienen que decir claramente 'nosotros avanzamos en la medida en que logramos una sintonía con el estudiantado para transformarnos'. Porque cuidado con dormirnos en nuestros laureles. Nuestras instituciones tienen no pocas virtudes y no pocas carencias para estarle reclamando, como lo hacemos desde nuestra Universidad a la  sociedad que invierta más en la Educación Superior, tenemos que mostrarle que nos esforzamos más, que usamos muy bien nuestros recursos y que estamos permanentemente impulsando cambios. Porque el desarrollo es una carrera que hay que correr cada vez más rápido para no perder pie.

"Los jóvenes que queden al margen de la enseñanza van a tener una situación difícil"

Antonella Estévez: Cuando Patricio hizo la introducción hablaba del sentido de lo público y a la relevancia que tiene en una nación como Uruguay. Esas son las razones por las que uno ama esa nación: el sentido de lo público en cada área, el sentido de la colectividad también que está muy presente en el ADN de vuestra nación. ¿Cuál cree que son las fortalezas de tener una sociedad construida desde esa lógica?

Rector Arocena: Nosotros no sabemos si tenemos algo para enseñar, pero estamos seguros de que tenemos muchas cosas para corregir. No tenemos duda de que el país tiene ciertas virtudes. La virtud más grande es la vocación igualitaria que está muy enraizada en nuestra historia y que apunta a 'tratar de que nadie sea más que nadie', como dice el viejo dicho que es casi un emblema en el país. Eso se ha traducido en un Estado que en muchas circunstancias de nuestra historia ha sido un escudo de los débiles y eso nos parece una cosa sumamente importante. Pero al mismo tiempo debemos reconocer que no se puede esperar mejorar sistemáticamente la calidad de vida de la gente si todo se hace depender del Estado.

En estos tiempos de futbol realizo una metáfora. El Estado tiene que ser algo así como el volante de creación en el cuadro. El cuadro necesita once jugadores. La sociedad civil en su conjunto: productores, sindicatos, partidos políticos y organizaciones de vecinos... la dinámica social es una dinámica de actores múltiples. El Estado tiene que cubrir aquellas zonas que quedan descubiertas. Por ejemplo la atención a los sectores más postergados. Tiene que jugar un papel articulador del desarrollo juntando a los investigadores con los productores. Tiene que hacer muchas cosas pero por sobre todo no tiene que creer que es el único actor del cuadro. Porque cuando cree eso generamos conservatismo y rutina. Vocación igualitaria, muy importante; importancia de lo público, relevante... pero nada de estatismo omnicomprensivo  y sobre todo permanente autocrítica. La vida social cuando queda estabilizada, retrocede.

Patricio López: Usted hablaba de que nadie sea más que nadie. Acá en Chile dicen 'hay que ir a la Universidad para ser alguien en la vida' y eso a uno le permite pensar entonces sobre quiénes son los que no van a la Universidad. ¿Qué reflexión le merece ese contraste entre una afirmación y la otra?

Rector Arocena: Me parece un desafío para lo que tenemos que hacer las Universidades Públicas y toda la enseñanza. Es muy claro que en el siglo XXI los jóvenes que queden al margen de la enseñanza van a tener una situación difícil. Les  va a ser complicado ser ciudadanos en el sentido de entender lo que pasa y participar en las decisiones. Le va a ser difícil acceder a trabajos de calidad donde haya una faceta de realización personal. Le va a ser difícil acceder a las distintas manifestaciones de la cultura, les va a ser difícil colaborar la mejora de la calidad de vida individual y colectiva. El riesgo de marginación de quienes no puedan acceder a la Educación a lo largo de toda la vida va a ser muy grande. Tenemos una divisoria social que tiende a ampliarse entre quienes tenemos el enorme privilegio de acceder a una enseñanza avanzada y quienes no lo tienen. Hay que pelear contra eso. Pelear por la igualdad, viejo sueño democrático y republicano en torno al cual surgieron hace 200 años nuestras naciones hermanas, hoy se traduce entre otras cosas por pelear porque todo el mundo tenga acceso a una Educación de calidad que se pueda conectar con el trabajo a lo largo de la vida entera. Esa es una de las grandes metas latinoamericanas. América Latina fue el continente del futuro en una época, tiene que volver a serlo.

Antonella Estévez: Sigue siéndolo. De qué futuro, esa es la pregunta.

Rector Arocena: De un futuro que valga la pena vivir, y que valga la pena decirle a nuestros hijos y a nuestros nietos 'hemos trabajado por llegar hasta acá, sabemos que ustedes lo van a hacer mejor apoyándose en lo logrado'.

Antonella Estévez: Rector muchas gracias por acompañarnos