Discurso del Prof. Luis A. Riveros, Rector de la Universidad de Chile, en Concierto de Gala, en el marco del 160º Aniversario de la Universidad de Chile.
(Transcripción)
Estamos celebrando 160 años. Pero no son sólo 160 años de una historia que ha transcurrido mecánicamente, ni siquiera fácilmente. Son 160 años en que esta Institución ha colaborado en forma profunda, en forma efectiva, a la construcción de una República y al mantenimiento de los valores más básicos, que han permitido que Chile se mantenga como un país en progreso. Ésta es una Universidad que está fuera de los patrones de generar ganancias. Una Universidad que está dispuesta, siempre, a tener a Chile como su norte en todas las tareas. Y estamos celebrando, entonces, que después de 160 años, en esta Universidad, en sus académicos, en sus funcionarios, en sus autoridades, en sus estudiantes, predomina ese mismo espíritu, el espíritu fundacional.
No nos olvidamos, de aquello que don Andrés Bello pronunciara en el discurso inaugural de la Universidad de Chile: ésta es una Universidad que tiene como norte los problemas de Chile y de su gente. Eso lo tenemos todo el día, todo el tiempo, desde los tiempos inmemoriales de nuestro trabajo universitario sembrado en nuestro corazón.
Por eso estamos celebrando. No es el cumpleaños de un año más. Es el cumpleaños que nos permite mirarnos, efectivamente, si estamos siendo consecuentes con la tarea que nos ha dado nuestro fundador. Y lo queremos celebrar, como corresponde hoy día, con nuestro arte, con nuestra Orquesta Sinfónica, con nuestro Coro Sinfónico, en la entrega que ellos hacen permanentemente, y que lo hacemos con tanto sacrificio, con tanto empeño, pero también con tanto convencimiento de que es la forma en que tenemos que cumplir integralmente con la tarea universitaria.
De manera que muchas gracias por acompañarnos, aquí está nuestro arte para ustedes y para la Universidad.
Muchas gracias.