Discurso del Rector de la Universidad de Chile en Ceremonia de Graduación del "Diplomado en Economía y Calidad para Trabajadores Líderes".
"Diplomado en Economía y Calidad para Trabajadores Líderes" del Departamento de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas.
(Transcripción)
Primer motivo de satisfacción es que esto tenga lugar aquí, en la Universidad de Chile y es por variadas razones. La primera es que ciertamente esta es una dimensión muy importante del trabajo universitario. A veces hoy día se cree que las universidades son solamente agencias donde se forman profesionales y no ha faltado quien las defina como lugares donde se hacen clases, pero una universidad es más que eso, una Universidad como ésta es un centro de creación y de investigación, que además disemina conocimiento que considero que es justamente lo que ha tenido lugar en este Diploma. Los profesores de ustedes luego de haber pensado los temas, de haber escrito sobre muchos de ellos, de estar preocupados de sus propias carreras académicas, han tenido también la dedicación y el tiempo para poder entregar el conocimiento a ustedes y al mismo tiempo, recibir vuestras preguntas, recibir los cuestionamientos a sus puntos de vista, que es lo que permite que estos señores académicos posteriormente en sus oficinas reelaboren y creen nuevas ideas para otras generaciones.
Una universidad es eso, es construcción de conocimiento para poder ayudar a que las cosas caminen mejor. Ésta es una Universidad nacional y pública, porque sus objetivos primeros desde su creación están en el país y en los problemas que deben atacarse como país, aquello que llamamos en la Institución prioridades nacionales, y sostengo que una de las grandes prioridades nacionales es la promoción de la productividad y de la calidad. Hoy día vivimos en un mundo que representa para Chile muchas oportunidades, pero también muchas amenazas, y la manera de enfrentar esas amenazas proactivamente, es haciendo mucho más de esto que ustedes acaban de hacer, porque tenemos que desarrollar más liderazgo y más capacidad productiva para poder enfrentar con éxito ese mundo que allá afuera nos espera para que le ganemos o para ser vencidos… el país tiene una apuesta. Se lo hemos escuchado tantas veces al Presidente, el país tiene una apuesta que ganar, y esa apuesta es convertir a este país en un país desarrollado, que tenga un estándar de vida distinto, posiblemente no para nosotros, pero sí para nuestros hijos y quizás también para nuestros nietos. Pero no importa, es una perspectiva de futuro para no perder lo que perdimos hace un siglo atrás que fue la oportunidad de desarrollarnos. Por eso la oportunidad de haber tenido esta discusión, este Diploma con ustedes es importante, porque permite ratificar el sentido de la misión de esta Universidad y además comprometer al trabajo de la Universidad con los temas reales, los temas que tienen que ver con las cosas que ustedes tanto han discutido seguramente en los distintos cursos del Diploma.
Pero un segundo motivo de satisfacción para mí, es el hecho de que este Diploma se haya realizado por el Departamento de Economía, al cual yo pertenezco y del cual yo sigo siendo profesor. Es muy importante, porque la economía se puede mantener en una esfera absolutamente imaginativa, de una creación intelectual que es muy rayana a lo inútil y otras veces para ponerlo en positivo es muy rayana también a la ciencia pura; pero creo que nosotros hemos efectuado un trabajo para orientar a la economía a resolver cosas de importancia para el país como son los temas sociales, los de la distribución del ingreso, los de la educación. Temas de trabajo que se enfrentan en el Departamento con su investigación y su extensión son evidentemente temas prioritarios para el país. Nosotros tenemos la obligación de mirarlos de un punto de vista independiente, de un punto de vista académico, no tenemos ni debemos tener compromisos con grupos de interés, con grupos políticos, con grupos religiosos. Por eso es bueno que esto ocurra en la Universidad de Chile, porque esto no pertenece a un consorcio de inversionistas, ni a ciertas maneras de ver el mundo, ni de pensar políticamente. Es la Universidad de Chile y este Departamento de Economía piensa en los temas que son de su ámbito para Chile, porque ese es el rol que corresponde a todos nosotros como académicos de esta Universidad.
Es tremendamente desafiante el tema en los cual ustedes han estado y lamento que no haya tenido el tiempo para enseñar en un Diploma como éste. Todos los días observando en los debates políticos, en la prensa internacional y en lo que se está discutiendo en el mundo respecto a la integración comercial, a los temas de inversión en la productividad laboral y en cómo hacer que la tecnología y la investigación permitan elevarla y en cómo hacer que sea la calificación la que aumente la calidad y la productividad. Aquí hay un reto importantísimo para Chile y quiero decirlo, porque también un estudio del Departamento de Economía puso ante el país una evidencia que es esencial que nosotros tengamos absolutamente claro. Nuestro país que ha hecho tanto en educación en el pasado y que durante tanto tiempo se distinguió en Latinoamérica como un faro luminoso de pensamiento en su educación y en sus universidades, sin embargo, es hoy día un país que tiene más del 50% de analfabetos funcionales en su fuerza de trabajo. Eso significa que sabiendo saber leer y escribir más de un 50% de todos nosotros no entendemos realmente lo que estamos leyendo y eso para el mundo de hoy, que es el mundo de los manuales, que es el mundo de la computación, el mundo de la Internet: es una desventaja monumental. Claro, no es una desventaja si uno quiere seguir en producción básica, si uno quiere cosechar manzanas y ponerlas en cajones, si uno quiere picar piedras y exportar piedras semielaboradas o si uno quiere talar pedazos de árboles y ponerlos molidos o enteros arriba de un barco. Pero el país no quiere eso, lo hemos dicho, el país necesita poner mayor valor a agregado en su producción y eso se hace fundamentalmente superando esta tremenda desventaja que nos han creado años importantes de abandono efectivo de nuestro sistema escolar.
Por lo tanto, creo que esta actividad en la cual ustedes se han comprometido, tiene mucho que ver con el ánimo del Gobierno, y que debe ser el ánimo de la sociedad chilena, que es superar esta barrera inmensa que nos está separado de aquellos resultados distributivos que tanto nos avergüenzan a nivel del mundo y que constituyen también un obstáculo para el crecimiento económico que queremos tener para poder conseguir el desarrollo. De manera que mí Departamento y sus profesores, están comprometidos también en su trabajo académico en una tarea que considero de fundamental importancia en su ámbito y para el país.
Y finalmente una tercera razón de mucha satisfacción para estar aquí como Rector de la Universidad, es que en la Universidad se crea conocimiento y se transmite, y nosotros aseguramos que esto es para hacer mejores seres humanos. Creemos que la esencia de la Universidad es el humanismo, a veces perdido, a veces también perdido cuando esta Universidad fue intervenida, pero la esencia de la Universidad es crear mejores personas, eso es lo que tratamos de hacer permanentemente con nuestros 22 mil estudiantes de pregrado y nuestros casi 4 mil estudiantes de postgrado: crear mejores personas. Nuestra investigación está destinada también a crear mejores personas, porque esa es la contribución fundamental de la Universidad para crear un mejor mundo.
Por eso es tan importante que esto haya ocurrido hoy, ha pocos días de un tremendo horror para toda la humanidad en lo que se destruye lo más fundamental de lo que es la raza humana, que es el instinto de supervivencia y del respeto mutuo. Pero creo que no es tan importante lamentarse como el tener esta actitud proactiva de decir, aquí hoy día estamos todos nosotros en este viejo Salón con más de 130 años de historia, nos hemos convertido en mejores seres humanos y que, por lo tanto, entendemos todavía con mayor dolor la tragedia de la destrucción de la vida humana y podemos también comprometernos con mayor pasión en la defensa de la vida humana, de los derechos humanos, de la democracia y de la libertad.
Mucho éxito a todos ustedes, espero que pronto estén de vuelta en la Universidad, muchas gracias.