Iniciativa se basa en efecto multiplicador

Postas rurales de Castro, en el foco de la prevención en salud

Postas rurales de Castro, en el foco de la prevención en salud
El equipo docente junto a los técnicos paramédicos participantes en la actividad.
El equipo docente junto a los técnicos paramédicos participantes en la actividad.
La iniciativa capacitó a los técnicos paramédicos en temas como alimentación saludable y prevención del sedentarismo, de especial relevancia durante la tercera edad.
La iniciativa capacitó a los técnicos paramédicos en temas como alimentación saludable y prevención del sedentarismo, de especial relevancia durante la tercera edad.

“Y es que, al igual que en todo el país, la comuna de Castro presenta altos indicadores de sobrepeso, obesidad y enfermedades crónicas cardiovasculares tanto en su población urbana como en la rural”, señala el docente. Las causas del problema, agrega, se relacionan directamente con los cambios en la alimentación tradicional, actualmente basada en productos procesados, altos en grasas, sodio y azúcares, así como en un mayor sedentarismo. “Como consecuencia, de acuerdo a los resultados arrojados el 2015 por los exámenes de medicina preventiva, EMP, el 67,6% de la población mayor de 15 años de la comuna tiene sobrepeso, siendo los mayores indicadores los que presentan los hombres de entre 50 y 54 años (89%) y entre 45 y 49 años (81,7%) y las mujeres de 30 a 34 años (79,9%) y de 50 a 54 años (78,9%), lo que impacta de manera central en  la calidad de vida de quienes padecen esta condición, situación que se refleja en que las patologías cardiovasculares son la principal causa de muerte en la comuna”.

Por ello, explica, y gracias a una inquietud presentada al respecto por la Corporación de Educación, Salud y Atención al Menor de la Municipalidad de Castro, delinearon un proyecto piloto dirigido especialmente a la población que se atiende en algunas de las postas rurales de la zona, debido a su menor acceso a centros sanitarios con diferentes programas preventivos ya en marcha, y en el que los protagonistas son los técnicos paramédicos que ejercen en estas unidades.

“Ellos cuentan con el reconocimiento de todas las personas a las que atienden, pues conocen en profundidad qué problemas de salud los afectan y cuáles son las dificultades que podrían tener para participar en cualquier intervención que ellos puedan diseñar, así que son los indicados para planificar actividades de manera que tengan la mayor cobertura posible. Además, de esa manera salimos del esquema tradicional de hacer intervenciones directas, para llegar a uno en el que capacitamos a quienes pueden replicar programas que les funcionan”, añade el profesor Opazo.

Esta capacitación se inició durante una primera visita realizada durante marzo de 2017 por el equipo académico de nuestra institución encabezado por el profesor Opazo e integrado por los docentes Pablo Quiroga y Marcelo Cano, de su misma adscripción, así como por la directora de la Escuela de Nutrición, profesora Soledad Reyes, y por el profesor Alejandro Bustamante, de la Unidad de Deportes. En esa oportunidad, y dirigidos a los técnicos paramédicos de cuatro postas rurales de la Península de Rilán y otras dos de las islas de Quehui y Chelín, así como a funcionarios municipales de las corporaciones involucradas, durante tres días entregaron  conceptos teóricos y elementos prácticos de la prescripción y la planificación de ejercicio físico, además de alimentación saludable, especialmente orientados a pobladores con factores de riesgo cardiovascular. Posteriormente, “a través de la plataforma U Cursos ellos han ido diseñando los talleres e intervenciones que esperan implementar, por lo que han subido sus propuestas de planificación al respecto y, en este momento, están ya en la parte de la ejecución del taller”, explica.

Proyecciones a otros sectores rurales

En una segunda visita los académicos conocieron la realidad en la que ejercen los técnicos paramédicos participantes en esta iniciativa, de modo que pudieron constatar las condiciones en las que se desempeñan y los desafíos que deben enfrentar para la implementación de sus propuestas, que abarcan desde dificultades climáticas a escasez de recursos.

“Las intervenciones que están realizando son bastante diversas, en algunos casos los técnicos van a ir a las casas de las personas, como un grupo que va a trabajar con tres adultos mayores con grandes problemas de movilidad, para modificar sus pautas de alimentación y entregarles elementos para que mejoren sus condiciones. En otros, están interviniendo grupos de niños en edad escolar y tienen un taller dos veces a la semana en que les planifican actividades para estimular el desarrollo motor y mejorar la actividad física. En general la frecuencia de los talleres es de una a dos veces a la semana, considerando cuatro a seis semanas de intervención, pero la idea es que ellos los continúen o repitan cuando estimen necesario”, añade el docente.

Asimismo, informa que “para la tercera visita y final, que realizaremos durante este mes, esperamos ver ya los resultados de algunas de las intervenciones que ya están en marcha y hacer el cierre de las actividades”. Dependiendo de los resultados obtenidos, el equipo docente espera replicar esta iniciativa en otras comunas alejadas de los centros urbanos, “para mejorar el acceso a la salud de poblaciones que realmente no cuentan con recursos o programas cercanos”, finaliza.

El proyecto "Promoción de hábitos de vida saludable en sectores rurales de la comuna de Castro" forma parte de las inicitivas financiadas con el Fondo de Extensión 2016 de la Facultad de Medicina, cuyo objetivo es potenciar el vínculo de esta unidad académica con la ciudadanía. Lo anterior a través de diferentes acciones en colaboración con otras entidades, instituciones y/o sociedad civil, con el objetivo de mejorar la calidad de vida, la prevención en salud y la plena inclusión social de todas las personas.