El Dr. Fernando Mönckeberg se graduó de la Escuela de Medicina de la U. de Chile el año 1952 y desde entonces ha desarrollado una trascendente labor en el ámbito pediátrico y nutricional. Quien fuera recientemente reconocido con el Premio Nacional de Medicina, impulsó la investigación de la desnutrición infantil, uno de los problemas más graves de la salud pública nacional a mediados del siglo XX. Más adelante lideró la fundación del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA) de esta Casa de Estudios, el cual se convertiría luego en el primer Instituto interdisciplinario de la Universidad de Chile. A través de la Corporación para la Nutrición Infantil (CONIN), organismo del que actualmente es Director, logró la articulación de un sistema de atención primaria en consultorios y la alimentación para los escolares, entre otros méritos.
El Rector Víctor Pérez Vera comentó que los aportes del Dr. Mönckeberg tienen una "trascendencia invaluable en la historia de la salud chilena, permitiendo mejorar sustancialmente la calidad y esperanza de vida de nuestra población". Por estos méritos el Rector subrayó que la comunidad de la U. de Chile "en su conjunto celebra este reconocimiento que distingue a un egresado, cuya labor cobró relevancia nacional e internacional al impulsar importantes investigaciones y políticas sociales en el ámbito de salud pública", expresó.
La Decana de la Facultad de Medicina, Cecilia Sepúlveda manifestó que esta distinción recayó "en un médico realmente extraordinario que ha sabido imprimir su huella en la medicina chilena con sus aportes en el campo de la pediatría y el control y erradicación de la desnutrición infantil". Asimismo la Dra. Sepúlveda destacó la faceta de académico del Dr. Mönckeberg, "un médico que se formó en la Universidad de Chile, Profesor Titular nuestra Facultad de Medicina, así como también de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas, ha sido un maestro y formador de generaciones".
Los académicos del INTA se manifestaron orgullosos del reconocimiento a quien fuera su primer director y por el extraordinario avance logrado en un periodo corto de tiempo en las condiciones de nutrición y salud de la población. La Dra. Magdalena Araya, Directora del INTA, subrayó el aporte del nuevo Premio Nacional de Medicina en la historia de la salud de Chile: "Es indudable que el Dr. Mönckeberg tuvo un papel crucial en los años en que el desnutrición era un problema de salud pública mayor en Chile. Para la comunidad del INTA es un orgullo esta distinción, porque fue el primer Director, pero además por su calidad humana y profesional". Mientras el Dr. Fernando Vio, Profesor Titular del INTA recalcó que "dejó el sello de una investigación del más alto nivel científico", asegurando que hoy en día uno de los desafíos es replicar lo que él realizo en el ámbito de la obesidad. "Si nos preguntamos quién fue el chileno que tuvo una mayor influencia en cambiar el país desde una situación de subdesarrollo, como la que teníamos en la década del 60, a ser un país que avanza hacia el desarrollo, a pesar de sus desigualdades, tendríamos que pensar obligadamente en Fernando Monckeberg", concluyó.
Generosidad, conocimiento, liderazgo y espíritu, tres características que el Prof. Titular del INTA Ricardo Uauy destacó de Fernando Mönckeberg a quién definió como una "figura señera en el ámbito de la salud de Chile y en América Latina. Disminuir la mortalidad a través del control de la desnutrición fue una tarea mayor, que requirió movilizar diferentes actores de la sociedad. Por ejemplo en el año 1970 en Chile los tres candidatos presidenciales tenían dentro de sus metas eliminar la desnutrición, eso nos habla de que se había logrado convertir este problema en un objetivo nacional".
"De la U. de Chile salieron todos los trabajos e investigaciones que hicieron posible empujar distintas iniciativas respecto a la nutrición infantil"
"Valoro esta distinción, porque es otorgado por la totalidad de los profesionales médicos del país, representado a través de sus instituciones. Me siento profundamente orgulloso de recibir este reconocimiento", manifestó el Dr. Fernando Mönckeberg.
En conversación con Uchile.online el Premio Nacional de Medicina recordó su paso por esta Casa de Estudios como estudiante y luego como investigador y académico. "La Universidad de Chile es mi lugar de formación, ahí adquirí un sentido de servicio social que imprimí para siempre en mi labor profesional. Estuve muchos años trabajando en la Universidad, tanto en el Hospital Clínico San Borja Arriarán, como más adelante en el INTA. De ahí salieron todos los trabajos e investigaciones que hicieron posible empujar distintas iniciativas respecto a la nutrición infantil", comentó.
Según el Dr. Mönckeberg el tema de la desnutrición en la población infantil es el avance más trascendente que ha existido en la historia de este país: "cuando comenzamos a evaluar los problemas que afectaban a un número alto de niños en sus primeros años de vida, nos dimos cuenta que este grave problema de desigualdad era el obstáculo más serio para lograr el desarrollo de Chile".
"Con la fundación del INTA conseguimos credibilidad y logramos que los diferentes Gobiernos implementaran lo que nuestras investigaciones estaban recomendando"
Luego de dos años de residencia en Estados Unidos, donde estudió becado por la Fundación Guggenheim, el Dr. Fernando Mönckeberg junto a otros investigadores funda el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos de la U. de Chile (INTA). Gracias a este esfuerzo, afirmó el pediatra, se consiguió mayor credibilidad y conciencia sobre la gravedad del problema "Juntamos a un equipo multidsciplinario de médicos, bioquímicos, químicos, sociólogos, antropólogos y economistas que estudiaron desde distintas perspectivas el problema de la desnutrición", añadió
"Persistimos contra viento y marea", comentó el Dr. agregando que "de esta forma logramos que los diferentes Gobiernos fueran implementaran lo que nuestras investigaciones estaban recomendando. Fue un esfuerzo que claramente valió la pena. Hoy podemos ver con orgullo que el INTA pasó a ser una de las Instituciones más grandes en América Latina en su tipo".
Con satisfacción Fernando Mönckeberg afirmó que en más o menos medio siglo Chile vivió un cambio fundamental. Superado el mal de la desnutrición datos objetivos hablan que la mortalidad infantil disminuyó a un porcentaje menor al 1%, un aumento en las expectativas de vida de la población, el crecimiento de 11 centímetros en promedio de los chilenos y que en materia de educación escolar el 100% de los niños termina la enseñanza básica.
"El año 1950 de cada 100 niños que cursaban la educación básica, solo 25 la terminaban. La gran causa era la incapacidad de aprender. Hoy en día la mayoría termina la media y ahora muchos de esos están postulando a la Universidad. Hoy observamos que gracias a una política pública sostenida cada vez más chilenos están expresando todo su potencial genético. A mi modo de ver eso es lo que ha cambiado el país", finalizó.