Las actuales cifras de la Encuesta Nacional de Salud 2016-2017 indican un 74,2 por ciento de sobrepeso y obesidad y un 4 por ciento de obesidad mórbida en la población. Al mismo tiempo, los datos de JUNAEB muestran que un 24 por ciento de niños de primero básico tiene obesidad, de los cuales un 8 por ciento la presenta de manera severa, lo que equivale a la mórbida.
“Esto posiciona a Chile en los primeros lugares de obesidad en el mundo. Es gravísimo, porque significa un aumento sostenido en el tiempo, ya que la obesidad propiamente tal se duplicó en la Encuesta Nacional de Salud entre 2003 y 2016. Pero la obesidad mórbida, que es la más grave y con las peores consecuencias, se triplicó”, explicó el académico Fernando Vio.
El académico propone como medida urgente que esto sea considerado como “un problema nacional, que se llame a una Comisión Presidencial para coordinar y dirigir una política de Estado en promoción y prevención de la obesidad y las enfermedades crónicas no transmisibles”.
Vio señala que las consecuencias de la obesidad, como la diabetes, la hipertensión arterial y enfermedades cardiovasculares, los cánceres, los problemas osteoarticulares (artrosis, lumbagos, problemas articulares en general) y los problemas de salud mental, seguirán aumentando en el país.
“Lo que es más grave, están apareciendo en edades más tempranas. Ya hay niños que desde los 7 años presentan diabetes 2 del adulto, hipertensión arterial, hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia y otros problemas que antes no se veían”.
Curso gratuito y en línea
Frente a este panorama, destacados académicos del INTA y la plataforma EduAbierta del Programa Transversal de Educación de la Universidad de Chile diseñaron el curso gratuito y en línea "Salud escolar y prevención de la obesidad infantil", que comienza con la charla magistral vía streaming "Situación nutricional de Chile: ¿seguiremos engordando los chilenos?" el miércoles 18 de abril a las 19.00 horas en la plataforma EduAbierta.
Y es que hay unanimidad en el mundo académico en que lo central debe ser la formación de niños y niñas a través de los hábitos de vida y de alimentación que adquieran durante la vida escolar. Así, se han adoptado medidas y programas intersectoriales con especial atención en el sistema educacional, a fin de frenar el daño y promover la salud y la calidad de vida desde las edades más tempranas.
El curso está dirigido a los integrantes de las comunidades educativas (escolares, profesores, profesoras, asistentes, directivos, padres, madres y apoderados), a los proveedores de servicios (casinos, quioscos, gimnasios y otros) relacionados con la alimentación, actividad física y salud de las y los estudiantes y, también, a las y los funcionarios de gobiernos locales y nacionales que trabajan en el tema, en Chile y en América Latina.