La infraestructura, ofertas de postgrado, sistemas de información, planes y perfiles de pregrado, productividad en investigación, creación e innovación y los procesos de autoevaluación son los seis temas que concentran la atención de toda la Universidad. Así lo identificó el trabajo de la Comisión Superior de Autoevaluación Institucional (CSAI), tras analizar los informes anuales de 14 unidades académicas y las respuestas obtenidas en talleres integrados por representantes de las distintas facultades e institutos.
Los resultados de este proceso fueron presentados este jueves 23 de enero en la Casa Central de la Universidad de Chile, instancia en la que participaron todos los vicerrectores y vicerrectoras de nuestro plantel, Rosa Devés, Daniel Hojman, Juan Cortés, Flavio Salazar y Faride Zerán.
La jornada fue inaugurada por el Rector Ennio Vivaldi, quien destacó el esfuerzo sistemático de este trabajo y el ejercicio de autocrítica a través del cual se plantean metas a futuro para la institución. “Dentro de un ambiente de competencia normalmente prima la autoalabanza, pero el deber ético que tenemos como Universidad de Chile es examinar objetivamente nuestros avances y desafíos. Este proceso nos ha permitido evaluar y entender lo que hemos venido haciendo, las nuevas ideas que se han ido incorporando y analizar el impacto que han tenido. Aquí hay una cantidad riquísima de información. Ahora debemos generar la sinergia para construir con más ganas la Universidad que deseamos y seguir contribuyendo a la sociedad, en un momento crucial para el país”, comentó.
El prorrector Rafael Epstein valoró el espíritu colaborativo que impregnó esta labor y la multiplicidad de visiones aportadas por cada una de las unidades académicas. “Partimos recorriendo todos los campus y motivando a las comisiones locales para construir sus respectivos planes y visión estratégica. Fue una experiencia muy enriquecedora. Aprendimos de cada facultad e instituto, y logramos conocer y transmitir distintas ideas”, señaló el presidente del CSAI sobre este período de trabajo.
Dimensiones de análisis
Autoridades de cada vicerrectoría de la Universidad expusieron las conclusiones del proceso en los temas relacionados con las dimensiones de sus respectivas áreas. Esta síntesis estuvo enfocada en los principales desafíos y proyecciones.
El vicerrector de Asuntos Económicos, Daniel Hojman, estuvo a cargo de los contenidos relativos a la dimensión “gestión y personal de colaboración”, donde los temas centrales fueron infraestructura y los sistemas de información para el apoyo en la toma de decisiones. El profesor Hojman destacó los múltiples avances logrados por la Universidad en infraestructura durante los últimos años, materia en la que persisten importantes desbalances entre las unidades académicas.
Los planes y perfiles de los programas y carreras de pregrado, así como la oferta de postgrado, fueron otros temas prioritarios en las áreas vinculadas a la Vicerrectoría de Asuntos Académicos. La directora de Pregrado, Leonor Armanet, indicó que temas como planes y perfiles o el diseño curricular de carreras y programas ya son parte de los desafíos planteados en la última acreditación institucional. La directora de Postgrado, Alicia Salomone, presentó las inquietudes asociadas a la oferta, calidad y acreditación de los programas y sus modalidades.
En la instancia también expuso el vicerrector de Asuntos Estudiantiles y Comunitarios, Juan Cortés, quien abordó temas del ámbito estudiantil como salud y calidad de vida y becas y beneficios. El vicerrector de Investigación, Innovación y Creación, Flavio Salazar, compartió por su parte los principales desafíos y proyecciones asociados a productividad científica y artística. Para tratar los asuntos académicos también intervino el profesor Claudio Olea, director de Desarrollo Académico.
Este bloque concluyó con la presentación de la vicerrectora de Extensión y Comunicaciones, Faride Zeran, quien junto a la directora de Comunicaciones, Mariela Ravanal, relevó la importancia que tendrá para la Universidad la futura implementación de una política de extensión y vinculación con el medio, “que responderá a gran parte de los desafíos que están en este informe. Porque las debilidades apuntan a eso, a la ausencia de una política que permita contextualizar el intenso trabajo que desde las distintas unidades, facultades e institutos, se realiza en en este ámbito. El desafío de una universidad compleja, más sintonizada y de excelencia, más vinculada con el país real, pasa a ser algo central”, reflexionó la vicerrectora.
Taller final
Este análisis global concluyó con la presentación de la propuesta de instructivo, con 19 recomendaciones específicas o buenas prácticas, para guiar el Proceso de Autoevaluación Institucional 2020. Estos puntos, expuestos por Jesús Redondo, profesor de la Facultad de Ciencias Sociales e integrante de la CSAI, luego fueron discutidos en un taller final para dar los últimos ajustes al instrumento autoevaluación que servirá de referencia para todo el plantel, orientaciones que serán dadas a conocer el próximo mes de marzo.
Este análisis global concluyó con la presentación, por parte del integrante de la CSAI, Prof. Jesús Redondo, de la propuesta de instructivo
En este espacio, los representantes de las distintas unidades del plantel revisaron los detalles finales de los puntos propuestos que darán forma al instrumento de autoevaluación. Uno de los más relevados nuevamente fue la necesidad de mantener procesos de autoevaluación permanente, particularmente en facultades e institutos, con unidades, instancias y mecanismos para su implementación, así como la necesidad de alinear esta labor con el Plan de Desarrollo Institucional.
Marcela Munizaga, profesora de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas e integrante de la Comisión, enfatizó la necesidad de que todas las unidades se integren a este proceso, “siempre es interesante tener la mirada más global de la Universidad, más allá de los límites de cada unidad. Este es un proceso nuevo, en el que estamos aprendiendo. Requiere dedicación y esfuerzo, pero es muy valioso para seguir mejorando. Necesitamos que las unidades académicas sigan participando y que se sumen las que faltan. Es necesario que estemos todos en este espacio de reflexión interna, para mirarnos colectivamente como institución”.
Al final de la jornada, Juan Somavía, ex director de la Organización Internacional del Trabajo, director de la Academia Diplomática "Andrés Bello" e integrante externo de la Comisión, destacó la calidad del trabajo realizado, su creatividad, conducción y rigurosidad. Por esta razón, convocó a la Universidad a seguir avanzando en esta línea. “La sociedad lo está pidiendo, no solo en Chile”. Respecto a la relación entre esta labor y la acreditación institucional que viene el 2026, indicó que “lo que estamos haciendo va mucho más allá de la acreditación. Estamos construyendo un sistema que va a ser útil para la acreditación, pero que no es para la acreditación”. Finalmente, señaló que “este proceso de análisis metodológico también nos plantea un desafío que es la reflexión sobre dónde, cómo y cuándo se analiza la pertinencia de lo que estamos haciendo. Estamos insistiendo en la calidad. Pero, ¿será posible que estemos enseñando con gran calidad, conocimientos que se están haciendo obsolescentes?”.